Dinamitada la relación PRI-Calderón-PAN
Roberto Vizcaíno jueves 11, Mar 2010Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
Habría que recordar que estas dos reformas de Estado fueron una promesa de todas las bancadas al inicio de este período y un reclamo de las circunstancias que vive hoy México
Para los actores reales de la política en México, no hay duda de que César Nava es el representante del presidente Felipe Calderón dentro del Partido Acción Nacional.
Nava es, pues, la extensión del presidente Calderón dentro de su partido y quien conduce la expresión política, partidaria del jefe máximo hacia la sociedad y los medios.
De ahí que el controvertido pacto cuyo texto dimos a conocer ayer aquí y que fue firmado por él y la dirigente del PRI, la diputada Beatriz Paredes, es por demás obvio, formó parte de una voluntad superior dentro de un juego de pesos y contrapesos de alta política.
Luego entonces, reventar ese acuerdo, y además propiciar un debate que ha polarizado y confrontado a todas las fuerzas políticas nacionales no puede ser un hecho casual y sus consecuencias son de la mayor importancia.
De entrada todo lo ocurrido y dicho ha dejado un resultado real inocultable: el rompimiento del PRI con Calderón y el PAN.
Los puentes entre priístas y panistas no existen. No puede haberlos luego de todas las provocaciones y acusaciones.
En una primera lectura se podría decir que la confrontación fue el resultado de una intención decidida desde Los Pinos dentro de una estrategia de lo que se denomina “control de daños”.
Luego de que se dio a conocer que el pacto si existía y que este había sido incumplido por los panistas, la ola de descalificación amenazaba no sólo con un fuerte descrédito hacia el gobierno del presidente Calderón, sino con echar por tierra las alianzas electorales alcanzadas con el PRD y otros partidos del ala lopezobradorista en Oaxaca, Durango e Hidalgo.
Asimismo se podían cancelar las previstas para Sinaloa y Quintana Roo.
De ahí que el propio César Nava por instrucciones de su jefe, entró a la contienda y aceptó el pacto y además le cargó la cuenta al gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto.
Desde ese momento todas las baterías se enfocaron a cargarle todo a Peña Nieto en una obvia intención de minarlo lo más posible respecto de su inminente candidatura presidencial en el 2012.
Sin embargo poco puede hacer Nava porque el texto del acuerdo es muy claro y no se refiere en ninguna de sus partes al supuesto compromiso de Peña Nieto del que habla Nava, respecto de que los diputados y senadores del tricolor debían votar el paquete económico de Calderón sin modificar nada.
Y en un absurdo, el dirigente del PAN llegó incluso a retar a un debate nacional al gobernador para definir quien decía la verdad o no y a su vez desafió a Beatriz Paredes a someterse al polígrafo para que este indicara quién de los dos mentía.
La obviedad nos dice que al lanzar los dos retos, Nava buscaba impactar a la opinión pública, a los ciudadanos, a través de los medios de información porque él sabe que, aunque lo quisiera, Peña Nieto no puede debatir con él ya que, para comenzar, no puede acudir a la tribuna de la Cámara de Diputados porque no es diputado y existen reglas muy claras de quién sí y quién no puede hacer uso de esa tribuna.
Nava también sabe que no cualquiera puede ser sometido a una prueba del polígrafo, destinado a investigar actos criminales.
En fin, puros artificios y cuentos chinos, esos de sombras donde nadie sabe dónde está lo verdadero y donde lo falso.
Lo único cierto es que el diálogo entre panistas y priístas no existe.
Y no existe cuando en la Cámara de Senadores se acaba de iniciar el debate y análisis de las diversas iniciativas que existen en ese cuerpo legislativo sobre Reforma Política.
El rompimiento se da justamente a 50 días de que concluya el actual período legislativo, y el único espacio en el que se podría aprobar la reforma política que implicaría no menos de 35 cambios a otros tantos artículos de la Constitución, lo cual requiere de que, una vez que se pudiera aprobar por la Cámara de Diputados y el Senado, fuese ratificada por cuando menos la mitad más uno de los 32 congresos estatales.
La misma circunstancia afecta a la posible reforma económica y fiscal que ya también se comenzó a debatir en la Cámara de Diputados.
Habría que recordar que estas dos reformas de Estado fueron una promesa de todas las bancadas al inicio de este período y un reclamo de las circunstancias que vive hoy México.
Sin contar con que la gobernabilidad exige que todas las fuerzas políticas lleguen a acuerdos y actúen conjuntamente.
PARTO DIFÍCIL: Y precisamente respecto de las alianzas electorales convenidas entre PRD y PAN que dieron origen a esta confrontación, ayer las cúpulas de ambos partidos reiteraron que seguirán adelante en el lanzamiento de candidatos comunes a gobernador en Oaxaca con Gabino Cue; en Durango con José Rosas Aíspuro y buscarán lanzar en Hidalgo a la foxista Xóchitl Gálvez y en Sinaloa al senador todavía priísta Mario López Valdéz mientras que analizan ver si pueden hacerlo también con un aspirante en Quintana Roo.
El asunto de Sinaloa es por demás incierto, ya que Malova –que es como muchos conocen al senador Mario López Valdéz-, no termina de decidirse y dar el paso hacia su rompimiento con el tricolor desde cuyas filas le han advertido que si lo hace él sabe que no podrá ganarle al popular alcalde de Culiacán, Jesús Vizcarra, a quien las encuestas y tendencias dan como el más sólido triunfador.
MIENTRAS TANTO: En Zacatecas y ante más de 10 mil seguidores, el priísta Miguel Alonso Reyes rindió protesta como candidato a la gubernatura por la alianza Primero Zacatecas, integrada por el PRI, el PVEM y Nueva Alianza.
Desde la Plaza de Armas y acompañado por el ex gobernador de Hidalgo y senador Jesús Murillo Karam, secretario general del tricolor, Reyes reiteró sus 5 grandes acuerdos y 25 compromisos con los cuales se propone mejorar las condiciones de vida de los zacatecanos.
Entre estos compromisos Reyes pretende abatir la alta marginación para darle paso a importantes segmentos de la población estatal a la educación básica y media superior y duplicar becas para bachillerato y el nivel de educación superior.
El candidato de Primero Zacatecas, basa su campaña también en integrar y poner en marcha un cuerpo de policía estatal para combatir la inseguridad.
Así, con estas propuestas y compromisos y ante este conjunto de fuerzas y ciudadanos, es como Alonso Reyes arrancó su campaña por la gubernatura de Zacatecas que hoy detenta la perredista Amalia García y para aprovechar el rompimiento que existe entre ella y su antecesor, el senador ahora petista Ricardo Monreal –y la familia de este-, quien es apoyado por Andrés Manuel López Obrador.