Grave, el desempleo entre jóvenes mexicanos: OIT
* Especiales, Nacional miércoles 21, Mar 2012- La Organización Internacional del Trabajo señala que son 32 millones, de los cuales 6 millones están en la informalidad y 21% son “ninis”
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) resaltó que al igual que otros países del mundo, México enfrenta una crisis de empleo para los jóvenes entre 14 y 29 años de edad, que en el país representan 32 millones, de los cuales casi 6 millones se encuentran en la informalidad y el 21% del total no están registrados como empleados ni como estudiantes.
Thomas Wissing, director de la OIT para México y Cuba, precisó que aunque México comparte la crisis mundial en la materia, “está en la gloria”, pero la situación no es alagueña, que para contrarrestarla se requiere de un esfuerzo conjunto, pues no sólo con una reforma laboral se superará el problema.
En conferencia y durante la bienvenida que dio en el foro nacional “Trabajo decente para jóvenes”, Wissing dijo que la mayoría de empleos para integrantes de este sector es en una situación precaria, pese a que tengan estudios de posgrado o hablen varios idiomas.
“Según estadísticas analizadas por la OIT, la tasa de desempleo de jóvenes es, en todo el mundo, dos veces más alta que el promedio de la población económicamente activa y tras veces más alta que la de los adultos”.
En América Latina, continuó, las cifras son de casi 15% contra 5% de la Población Económicamente Activa (PEA) adulta y en México, 10% contra un 5.6%.
Es decir, abajo del promedio regional, pero con un notable aumento del empleo juvenil en condiciones de informalidad.
“En resumen, el reto de trabajo decente para jóvenes es complejo, sistémico y multidimensional, pues incluye factores demográficos, de género, de calidad educativa, de articulación laboral, de estructura económica y de política pública. No hay ni puede haber soluciones simplistas ni recetas mágicas o universales”.
Resaltó los bajos salarios que percibe ese sector de la población que en su mayoría es de dos a tres salarios mínimos.
Es decir, menos de 200 pesos diarios, por lo que ante la falta de oportunidades, flexibilidad de los empleadores y condiciones mínimas de seguridad social, muchos emigran o se dedican a la informalidad.
“Al no encontrar oportunidades de un trabajo decente, algunos extienden su permanencia en el sistema educativo y prefirieron adquirir especializaciones adicionales que supuestamente aumenten sus posibilidades de ser contratados o de recibir una remuneración más acorde con sus expectativas. Sin embargo, un alto nivel educativo no es garantía de una transición más fácil de la escuela al trabajo”, reiteró.
En este contexto, Miguel Ángel Carreón Sánchez director general del Instituto Mexicano de la Juventud (IMJ) expuso que los integrantes del sector en cuestión consideran que el factor más importante para conseguir empleo es la educación. Un 52.9% así lo considera, en tanto que ocho de cada 10 señala que se encuentra satisfecho con su empleo actual.
Paralelamente, el 32.6% dice que la principal referencia para buscar una actividad remunerada son sus amigos y conocidos.
Coincidió con la OIT en que la crisis económica mundial ha impactado en las tasas de empleo juvenil en México y subrayó que, en general, tienen horizontes de mediano y largo plazo en sus empleos.