Las “calaveritas” de Dzunum, 2011
Francisco Rodríguez martes 1, Nov 2011Índice político
Francisco Rodríguez
Desde 2008 se publican en este espacio las rimas que el lector y amigo don William González, el reconocido Dzunum de Yucatán, elabora, derrochando erudición e ingenio. Para compartirlas con usted me ha enviado las que corresponden a este sangriento 2011, para -cual indica la tradición-burlarnos de la muerte y de uno que otro de los personajes que aquí y ahora son sus personeros:
México
México, tu calavera
en las fiestas de la muerte
diluye su dulce albura
con las lágrimas que vierte.
Josefina Vázquez Mota
Tanto subir y bajar
¡Hola! decir sin parar,
besos recibir y dar,
muletazos, discursillos,
tequilazos y vinillos.
Ibas bien (dentro del PAN)
Tus contrincantes ¡tan nulos!
La neta: ¡lástima dan!
“Con ese triunfo Chepina
ya te puedes ir en paz
porque aunque eres muy ladina
presidenta, no serás”.
Tu gran oportunidad
la tuviste en el pasado,
pero dejaste a Gordillo
que te comiera el mandado.
¡Josefina Vázquez Mota!
la política es ingrata
y además, no sólo agota
sino que también nos mata,
por eso al verte tan flaca
ya te vine a levantar
porque de mí, nadie escapa.
Aquí, vas a reposar
(siguió hablando la calaca)
Serás huésped distinguida
y olvidarás la polaca.
“La ventaja de la muerte
es que ya nadie te ataca”.
EPITAFIO
¡Caminante toma nota!
Ni Lujambio ni Cordero
Ni González el cristero
Ni Creel, Lozano y Madero,
pudieron con Vázquez Mota
Cuauhtémoc Cárdenas
A punto de recibir
una presea nacional
Cuauhtémoc se despidió
de la vida terrenal.
“Me perdí de la medalla
Belisario Domínguez”
¡Maldita muerte gandalla!
¿Por qué mi vida la extingues?
“Me perdí de la elección”
(No llegaré a presidente
por enésima ocasión)
¡Maldita parca demente
que me mandaste al panteón!
“Francamente me ha extrañado
(espetó la calavera)
lo de tu nominación”
“Esa medalla Cuauhtémoc
se le da al que no se quiebra
ante un canijo orejón,
y merece el galardón
Rosario Ibarra de Piedra.
EPITAFIO
¿La democratización
que fortaleció Cuauhtémoc?
¿Cuál democratización y
cuál fortalecimiento?
No hay mérito ni razón
para tal merecimiento.
¿Por qué la nominación?
¿Fue para consolación?
Lector: medita un momento….
(Aquí yace un elemento
muerto por la frustración)
Ivonne Ortega Pacheco
“Coten uayé* linda hermosa”
¡Se gastó la vida en rosa!
(Fue la muerte socarrona
la que dijo a Ivonne tal cosa)
Ivonne Ortega furiosa
le contestó a la calaca:
¿Baax a kat** flaca babosa?
(“Mixbal+ mi gobernadora,
sólo llevarte a tu fosa”)
¡Dime por qué estoy aquí
calavera mentecata!
¡Dime cómo me morí
y por qué estiré la pata!
¡Yo estaba con Juan Gabriel
y con el colís++ Salinas
preparando una bachata!
¡No me lo vas a creer!
(la parca le contestó)
pero te lo haré saber.
“Ese tren peninsular
que nunca se realizó,
no quiero tomarte el pelo,
pero fue el que te “majó”
EPITAFIO
El prometer no empobrece
pero a veces se fallece.
Traducción:
* “Ven acá”
** “¿Qué quieres?”
+ ¡Nada!
++ pelón
“majó”: machucó
Índice Flamígero: “La muerte en este país ya no se vive como una celebración simbólica. Hoy más que nunca las calaveritas de azúcar han sido sustituidas por cráneos de verdad: se ha pasado a un estado en donde las pulsiones de muerte han dejado de ser pulsiones. Hoy en día estas pulsiones se han materializado en el conocido, el familiar, el compañero, que refieren han sufrido la muerte de algún ser querido no por el camino natural, sino por el camino patológico”, me dice el psicoanalista social José Antonio Lara Peinado, quien agrega: “En este país todos los días son días de muertos. Ya no se espera a los difuntos, hoy en día son los difuntos los que nos esperan. El mexicano vive hoy en día el peor secuestro que puede vivir un ser humano, el secuestro del alma, sea por grupos delincuenciales, sea por grupos políticos, sea por la televisión, el caso es que unos y otros tienen secuestrado el alma de los mexicanos. Este secuestro es en el fondo el motivo por el cual los mexicanos no hemos logrado construir un movimiento masivo de reclamo e indignación. En medio de las tradiciones del Día de Muertos, hoy más que nunca la gente acudirá a los panteones, hoy más que nunca los altares estarán repletos, hoy más que nunca se prenderán veladoras, no por preservar la tradición, será más bien por intentar calmar la angustia que han generado los políticos, los delincuentes y la televisión, todos ellos, sátrapas infames, secuestradores y asesinos del alma”.