Cárdenas ¿ahora sí?
¬ Augusto Corro lunes 6, Feb 2012Punto por punto
Augusto Corro
Que el ex candidato presidencial del Partido de la Revolución Democrática, Cuauhtémoc Cárdenas, ahora sí apoyará a Andrés Manuel López Obrador en su segundo intento en la búsqueda de la Presidencia de la República.
La primera vez, el líder moral de los perredistas, como se le conoce a Cárdenas, asumió una conducta política que fue criticada acremente por propios y extraños. De plano, se hizo a un lado de la lucha política que libraba el tabasqueño. Lo dejó morir solo, como se dice coloquialmente.
A 15 días de las elecciones de julio del 2006, el fundador del PRD aceptó la chamba que le ofreció el entonces primer mandatario Vicente Fox para coordinar la Comisión Organizadora de la Conmemoración del Bicentenario de la Independencia, y del Centenario de la Revolución Mexicana. Después aventó la coordinación, pero el daño ya había surtido sus efectos.
El guanajuatense aprovechó el momento para calificar la actitud de Cárdenas como “un ejemplo de congruencia con sus ideales y un gran luchador por la democracia”.
Basta con echarle un vistazo a los diarios de aquellas fechas para comprobar que Fox inició una campaña para acabar políticamente con AMLO, además de que en el proceso electoral presidencial metió las manos, descaradamente, para favorecer a Calderón.
Cuando más se necesitaba la unidad en la denominada izquierda mexicana y principalmente en el PRD, el hijo del ilustre general Lázaro Cárdenas, actuó con una mezquindad que reflejaba el tamaño de su estatura política: la de un enano.
Y claro, si el líder moral no apoyaba a su compañero de partido, la misma conducta se repetía entre los cardenistas ¿Verdad Rosario Robles?
El fuego amigo a todo lo que daba afectó los resultados de una elección presidencial muy reñida. Tanto, que a la fecha la sociedad mexicana se encuentra polarizada por la manera en que el Partido de Acción Nacional se adjudicó el triunfo.
Anteriormente, cuando Cuauhtémoc participó en la lucha electoral presidencial ante Carlos Salinas de Gortari, todo mundo cuestionó la pasividad con la que aceptó su derrota.
El más interesado en defender su victoria optó por hacer mutis. El hecho provocó una serie de leyendas negras, entre otras una entrevista oculta entre Salinas y Cárdenas. ¿Hubo un arreglo político? Conste que es pregunta.
El premio a la mezquindad y al egoismo lo obtuvo Cárdenas al ser premiado por el Senado con la Medalla Belisario Domínguez. El mayor adversario del PRD, Calderón, le entregó la presea alusiva en una ceremonia en el recinto de Xicótencatl.
Los tiempos han cambiado y a partir de mañana se aplicará el borrón y cuenta nueva. Cárdenas se reunirá con AMLO para recibir el respaldo del líder moral perredista.
“Lo hago fundamentalmente por convicción”, dijo el hijo de Don Lázaro, al ser entrevistado por los periodistas. Parece que ese apoyo llegó muy tarde.
LA JOYA DE LA CORONA
En Iztapalapa se librará una de las luchas más interesantes en la campaña electoral para delegado político. Esa delegación es la más importante del perredismo, se convertirá en uno de los focos encendidos, pues representa la “joya de la corona” para cualquier organización política, pero más para el Partido de la Revolución Democrática, debido al número de electores que vive en esa zona densamente poblada.
A la hora de redactar estas líneas, se anunciaba el destape de Martí Batres, perredista puro, para competir como precandidato a jefe delegacional.
Este hecho nos habla de la importancia que representa para los amarillos el control de la delegación, escenario de pugnas que han representado pérdidas y pugnas a nivel cupular, es decir entre la dirigencia.
Batres fue uno de los aspirantes derrotados en la lucha por la candidatura del gobierno capitalino que ganó Miguel Ángel Mancera.
Por ejemplo, en la justa electoral pasada, AMLO tuvo que realizar malabarismos políticos, para que Clara Brugada, su candidata, obtuviera el triunfo.
Nos referimos al caso de Juanito, Rafael Acosta, que prestó su nombre para participar como candidato y ganar; pero quien ocupó el cargo por el que luchó, fue Clara Brugada, la perredista designada por el tabasqueño.
Los resultados de la pugna no terminaron. La adversaria de Juanito y de la señora Brugada fue Silvia Oliva Fragoso, ex esposa del senador René Arce.
El pleito terminó con la renuncia de este último y su hermano Víctor Hugo Círigo al PRD. Ambos decidieron militar en otro partido político. El senador ahora se cuenta entre los miembros del Partido Verde Ecologista en el Senado de la República.
Aquí es donde se vuelve interesante la lucha política en Iztapalapa. El legislador Arce y su hermano Víctor Hugo, entregados completamente al Partido Verde y al Partido Revolucionario Institucional, buscarán derrotar a la organización política en la que militaron. Es muy importante su capital político en Iztapalapa, donde los hermanos tuvieron la oportunidad y la experiencia de gobernar, pues ambos fueron delegados amarillos.
En el Distrito Federal, aquella delegación ubicada en el oriente se convertirá en el territorio más peleado. La justa partidista no será la misma sin los hermanos mencionados, quienes designarán candidato (uno de ellos podría serlo) que recibirá los apoyos del verde ecologista y de los tricolores. Se podría hablar de tres fuerzas, que sumadas pondrán en serios aprietos a la izquierda.
Ese es el escenario en el que se moverán los actores políticos para alcanzar la jefatura delegacional, sin duda, una de las más conflictivas de la capital.