La batalla de Puebla
Ramón Zurita Sahagún viernes 24, Feb 2012De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
Puebla serán un escenario de batalla electoral muy especial, ya que la disputa por los dos escaños senatoriales de mayoría enfrentará a cuatros aspirantes con los tamaños suficientes para ganar en las urnas.
Los cuatro proceden del mismo vientre político, aunque ahora, tres de ellos, representan a opciones distintas de las que los proyectaron en la actividad política.
Se trata de tres hombre y una mujer, que encabezan las respectivas fórmulas de los partidos o coaliciones que abanderan, pero que, lamentablemente, dos de ellos quedarán sembrados en el camino de la derrota electoral.
Los cuatro son considerados como buenas opciones, ya que se trata de políticos experimentados que han transitado por distintos cargos y que buscan ahora acceder al Senado de la República, desde el primero de septiembre.
Dos de esos personajes conocen ya el trabajo senatorial, mientras que los otros dos han accedido a otros cargos dentro de la administración pública federal, uno de ellos y la principal alcaldía del estado, la restante participante.
Sus coincidencias se basan en haber abrevado en las filas del partido tricolor, el que les permitió escalar varios de los principales cargos públicos que ostentan en su expediente, además de proyectarlos políticamente y dotarlos de la experiencia de que hoy gozan.
Blanca Alcalá Ruiz es la única mujer de este cuarteto de personajes que van a la cabeza de las respectivas fórmulas, por la que habrán de decidirse los ciudadanos que acudan a las urnas.
Ella es la única de los cuatro que se mantuvo leal al partido en que inició su carrera política y encabeza la fórmula que presenta este partido en Puebla.
Fue considerada como la candidata idónea al gobierno estatal, aunque fue frenada por el gobernador Mario Marín Torres, quien negoció la postulación de Javier López Zavala, derrotado en las urnas por la coalición que encabezó el hoy gobernador Rafael Moreno Valle.
La afrenta quedó saldada, ya que López Zavala intentó encabezar la fórmula senatorial priista en Puebla y fue desplazado por Blanca Alcalá, considerada como la gran favorita para adjudicarse la senaduría de mayoría.
Según los cálculos que reflejan las encuestas, será la disputa entre los tres ex priistas donde se radique la otra senaduría, la correspondiente a la primera minoría y a la que tendrá acceso el candidato que encabece la fórmula ubicada en segundo lugar en resultado de votos.
En esta contienda habrán de participar las cabezas de las fórmulas que presenta el PAN (Javier Lozano Alarcón), PANAL (Víctor Hugo Islas) y la coalición de izquierda (Manuel Bartlett Díaz).
Ninguno de los tres es conocido por un estilo suave de hacer política, por el contrario su fama es de duros, por lo que, incluso, podrían desplazar a los priistas hasta el segundo o tercer lugar, en caso de un descuido.
El panista Lozano fue, en sus tiempos de priista subsecretario de Gobernación y vocero del CEN del PRI y hasta compitió por una diputación federal por Puebla, pero cayó vencido en las urnas.
Su paso por la secretaría del Trabajo en la actual administración muestra su trabajo arduo y rudo, donde se significó como un combatiente que pretendía competir por el gobierno del Distrito Federal, por lo que tomó por su cuenta al Jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard Casaubond y sostuvo épicas batallas con los diputados de la LX y LXI legislaturas.
El neo petista Manuel Bartlett, es ampliamente conocido por la “caída del sistema”, método que le fue adjudicado por el lento conteo de los resultados electorales del 6 de julio de 1988, cuando Carlos Salinas de Gortari fue declarado ganador de la elección presidencial, en lo que algunos consideraron como un fraude electoral.
Arropado en la actualidad por sus antiguos detractores, Bartlett Díaz realizó una amplia carrera dentro el PRI que le permitió fungir como secretario de Gobernación y de Educación Pública, además de gobernador de Puebla y senador por esa entidad, cargo en que busca repetir.
Víctor Hugo Islas es el cuarto prospecto que busca acceder al nuevo edificio del Senado de la República, situado en la confluencia de las dos principales avenidas de la ciudad de México, Paseo de la Reforma e Insurgentes.
Víctor Hugo, varias veces diputado federal y local (actualmente lo es), cuenta con una amplia trayectoria partidista, ya que fungió como delegado en varios estados del país, Quintana Roo, Nayarit, Guerrero, Tabasco, etc. y se desempeñó como presidente estatal del PRI en Puebla.
Hoy amparado por su sobrino (Gerardo Islas), quien preside el Partido Nueva Alianza en Puebla, se marchó del PRI, convencido de que puede vencer a los tres contendientes que enfrentará en las urnas. Islas se significó por sus constantes amenazas de marcharse del PRI, aunque siempre fue retenido con ofertas de posiciones electorales y en esta ocasión ni siquiera hubo la posibilidad de ser tentado.
Por eso, la batalla por los escaños poblanos será una de las más interesantes que habrán de presentarse el primero de julio y cualquier descuido de los considerados favoritos, podría dar margen para que se les cuele uno o dos de los que no lo son.
ENCUESTAS CALIENTES
Cierto o falso que el Presidente Calderón hubiese hablado de supuestas encuestas en las que se acorta la distancia entre los dos principales (pre)candidatos mejor posicionados, la realidad es que las cifras calentaron el ambiente político. La posibilidad de que Josefina Vázquez Mota se situara a solamente cuatro puntos del priista Enrique Peña Nieto, aceleró el ritmo cardíaco de muchos.
Por lo pronto, Presidencia de la República negó que el Ejecutivo federal se hubiese referido al tema, mientras que los adversarios del PAN censuraron la supuesta intromisión del Ejecutivo.
En la Cámara de Diputados, los legisladores panistas reventaron la sesión, para evitar la discusión del tema.