15 millones 535 mil 117 personas votamos por López Obrador
¬ José Antonio López Sosa viernes 13, Jul 2012Detrás del Poder
José Antonio López Sosa
El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación tiene en sus manos la elección federal, en el derecho está impugnarla o aceptarla, al final es esta autoridad judicial que emitirá el fallo y dará certeza jurídica al proceso.
Más allá de la calificación de la elección, que a más tardar tendrá que llegar en los primeros días de septiembre, es interesante rescatar los números de la elección de acuerdo a los resultados finales del año 2006 y del PREP en este 2012.
De acuerdo a la elección federal de 2006, Andrés Manuel López Obrador obtuvo 14 millones 756 mil 350 votos, hubo un conflicto postelectoral y severas críticas por el mismo, incluso una que otra mirada obsesiva contra López Obrador a lo largo de los 6 años pasados –e incluso a la fecha—.
Si estas gargantas profundas tuvieran razón, si la campaña negra de Antonio Solá (aquella del “Peligro para México”) fuese real, el sentido común indicaría que López Obrador obtuviera menos votos en la elección de 2012.
¿Qué sucedió al tiempo?, que Andrés Manuel López Obrador obtuvo más votos en 2012 que en 2006, de acuerdo al PREP el resultado final fue de 15 millones 535 mil 117 votos, es decir, 778 mil 767 votos más que hace seis años, me niego a pensar que sea producto de la casualidad o de la manipulación de masas a la que echan mano sesudos analistas políticos.
Aquellos que atacan sin sentido a López Obrador, denigran también a estos más de 15 millones de ciudadanos que votamos por él, la elección está sujeta a la calificación de los tribunales, de acuerdo al resultado actual. Enrique Peña Nieto ganó de acuerdo al PREP con 18 millones 727 mil 398 votos, es decir, solo 3 millones 192 mil 281 votos de ventaja, o sea 6.51% de diferencia.
En caso que la elección resulte válida por el tribunal, ¿qué piensa hacer Enrique Peña Nieto para convencernos a ese 31.64% de votantes que no le dimos el voto de confianza?, durante su campaña habló de unidad, de cambio, ¿cómo se promoverá este cambio en quienes no votamos por él?, severo reto tiene Peña Nieto.
Por otro lado, López Obrador tiene el derecho –al igual que cualquier candidato de acuerdo a la ley—de impugnar, de presentar pruebas y someterlas al tribunal, no veo por qué el escándalo por ello, el que nada debe nada teme y si no hubo irregularidades aunque fuesen cien auditorías no debe haber temor ni enojo.
Lo más fácil es decir que el perdedor se niega a reconocerlo en lugar de estar a favor de analizar con lupa el proceso antes, durante y después de la elección federal.
lopez.sosa@mexico.com
@joseantonio1977
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Con todo respeto me permito dirimir con su artículo en virtud de que,en las democracias se gana o se pierde sea cual fuere la diferencia de votos, o en su caso los votos sufragados a su favor,eso no quita la insesatez del candidato perdedor,y su siempre discurso faláz.