Silva, el de Tuxpan
Ramón Zurita Sahagún martes 27, Mar 2012De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
Es visto como un incidente menor, de los muchos que suceden diariamente en el país, pero guarda mucho de fondo la irrupción de las fuerzas armadas en el rancho “La flor de María”, propiedad del empresario y presunto delincuente Francisco (Pancho) Colorado. Ocurrido en el municipio de Tuxpan, Veracruz, la entrada de los militares dejó saldo de dos muertos y una veintena de detenidos, aunque el propietario del predio no fue aprehendido.
Comparativamente a lo que señalamos, tan solo el fin de semana en un poblado de Chihuahua, un enfrentamiento entre policías y delincuentes dejó saldo de diez muertos.
Sin embargo, el suceso ocurrido en Veracruz tiene otro derrotero, ya que deja como muestra el permeado que despliega el crimen organizado en los ámbitos políticos y empresariales y la cada vez más constante vinculación de los grupos delincuenciales con los altos mandos políticos.
Pancho Colorado como es conocido el sujeto en cuestión mantiene una cercana relación con el alcalde de Tuxpan, Veracruz, Alberto Silva Ramos, cuyo hermano funge como secretario particular del hoy prófugo.
Vinculado cercanamente a políticos del PAN y del PRI, Colorado fue beneficiario de fuertes contratos con Pemex, basados en su cercanía con Juan Bueno Torio (hoy senador y candidato a diputado federal).
Su rancho es limítrofe con el del poderoso empresario Roberto Hernández y su tejido de relaciones llega a los niveles de que uno de sus hermanos (Miguel) ha sido candidato de los distintos partidos nacionales.
Primero fue candidato del Partido de la Revolución Democrática a la alcaldía de Poza Rica y luego fue postulado por Acción Nacional a la diputación federal por ese mismo distrito, perdiendo en ambas ocasiones.
Colorado fue señalado por sus presuntos nexos con los grupos delincuenciales desde los tiempos de la administración de Fidel Herrera Beltrán, aunque el gobierno federal se desistió de actuar en su contra por su alianza con el panismo, ya que fungió como operador de Miguel Ángel Yunes Linares en la zona norte del estado.
Incluso se sabe que fue denunciado ante el Ejecutivo federal y nunca se actuó en su contra, hasta ahora que irrumpieron las fuerzas armadas en su propiedad, pero fue alertado y se dio a la fuga.
Sin embargo, a la salida del gobierno de Herrera Beltrán y la llegada de Javier Duarte de Ochoa, Colorado buscó a uno de los principales operadores del actual gobernador, con el que se relacionó estrechamente.
Ese personaje es Silva Ramos, considerado como el más consistente ideológicamente de entre los pupilos de Fidel Herrera y al que, supuestamente, está preparando para su sucesión el propio gobernador Duarte de Ochoa.
La relación entre Colorado y Silva se estrechó a tal grado que se deterioró la de Herrera Beltrán con el actual alcalde de Tuxpan.
Y ahora, aunque se trata de mantener en la mayor discreción posible, se investiga la relación de Silva Ramos con el prófugo (Pancho) Colorado, la vinculación del hermano del alcalde con el presunto delincuente y el grado de cercanía que mantenía con hombres poderosos del panismo como Miguel Ángel Yunes Linares y Juan Buen Torio, que permitió que el hermano Miguel Colorado fuese candidato a diputado federal por el distrito de Poza Rica, aunque perdió en las urnas.
La importancia del suceso es relevante, considerando que se mantienen dudas, sembradas desde el propio Ejecutivo federal, sobre la posible penetración de la delincuencia organizada en los comicios de Michoacán y la cercanía del próximo proceso electoral presidencial, por lo que toma relevancia la vinculación y cercanía de Colorado con personajes como los mencionados Yunes Linares y Bueno Torio, panistas y Silva Ramos, priísta.
48 HORAS
No se trata del título de una cinta estadounidense que generó grandes ingresos de taquilla en los noventa, sino del plazo de 48 horas que el IFE dio a los distintos partidos políticos para que recompongan el balance de candidaturas de género y otorguen mayores espacios a las mujeres, tal y como lo considera la legislación vigente.
Los partidos que pretendían darle menores espacios a las mujeres son el Revolucionario Institucional, el Verde, Acción Nacional, Movimiento Ciudadano y el del Trabajo. El PRD parece cumplir con los requisitos de distribución de género establecidos en la ley y el que si garantiza la cuota de, cuando menos, el 40 por ciento de candidaturas para las mujeres es el Partido Nueva Alianza.
También las coaliciones integradas por el PRI-Verde, bautizada como Compromiso por México y la del PRD-PT-MC, llamada Movimiento Progresista, fue exhortada para que cumplan con los requisitos de ley.
De acuerdo con la información difundida por el IFE, los partidos y coaliciones distan mucho de siquiera cubrir el 40 por ciento de las cuotas para mujeres y se encuentran por debajo del 30 por ciento.
Por eso, contarán con un plazo de 48 horas para recomponer sus candidaturas, ya que de no hacerlo serán amonestados públicamente y se les dará un nuevo plazo de 24 horas para hacerlo y de incumplir nuevamente se adoptarán otras medidas más drásticas.
Bajo esa premisa, los representantes ante el IFE de los partidos contendientes se comprometieron a cumplir con la cuota, para evitar ser sancionados.
Y es que el IFE pretende que los que no cumplan sean sancionados con un proceso de selección aleatoria, para no registrar a un número similar de candidatos hombres, con lo que quedaría cubierto el porcentaje de cada género.
PÁJAROS EN EL ALAMBRE
A qué grado estarán las intercepciones telefónicas que la candidata panista a la Presidencia de la República, Josefina Vázquez Mota, lo toma a broma y hasta saludos les manda a sus escuchas.
Sin embargo, la cuestión debe tomarse con la seriedad posible, ya que en anteriores procesos el tema dio mucha tela para cortar y se pretendió enjuiciar a autoridades espiadas bajo ese sistema ilegal.