Variables michoacanas
Ramón Zurita Sahagún martes 1, Nov 2011De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
Conforme se acerca la fecha de la elección en Michoacán (13 de noviembre) crecen los temores sobre el resultado electoral, el que, hasta el momento, no es predecible, por las variantes que ofrecen los distintos sondeos realizados.
Las campañas electorales se han significado por la subida y bajada de los contendientes en las preferencias electorales, según dan cuenta las casas encuestadoras contratadas para el efecto.
Unos días aparece en la cresta de la encuesta Luisa María Calderón, en otros Fausto Vallejo Figueroa y en los menos Silvano Aureoles, quien parece ser se desplomó de la cerrada lucha por el triunfo del gobierno michoacano.
La disputa que inició con tercios entre los candidatos, parece cerrarse en torno a los aspirantes postulados por el PAN y PRI, respectivamente, según los distintos sondeos que avalan las posibilidades de una y otro.
Sin embargo, dichas encuestas parecen enfocadas a generar otra polémica en torno a lo que reflejan unas y otras, en razón de lo disparado de las cifras que asientan.
Hay antecedentes que apuntan a que pudiera repetirse el caso del año pasado, en que varias casas encuestadoras quedaron evidenciadas sobre su participación en los sondeos, luego de que los resultados quedaron lejanos de la realidad plasmada en las urnas.
Michoacán es la última elección estatal, antes de que se realice el proceso electoral presidencial, donde van incluidos los comicios federales, que dejarán la conformación de las nuevas cámaras del Congreso federal.
De ahí, que el proceso electoral michoacano podría servir como indicio de lo que pudiera esperarse para el año próximo.
Claro que los resultados no serán definitorios, aunque podrían dar una idea del rumbo que puedan tomar los comicios del año próximo.
La importancia de la elección michoacana se puede medir por la presencia de los aspirantes presidenciales de los principales partidos que pretenden competir el año próximo.
Andrés Manuel López Obrador fue de los primeros en acudir, mientras que Marcelo Ebrard ya lo hizo también, entre los que aspiran a la candidatura presidencial de la izquierda.
Josefina Vázquez Mota pasó lista de asistencia y más recientemente lo hicieron Santiago Creel Miranda y Ernesto Cordero Arroyo, la tercia de prospectos que disputan la candidatura del PAN.
Hace unos días, el mexiquense Enrique Peña Nieto se hizo presente en suelo michoacano, donde ya también estuvo Manlio Fabio Beltrones.
Pero no son los únicos políticos de peso que han pasado por territorio purépecha, ya que el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano hizo lo propio en el estado que alguna gobernó él, su padre y su hijo.
Michoacán ha sido desde hace algún tiempo una entidad proclive a los gobiernos de izquierda, aunque eso lo consiguió después de más de 70 años de gobiernos priístas y manteniendo siempre unos enclaves de la derecha.
Zamora y la capital Morelia, las dos principales ciudades del estado, han sido gobernadas por Acción Nacional, siendo la misma capital una ciudad con alternancias de todo tipo, ya que por su ayuntamiento han pasado los militantes del PRI, PAN y PRD, indistintamente.
Y aunque la ciudadanía michoacana sabe perfectamente el rumbo que quiere para su entidad, por las distintas formas de expresión ideológica que han adoptado, en los días recientes surgieron una serie de denuncias sobre la posibilidad de manipulación de la voluntad ciudadana.
El uso y abuso de los recursos públicos de los gobiernos federales y estatales a favor de unos y otros candidatos parecen ser una constante.
Las denuncias abundan, aunque las pruebas de las mismas escasean y no deja de ser más que un rumor que el gobierno federal actúa a favor de la candidata panista, Luisa María Calderón Hinojosa, hermana del Presidente de la República. Se insiste en que los programas del gobierno federal se multiplicaron para apoyar a los ciudadanos del estado que respalden con su voto en las urnas a la candidata del partido blanquiazul.
Pero no es la única, ya que se asegura que hay recursos del gobierno del Distrito Federal y de otros estados como Guerrero y el propio Michoacán a favor del candidato de la izquierda, Silvano Aureoles Conejo.
Los priístas no son menos, ya que se asegura que a favor del candidato Fausto Vallejo Figueroa actúan dineros y operadores de varios estados gobernados por el PRI.
El derrumbe del candidato perredista parece un hecho real, con lo que la definición del próximo gobernador (a) del estado parece fincarse en Luisa María Calderón y Fausto Vallejo Figueroa, por lo que abundan las denuncias sobre supuesta compra de votos y voluntades de militantes de unos y otros partidos, especialmente de quienes respaldan al candidato de la izquierda, bajo el argumento de que ya está fuera de la pelea.
Los días previos a la elección harán subir de color la contienda, que de un tono preventivo se puede convertir en un foco de riesgo, donde la presencia de los grupos delincuenciales puede provocar una alerta generalizada.
ATENTADOS CONTRA ALCALDES
Ser alcalde parece no ser ya una función atractiva para los políticos, especialmente de poblaciones menores a los cien mil habitantes.
La propensión a atentados que sufren los munícipes es alarmante y son pocos los que resultan ilesos de un ataque perpetrado por la delincuencia organizada.
Michoacán, Tabasco, Veracruz, Nuevo León, Guerrero y otras entidades del país dan cuenta de los asesinatos cometidos en las personas de sus autoridades municipales, sin que se consiga la consignación de los autores intelectuales o materiales de los hechos.
La impunidad es el signo de coincidencia entre unos y otros crímenes, ocurridos en la actual administración sexenal.
Y aunque es muy atractivo ser presidente municipal, cada día será mayor el gasto destinado a la seguridad de los alcaldes y menor el orientado al gasto social.