Los “bisnes” Sáizar-JVM
Francisco Rodríguez martes 26, Jun 2012Índice político
Francisco Rodríguez
Igual que muchos, desde que la señora “diferente” Josefina Vázquez Mota diera a conocer que en su bien llamado “gabinete de fantasía” formaría filas la señorita Consuelo Sáizar, me pregunté el por qué.
Primero, porque de acuerdo a quienes dicen estar enterados de la res publica o cosa pública, la señorita Sáizar originalmente habría sido llevada y ascendida en cargos gubernamentales de la mano de la maestra Elba Esther Gordillo, declarada por la candidata panista cual su archi-enemiga favorita… aunque antes le haya dicho melosa, falsa, una y cien veces, “querida amiga”.
Luego porque, si como dice la que también fuese secretaria de Educación Pública durante la primera mitad del fallido y corrupto sexenio calderonista, los elbistas no la dejaron trabajar… ¿cómo es que ahora premia a una de ellas haciéndole el favor de mencionarla cual su acompañante en las tareas de gobierno que, soñadora, dice va a encabezar desde diciembre próximo?
La respuesta a mis porqués llegó muy rápido.
Una fuente siempre confiable me explica que en esta relación Sáizar-Vázquez Mota está presente el viejo refrán “with money dances the dog”, jejeje.
De acuerdo a ello, hay un truculento y perverso contubernio entre Josefina y Consuelo que data del paso por aquella en la SEP, cuando la segunda aún ocupaba la titularidad del Fondo de Cultura Económica y que, por tal, fue la ahora candidata presidencial del blanquiazul quien la impulsó a la titularidad de Conaculta que la nayarita ocupa hasta ahora.
¿Y en qué consistía el “bisnes”?
En entregar a Editorial Pegaso, que por su constitución no debe licitar ninguna de sus adquisiciones pues sólo le trabaja a las dependencias de gobierno (algo similar a lo que sucede con Turissste) la elaboración de todos los materiales didácticos y libros de educación básica y secundaria que la misma SEP y la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuito debe elaborar y entregar a los estudiantes.
Pero eso no es todo. Compras millonarias de papelería y enseres de oficina también se realizaron a través de esta editorial a precios inflados de hasta 10 veces su valor, de acuerdo a mi informante.
Ojalá que el titular de la Auditoria Superior de la Federación (ASF) Juan Manuel Portal y los candidatos tomen nota de este enorme desvío que, por lo demás, no sería el primer manchón sobre la honradez de la señora que, ya se ve, no es tan “diferente” al resto de quienes cobran en los altos cargos de la nómina federal.
Y es que, sin duda, la gestión de Vázquez Mota como titular de la Sedesol (2002 a 2005) y, claro, de la SEP ha estado marcada por dos constantes, la incompetencia y la corrupción.
Baste mencionar que en Desarrollo Social fue objeto de auditorias por parte de la ASF que derivaron en 201 observaciones por irregularidades, así como la promoción de 306 acciones y la emisión de 192 recomendaciones.
Simplemente en 2004 fue severamente cuestionada por el órgano fiscalizador por haber realizado pagos por servicios personales y honorarios no autorizados ni acreditados por un monto de 74 millones de pesos.
Pero su tránsito por la SEP fue aun más patético. Ahí, de 2007 a 2009, Vázquez Mota fue objeto de 38 auditorías por parte de la ASF, que derivaron en 533 observaciones, 740 acciones promovidas y 493 recomendaciones, por lo cual el órgano de fiscalización le impuso la recuperación de 9 mil 138 millones de pesos.
La señora Vázquez Mota acató “puntualmente” la instrucción, y recuperó 1.3 millones de pesos. Tan sólo el 0.01 de lo que correspondía.
Índice Flamígero: La corrupción en la SEP durante la gestión de Vázquez Mota alcanzó prácticamente a todos los niveles de mando. Un caso: el de Edgar Octavio Ibarra Morales, quien al ser designando en 2007 como director general de Recursos Humanos, rentaba un modesto departamento de interés social en la unidad habitacional Copilco-Universidad. Y hoy en día Ibarra tiene entre otras propiedades un penthouse en Santa Fe cuyo valor alcanza el millón dólares. + + + Y ya sólo quedan 157 días a esta corrupta gestión de los panistas, de cuyas tranzas iremos platicando en unos días más.