¿Y… cuándo desalojamos?
Roberto Vizcaíno martes 23, Mar 2010Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
La visita es sólo “el reconocimiento de nuestra responsabilidad compartida a la hora de afrontar desafíos como la lucha contra los narcóticos y la importancia de construir instituciones que respetan el Estado de derecho y los derechos humanos, y ayudar a crear sociedades seguras y prósperas a ambos lados de la frontera”, indicaron
Sin ninguna duda, el encuentro que van a encabezar aquí la secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton; la secretaria de Seguridad Nacional, Janet Napolitano; el secretario de Defensa, Robert Gates; el director de Inteligencia Nacional, Dennis Blair; el asesor presidencial John Brennan ,y el jefe del Estado Mayor Conjunto, Michael Mullen, con los miembros del Gabinete de Seguridad del gobierno de Felipe Calderón, va a definir el “golpe de timón” que se dará al combate contra el narco y el crimen organizado en México.
Es por demás obvio que el Gabinete de Seguridad del presidente Barack Obama trae no sólo una nueva estrategia para la guerra que inició Felipe Calderón hace 3 años, sino la aplicación de 350 millones de dólares y planes que serán dirigidos por agentes y funcionarios estadunidenses que comenzarán a operar en territorio mexicanos en forma inmediata.
Ha trascendido que todos estos funcionarios llegan a México con el antecedente de que desde hace al menos 8 meses se da la capacitación de agentes mexicanos en varios establecimientos e instituciones norteamericanas por parte de agencias como la DEA, el FBI y hasta la CIA.
¿Por qué no se había dicho nada de esto aquí en México?
La respuesta oficial es que se esperaba que se concretara la visita de todos los funcionarios estadunidenses que hoy van a llegar a México, para darlo a conocer.
Por lo pronto, se sabe que esa capacitación de grupos mexicanos ha creado la mejor comunicación con las agencias estadunidenses, lo cual servirá para aplicar los programas diseñados en Washington para ser realizados en territorio mexicano.
Para los analistas y políticos, este encuentro es de la mayor importancia. Estos funcionarios estadunidenses no han estado juntos en ningún otro país.
Por eso, vale la pena preguntar: ¿en qué condiciones se da esta visita del gabinete de Seguridad del presidente Oabama a México?
“La verdad es que es una reunión entre representantes de un Estado y un gobierno sólidamente constituidos, que traen una agenda muy clara y con argumentos y respaldos por demás precisos”, indican.
Del lado mexicano están “representantes de un gobierno debilitado, fallido, sin rumbo, que no sabe para dónde va… será un encuentro absolutamente desigual”, agregan
Por si fuese poco, “en esta ocasión no se escuchan los pronunciamientos por parte de diferentes los actores políticos… pareciera que para el conjunto de los partidos políticos o de los legisladores, la reunión se considera estrictamente como un encuentro de gobierno, cuando de ahí puede depender la agenda binacional para los próximos años…” .
El contexto es por demás contrario para los intereses mexicanos: la debilidad en todos los sentidos del gobierno de Felipe Calderón, es inocultable; la ineficacia de la estrategia del combate al narco y a la delincuencia organizada es obvia; a nivel social es gravisimo el número de ejecutados y asesinados en esta lucha, 18 mil muertos…es en si una guerra fallida.
Hillary Clinton, Janet Napolitano, Robert Gates, Dennis Blair, John Brennan y Michael Mullen llegan en los hechos bajo el principio de que la situación en México en la presidencia de Felipe Calderón ha llegado a tales niveles de violencia, amenaza a la gobernabilidad, ejecuciones que es imperativo que los Estados Unidos lo salven.
Para ello, está ahí el Plan Mérida, dentro del cual se van a establecer los mecanismos para que operen en México agentes estadunidenses y para que funcionarios de las diversas dependencias que ellos encabezan, se hagan cargo de conducir de hoy en adelante la dirección de la guerra que Calderón va perdiendo.
El objetivo de la visita de este grupo a México lo dejó en claro P. J. Crowley, portavoz del Departamento de Estado, cuando dijo que la reunión será “emblemática” de la cooperación entre ambos países.
“Está basada en el reconocimiento de nuestra responsabilidad compartida a la hora de afrontar desafíos como la lucha contra los narcóticos y la importancia de construir instituciones que respetan el Estado de derecho y los derechos humanos, y ayudar a crear sociedades seguras y prósperas a ambos lados de la frontera”, indicó.
Dicen que la mula no era arisca…
Por eso, algunos analistas advierten que esta visita podría ser en los hechos el principio de una subordinación abierta de un gobierno no sólo abiertamente entreguista, sino colaboracionista que, ante su incapacidad para establecer programas de desarrollo, va a dejarse “conducir” bajo la apariencia de un esquema de cooperación que no puede darse entre Estados Unidos y México porque las desigualdades entre ambos son enormes.
Si alguien dudaba de que se preparaba en México una posible salida hacia el establecimiento de un Estado de excepción, ahora quizá no lo pueda dudar tanto.
LOS SOLDADOS NO SON POLICÍAS: Entrevistado sobre su visita a las indígenas Alberta Alcántara Juan y Teresa González Cornelio, quienes cumplen en el Centro de Rehabilitación Social Femenil de San José el Alto, Querétaro, una sentencia de 22 años acusadas de haber secuestrado a 6 agentes de la AFI el coordinador de los senadores del PRI, Manlio Fabio Beltrones indicó:
“Hay ineptitud… y el abuso que se está dando en algunos de los casos tenemos que atajarlo. Tenemos que encarecer mucho el trabajo o las recomendaciones de la CNDH, para que esos abusos no se presten o no se den con la frecuencia con que se están dando y con la impunidad que están apareciendo. Si algo preocupa y mucho, a los mexicanos hoy en día, es la violación reiterada de los Derechos Humanos.
“No hay lugar a donde vayamos nosotros, en donde no encontremos un caso mínimo de violación de derechos humanos que se esté dando. Yo soy alguien que apoya terminantemente y aplaude el trabajo de las fuerzas armadas en este país. Sobre todo el que hayan accedido ante su jefe, que es el Presidente de la República, para salir a apoyar a los cuerpos policíacos del orden civil, que no estaban presentando resultados.
“No obstante lo anterior, estoy convencido, como muchos otros, que las fuerzas armadas no tienen la preparación de cuerpos policíacos que nos puedan rendir resultados mejores, pero sin llegar a violentar las garantías individuales. Por eso es muy importante evitar que se vaya también a descomponer un cuerpo institucional, como son las fuerzas armadas”.
– Después de lo que pasó en Monterrey, no hay duda, ¿no?
“No tengo ninguna duda. No es el primer lugar donde ha pasado; ha habido algunos otros retenes donde por una equivocación, por llamarlo así, pierden la vida un conjunto de personas que no tenían nada que ver con la delincuencia, también en este muy buen trabajo que llevaron a cabo por allá en Cuernavaca, deteniendo a aquel delincuente, previamente perdió la vida una señora.
“Nosotros estamos pensando en que esa modificación -y hay una fuerte corriente dentro del Senado-, debe formar parte, quizá de una ley de excepción que le permita estar cierto número de meses, 18 meses, vamos a ponerlo, a las fuerzas armadas en calle, pero que deban sujetarse a las leyes del orden civil, no al fuero militar, en el momento en el que estén actuando, para entonces tener mayor certeza que no se van a violentar los derechos humanos.
“Pero nosotros debemos hacerlo y debemos procurar que así suceda para garantía de todos, incluidas las fuerzas armadas”, concluyó.