Indicios
Ramón Zurita Sahagún martes 26, Jun 2012De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
Dos de las siete entidades que elegirán gobernantes el próximo 1 de julio, parecen tener decididos los comicios.
Los números que generan las preferencias electorales son tan abrumadores que hasta se establece, en tono jocoso, que no habría necesidad de realizar el proceso electoral. Distrito Federal y Chiapas revelan en sus sondeos que el margen de triunfo de los candidatos postulados por el PRD y PRI, respectivamente, serán superiores al experimentado por el partido tricolor en el Estado de México el año pasado.
En aquella ocasión, el hoy gobernador Eruviel Ávila Villegas obtuvo una cifra superior al 60 por ciento de los sufragios emitidos, dejando muy rezagados a los candidatos postulados por la izquierda, Alejandro Encinas Rodríguez y la derecha, Luis Felipe Bravo Mena.
Pocos son en la actualidad los fenómenos electorales que reciben cifras superiores al 60 por ciento de los votos, desde la última década del siglo pasado en que los comicios se volvieron sumamente competidos.
Lo sucedido en el Estado de México se coloca fuera de la normalidad existente, como también lo harán los triunfadores en el Distrito Federal y Chiapas, si es que las urnas ratifican esos pronósticos.
Dos nombres propuestos por partidos en los que no militan son los que muestran esas raras estadísticas de gran popularidad y sitúan a esos partidos como posibles ganadores de la contienda del próximo domingo.
Miguel Ángel Mancera Espinosa es el candidato nominado por la izquierda en la capital del país, quien trabajó en la administración perredista de Marcelo Ebrard, sin militar en los partidos de izquierda.
El bajo perfil con que se manejó durante su gestión como procurador y el que el Distrito Federal registre un bajo nivel delincuencial, comparativo con otras entidades, posicionó a Mancera Espinosa en la ruta hacia la candidatura.
En el camino dejó a los hoy candidatos al Senado de la República Alejandra Barrales Magdaleno y Mario Delgado Carrillo y en plena campaña arrancó como favorito y en el transcurrir de las semanas dejó atrás a las candidatas del PRI y del PAN, quienes se reparten entre ellas menos del 30 por ciento de los votos en disputa.
Mancera no es un candidato carismático, tampoco simpático, mucho menos se le considera un político formado, pero cuenta a su favor con que los otros partidos presentaron candidatas sin arrastre y que los partidos de izquierda gobiernan desde hace 15 años el Distrito Federal.
También obra en su favor que el gobierno de Marcelo Ebrard, con sus bajas y torpezas, cuenta con amplio reconocimiento de los ciudadanos que habitan la capital del país.
En el caso de Chiapas, los priístas pretenden recuperar un territorio perdido hace doce años ante candidatos tránsfugas de su partido, los que han gobernado el estado en forma desastrosa. Las administraciones de Pablo Salazar Mendiguchía (en la cárcel) y Juan José Sabines Guerrero, se encuentran englobadas en el mismo terreno, el desgobierno, el populismo y la desidia de los gobernantes y sus equipos de trabajo.
Por eso resulta curioso que el candidato propuesto por el PRI, Manuel Velasco Coello, reciba tanto respaldo ciudadano. Velasco Coello no es siquiera militante del PRI, ya que su partido de origen es el Verde y cuenta con el aval del actual gobernador (Sabines Guerrero), al que los electores de Chiapas rechazan en forma abierta.
Y es aquí donde se da la curiosa coincidencia de que el candidato que marca el ritmo es el del Verde apoyado por el PRI, mientras que la ahora ex priísta María Elena Orantes que fue respaldada por el PRD no levanta en las encuestas.
Hasta antes de la nominación de Manuel Velasco, Orantes disputaba con él la posibilidad de competir con las siglas del PRI y mostraba encuestas que le resultaban favorables. Su paso a la izquierda le restó simpatías y las posibilidades de ganar son escasas, con menos del 30 por ciento del respaldo de los electores potenciales. El fenómeno Velasco Coello es singular, ya que el verde-priísta cuenta con una gran popularidad, mucha de ella basada en el recuerdo de su abuelo que gobernó la entidad hace cuarenta años.
Por eso de cumplirse los números que reflejan las encuestas, los candidatos de la izquierda en el Distrito Federal y del Verde-PRI en Chiapas, pueden otorgar una gran dotación de sufragios para los candidatos presidenciales de esas alianzas. Al mismo tiempo los dos ganadores de esos gobiernos se pondrían en la línea delantera de una eventual candidatura presidencial, si es que sus gobiernos resultan lo suficientemente acertados como para refrendar la voluntad ciudadana expresada en las urnas.
CRECE LA VIOLENCIA
Ya no resultan sorprendentes los hechos de violencia que se suceden en todo el país. Ningún sitio está exento de ello. Los hechos violentos no han descendido en los estados con mayor recurrencia en el tema como Tamaulipas, Nuevo León, Coahuila, Michoacán, Durango, Sinaloa y Veracruz, que en otros donde son eventos más aislados. Sin embargo, lo sucedido en la terminal dos del aeropuerto internacional de la Ciudad de México motiva asombro.
Tres personas murieron durante un enfrentamiento ocurrido al interior de la central aérea, entre los que encontraban policías federales, asignados en ese sitio. Para la jornada electoral se han redoblado los dispositivos de seguridad, para evitar que los comicios se vean manchados por la violencia.
Todos los cuerpos de seguridad y las fuerzas armadas se mantendrán alertas en previsión de cualquier tipo de incidente que pudiese surgir.
CLOUTHIER CON AMLO
Manuel Clouthier Carrillo se incorporó al equipo de Andrés Manuel López Obrador, quien lo anunció como su fiscal anticorrupción, en caso de ganar los comicios presidenciales el 1 de julio.
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