Chantaje vil
¬ Juan Manuel Magaña miércoles 11, Jul 2012Política Spot
Juan Manuel Magaña
El maltrecho líder panista, Gustavo Madero, ha dicho que a Enrique Peña Nieto no le alcanza la legitimidad para ser el próximo Presidente de México, por aquello de la ilegal compra y coacción del voto.
Eso suena a chantaje.
Quieren venderle caro su amor a Peña Nieto, igual que el PRI se lo vendió caro a Calderón hace seis años.
Y es simple chantaje, porque los panistas no se la van a jugar en serio, a pesar de la gravedad de las cosas que dicen.
Simplemente se están tratando de aprovechar de una situación creada por la impugnación de la elección que Andrés Manuel López Obrador decidió hacer.
Ese chantaje incluye el amago de que podrían ir más allá, claro. Pero también la insinuación de que tranquilamente no irán más allá de las palabras.
Véase lo dicho por Josefina hace unos días: por un lado hace un llamado al reconocimiento de los resultados de la elección y por el otro, convoca a que el PRI y el PAN realicen un periodo legislativo extraordinario para sacar dos reformas pendientes, la laboral y la política.
Lo que pide Josefina es una finta. No es lo que quieren los panistas, que en realidad no saben lo que quieren.
Lo que ahorita pueden querer los panistas es lo que quiera Calderón, autoritario como ha sido con ellos.
Y ya parece que a Calderón, ya con un pie fuera del gobierno y, como dicen, con la cola entre las patas, es lo que realmente le interesa. No, él precisa de algo más personal, menos altruista.
Por eso, salió antier con que es inaceptable “la compra de votos” y que es necesario aclarar el asunto del reparto masivo de monederos electrónicos de las tiendas Soriana y el Banco Monex.
Nótese el lenguaje. Incluso hizo votos porque la autoridad rectifique de inmediato y castigue si debe castigar tal hecho.
No obstante, opinó que está por verse si este hecho sea suficiente para descalificar la elección presidencial y solicitar su anulación.
Madero aprieta. Josefina afloja y aprieta. Calderón aprieta y afloja. Se la quiere cobrar. Requiere de muchas seguridades para el futuro. Y él cree que Peña Nieto es ahora él.
Como sea, con esos panistas, ha de ser difícil ser Peña en este momento. El priísta, después de un relativo silencio ya por lo menos dijo que los señalamientos de compra de votos son montajes que han engañado a varios personajes, entre ellos a Calderón.
Está bueno. Y lo que falta.