Ferrari: freír papitas
¬ Juan Manuel Magaña viernes 1, Jun 2012Política Spot
Juan Manuel Magaña
Cuando se dice que no hay motivo para “apanicarse”, lo único que se consigue es que todo el mundo corra hacia la puerta de emergencia.
Y eso es exactamente lo que provocó el ocurrente Bruno Ferrari, secretario de Economía de Calderón, con su broma o ingenuidad, luego que el crimen organizado incendió 49 camionetas y tres plantas de la empresa Sabritas. “Se trata de un hecho aislado”, soltó el relajado funcionario, “las inversiones en Michoacán y Guanajuato siguen llegando”.
Pero nadie se calmó. Estados Unidos, el Consejo de Empresas Globales, que reúne a 29 empresas multinacionales, y la Confederación Patronal de la República Mexicana condenaron los ataques del pasado fin de semana ocurridos en cinco ciudades de Guanajuato y Michoacán. El primero dijo: yo hago mi propia investigación con personal de mi embajada, que ya está en contacto con los directivos de Sabritas, empresa propiedad del gigante refresquero estadunidense PepsiCo. Para qué esperar a ver si la PGR le entra y a ver qué encuentra.
El segundo afirmó que esa clase de hechos afectan el desarrollo de México.
Y los patrones, contrario a lo que piensa Ferrari, consideraron que los ataques inhiben la inversión productiva y violentan la paz de la sociedad. Pidieron que los gobiernos locales y el federal se coordinen no sólo para castigar el hecho, sino para garantizar que no vuelva a ocurrir algo similar.
Pero la cosa, según Ferrari, no es motivo de pánico entre inversionistas. Ahora hay unos 100 policías estatales y federales que resguardan los centros de distribución de Sabritas, pero no hay por qué “apanicarse”. A ese paso, ¿habrá suficientes policías para dar seguridad a tantas empresas, sin descobijar a los ciudadanos?
Es textual: “Todo está bien”, aseguró Ferrari. “No veo por qué los empresarios tienen que preocuparse por este caso, en el que se respondió de acuerdo con un protocolo”. Es la insensibilidad. Es el negarse a ver el efecto que produce seguir pateando el avispero.
Ya lo dijo el nuevo gobernador de Michoacán, Fausto Vallejo: aquí el Michoacán seguro está completamente rebasado. O sea, la guerra está perdida, ahí en el estado de Calderón adonde, como dijeron alguna vez otros empresarios, éste “se aventó como el borras”.
Así que esos fuegos que no amilanan a Ferrari, él y su jefe deberían saber que sirven para algo más que freír papitas.
