Despilfarro
¬ Augusto Corro lunes 20, Feb 2012Punto por punto
Augusto Corro
En síntesis, el gobierno de Calderón es malo, despilfarrador y corrupto. Lo anterior se desprende del informe presentado por la Auditoría Superior de la Federación ASF) sobre la Cuenta Pública del 2010.
En Diario Imagen leemos que “el actual presidente (Calderón) y sus colaboradores han participado en un verdadero festival de corrupción sin fondo, en el que han desaparecido o malgastado miles y miles de millones de pesos”.
Desde luego, se trata de corrupción en los más altos niveles de la administración pública que debe ser investigada y castigada en los últimos meses del gobierno calderonista. No hacerlo a tiempo, el olvido se encargará de llevar a cabo el “tradicional borrón y cuenta nueva”.
Los funcionarios corruptos una vez cumplida su “tarea” se alejan de la política, se van del país, o buscan el fuero protector de los legisladores que los convierte en seres intocables, porque los pone muy lejos del alcance del brazo de la justicia.
Sin embargo, algo tendrá que hacerse para castigar a todos aquellos servidores públicos que directa o indirectamente se dedican a saquear las arcas de la nación impunemente.
En el 2010, Año del Bicentenario de la Independencia y Centenario de la Revolución, realizar las fiestas patrias conmemorativas, fue un gran pretexto para que la delincuencia incrustada entre los servidores públicos realizará fraudes multimillonarios.
El monumento a la corrupción está representado por la Torre de Luz o Pus en el que todo mundo metió mano para robarse lo que quiso. La obra costó alrededor de dos mil millones de pesos por lo menos tres veces más del valor del proyecto original.
¿Y los ladrones? Bien, gracias. Disfrutan del dinero mal habido por la justicia mexicana lenta, ciega y sorda se los permite.
Desmenuzar la corrupción del gobierno calderonista en el 2012 nos llevaría a escribir muchos libros sobre negocios turbios que en las altas esferas de la política son vistos como el pan de cada día.
El saqueo del erario, incontrolable, tiene al borde de la quiebra a México y sus instituciones.
Para no ir tan lejos, basta saber que en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) existe la amenaza de despido masivo de trabajadores, porque las finanzas insuficientes para mantener las fuentes de empleo.
Los ejemplos de saqueo impune en diferentes dependencias son múltiples: la corrupción y la impunidad favorecen esa práctica condenable a todas luces.
Claro que es muy importante lo que informa la ASF sobre el despilfarro y corrupción del gobierno panista, aunque el castigo por el delito por peculado se haya convertido en algo etéreo, en una figura legal de adorno en nuestras leyes.
ESPECTACULAR
La semana pasada, Calderón inauguró un anuncio espectacular en el puente internacional de Juárez, Chihuahua, con la siguiente leyenda: “No more weapons!” (¡No más armas!).
Da tristeza ver como un asunto tan delicado, como lo es el contrabando de armas, es tratado tan frívolamente por la máxima autoridad mexicana.
Quizá la falta de seriedad sobre el asunto, ha llevado al gobierno estadounidense y a su Congreso a tratar sin ningún interés el tráfico de armamento.
Lo anterior se deduce de lo ocurrido con aquellos operativos fallidos, como Rápido y Furioso, que permitió el contrabando de miles de armas que llegaron a poder de los cárteles de la droga mexicanos.
En otras instancias y en otras condiciones Calderón, con actitud tímida, ha pedido a las autoridades estadounidenses que restrinjan la venta de rifles de alto poder con leyes más estrictas, porque ahora, cualquier hijo de vecino puede comprar todo tipo de armas y pasarlas de contrabando a México, con el destino que conocemos.
De este tema, que todo mundo conoce, salta a la vista, la debilidad del gobierno mexicano y sus secretarías de Estado para poner un alto a la política armamentista del país vecino, que poco o nada le importa, que más de 50 mil personas hayan sido privadas de la vida, con las armas que pasan de contrabando.
La debilidad del gobierno calderonista, débil y entreguista, ve en los anuncios espectaculares la mejor manera de clamar justicia en el desierto.
¿Y los conductos diplomaticos de plano ya no funcionan para plantear un ya basta al tráfico ilegal de armas? Parece que no. ¿Para qué sirve la Secretaría de Relaciones Exteriores? ¿Y la Secretaría de Gobernación debe actuar con esa tibieza ejemplar?
La presencia de México se encuentra muy devaluada en el foro mundial. No dejan de identificarnos como un país de narcos, donde “La Muerte” decidió instalar su reinado. Bien a bien no se sabe cuál es la política internacional de nuestro país. Por eso mismo, en Estados Unidos no le hacen ningún caso a Calderón, quien encuentra cómodo develar anuncios espectaculares en vez de implementar una política de respeto y atención por parte del vecino.
A TAPAR EL POZO
Ayer, ascendía a 358 el número de reos muertos en el incendio ocurrido en la prisión de Comayagua, en Honduras. Esa tragedia estaba anunciada. En Latinoamérica las cárceles son verdaderas bombas de tiempo y nadie parece importarle. Las masacres en los penales latinoamericanos se encuentran a la orden del día.
Los centros penitenciarios se encuentran abandonados por las autoridades.
Por ejemplo, en Honduras, el índice delincuencial es elevadísimo y esto produce, por lógica, un mayor incremento en la población penitenciaria: las prisiones no tienen cabida para un preso más. Esto no les interesa a las autoridades.
En la cárcel de Comayagua, el cupo de reos estaba superado varias veces. Es decir, el infierno era nada en lo que se vivía en ese lugar de reclusión. Y tenía que ocurrir esa mortandad de presos, para que se revisen las condiciones de los penales en Latinoamérica. De nada servirá. La aplicación de los derechos humanos es una materia que nadie aplica. En México menos.
