Tribunal en marcha
¬ Juan Manuel Magaña viernes 27, Jul 2012Política Spot
Juan Manuel Magaña
El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación inició el análisis de los juicios de inconformidad presentados en contra de los resultados de la elección presidencial, entre los que destaca el promovido por la Coalición Movimiento Progresista.
Es abrumador el trabajo que le espera por el elevado el número de impugnaciones interpuestas ante el tribunal, mismo que informó haber recibido 364 recursos contra los comicios por la residencia, tres de los cuales solicitan la invalidez total de proceso, y el resto señalan anomalías diversas en los cómputos distritales.
Al conjunto de quejas por la comisión de delitos electorales hay que sumar las acusaciones sobre el flujo de recursos supuestamente ilícitos a la campaña del abanderado presidencial del PRI, Enrique Peña Nieto, que forman parte de las pruebas supervenientes presentadas por la coalición de izquierdas y que deberán ser analizadas por los magistrados.
Por lo pronto, la Sala Superior ordenó al IFE que informe al PRD, a través de su representante ante el Consejo General, sobre la admisión y trámite que se dio a la queja interpuesta en la Junta Local Ejecutiva de Durango en contra de Peña, por rebasar los topes de gastos de campaña fijados para el proceso electoral. Todo por una apelación del PRD ante una omisión del IFE.
También la Sala Superior confirmó la resolución del Tribunal Electoral de Jalisco, que ratificó la amonestación pública impuesta por el instituto electoral local al PRI, por la fijación de propaganda electoral en un accidente geográfico en ese estado.
Además rechazó siete demandas de ciudadanos que exigían la anulación de la elección presidencial, ante la “falta de legitimidad” de los solicitantes, aunque se ofreció analizar los argumentos de esos ciudadanos en la resolución de la inconformidad promovida por la coalición de izquierda.
Los casos anteriores ilustran un poco la tarea, algo tediosa, que tendrá que hacerse hasta el 6 de septiembre, cuando llegue la hora.
Para despejar toda duda que pudiera haber sobre la validez de los comicios, el TEPJF deberá actuar con total apego a la letra y al espíritu de las disposiciones constitucionales, legales y reglamentarias.
Como hace seis años, el tribunal está bajo la mirada de la nación, pero lo distinto es que el juzgador estará siendo también juzgado en cada paso, pues hereda el desprestigio de aquel entonces, cuando los magistrados avalaron el triunfo ilegítimo de Felipe Calderón.
Para cumplir a cabalidad con su tarea, el tribunal tendrá que desvirtuar en forma convincente y con argumentos legales sólidos los distintos recursos de impugnación de estos comicios, cosa que no se antoja nada fácil. Están en juego las bases de la democracia del país y la perspectiva de gobernabilidad en el siguiente sexenio.