Calderón y la pobreza
¬ Augusto Corro martes 26, Jun 2012Punto por punto
Augusto Corro
En una entrevista con el diario El País, el ex presidente Vicente Fox remarcó que con Calderón se volvió a la pobreza.
Como sabemos, Fox fue el primer presidente de México de extracción blanquiazul. En los últimos días, el ex mandatario decidió enfrentarse a Calderón y a su propio partido.
Quizá esta rebeldía del guanajuatense representó la puntilla a las aspiraciones de Josefina Vázquez Mota en busca de la Presidencia de la República. En la entrevista no tuvo empacho en elogiar los logros en su sexenio panista. Sobre el gobierno de Calderón, el guanajuatense afirmó que goza de estabilidad financiera.
Aunque sabemos muy bien que México tiene una fabulosa cantidad de dólares en su reserva internacional, también somos testigos de que millones de mexicanos viven en la pobreza. El guanajuatense señaló los errores del gobierno calderonista de grueso calibre, como son el gran déficit en empleo y en el tema de la droga y los cárteles.
Durante su candidatura rumbo a Los Pinos, Calderón se comprometió a atacar el problema del desempleo. No pudo. Millones de personas, sin esperanza de conseguir trabajo, se dedicaron al empleo informal.
Desde el inicio de su gobierno, Calderón optó por erradicar a la delincuencia organizada. En varios años de lucha, los resultados fueron negativos para la sociedad mexicana: más de 60 mil personas muertas y el tejido social hecho trizas. “Me parece que nunca se debió haber metido al Ejército en las calles. Hay un sinnúmero de violaciones a los derechos humanos”, dijo Fox.
En el tema de la política y sobre su llamado a votar por el abanderado presidencial puntero (Enrique Peña Nieto, del PRI), el panista aseveró que éste radica en la idea de que el priísta no busca una dictadura, sino una coadyuvancia entre el Congreso y Ejecutivo.
Negó ser un traidor a su partido y a sus ideales.
También contestó que no siente odio por Andrés Manuel López Obrador, aunque lo calificó de fanático de sí mismo y que México no puede ser Venezuela.
López Obrador “tiene un pensamiento de hace 100 años: populista, demagogo, engañoso, mentiroso, y que quiere imponer su ley. Todavía hoy día con 17 puntos de desventaja en las encuestas, dice que va por delante. ¿Cómo puede creer la gente en este personaje?”.
En este renglón, el ex mandatario volvió a demostrar su inquina contra el abanderado de las izquierdas, no obstante que en una reunión, con motivo de la visita papal, fue a saludar de mano a su enemigo político. Finalmente, externó su opinión sobre el movimiento estudiantil “#YoSoy132”, como una creación de los medios de comunicación, “y de López Obrador, originalmente”.
De hecho, lo que manifestó Fox no fue nada nuevo. Así lo expresó en entrevistas que concedió a diferentes medios de comunicación. Lo interesante del caso es que el ex presidente reconfirmó su rechazo a las tesis panistas que lo llevaron al poder, como el primer presidente de México egresado de Acción Nacional. Fox se convirtió en un experto en echarle sal a las heridas.
ERRORES
Durante varios días seguirá el cuestionamiento a la Armada de México sobre su equivocación en la captura del hijo de “El Chapo” Guzmán, conocido como “El Alfredillo”.
¿Quién autorizó que, sin corroborar la identidad de los detenidos, se lanzara la noticia precipitadamente?
Sobre todo, ¿en qué información se apoyaron las autoridades para obtener los resultados tan negativos?
Como informamos, dos jóvenes, Félix Beltrán, de 23 años, y su hermano Kevin, de 19, fueron aprehendidos por los marinos. El primero fue señalado como el hijo de “El Chapo” Guzmán, erróneamente.
A partir de ese fiasco, surgieron un sinnúmero de preguntas a las que tendrán que responder las autoridades. Por ejemplo, deberán explicar si la información que tenían para detener al supuesto vástago del capo les llegó de la DEA o se derivó de sus propios “servicios de inteligencia”.
De todas maneras, los representantes de la ley actuaron irresponsablemente y evidenciaron que la violación a los derechos humanos es algo no se toma en cuenta en su manera de actuar arbitraria.
Después de la detención fallida de “El Alfredillo”, quedó en entredicho la efectividad de la Armada de México, que en otro tiempo fue elogiada por las agencias de inteligencia de Estados Unidos, debido a la formalidad y seriedad con la que combatía a la delincuencia organizada. Es decir, en el extranjero se tenía mayor confianza a los marinos en las acciones contra los narcotraficantes, sobre cualquier autoridad en México, incluido el Ejército. Los marinos enseñaron el cobre y la supuesta captura de impacto de “El Alfredillo” se concretó en una acción desaseada y falta de coordinación. ¿Quién pagará los platos rotos? ¿Nadie?
VIOLENCIA INCONTENIBLE
A la hora de escribir estas líneas empezó a circular la noticia de una balacera en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), terminal 2, a las 8.30 horas.
Perecieron tres policías federales. Los hechos se registraron en la zona de restaurantes y comida rápida. ¿El móvil? Un posible altercado entre los propios agentes, o simplemente se les adelantaron los asesinos, según las primeras versiones.
¿Qué provocó la tragedia realmente? ¿Lo sabremos? Ese acto violento forma parte de la ola de sangre que recorre todo el país.
¿Dónde se puede conseguir paz y tranquilidad? Los hechos delincuenciales empiezan a verse como algo común, cotidiano. Imagínese la impresión que se llevaron de nuestro país los viajeros extranjeros. ¿De qué sirve tener atiborrado de policías federales el mencionado aeropuerto? ¿Y las medidas preventivas? ¿Dónde quedó todo ese alarde de seguridad? Por cierto, estos abusivos representantes de la ley deberían ser exhortados a controlar sus conductas de prepotencia. ¿Habrá algún inspector que los vigile?