Mentiras que impactan a la niñez
¬ Claudia Rodríguez martes 9, Mar 2010Acta Pública
Claudia Rodríguez
Con morbo y una especie de angustia, la tarde de ayer esperé que mis hijos iniciaran la charla que siempre nos lleva justo en el momento de la comida a platicar sobre qué hicieron en el colegio. En estas conversaciones familiares que a veces se tornan caóticas porque todos quieren hablar al mismo tiempo, invariablemente aparecen los comentarios sobre las noticias que se plasman en las primeras planas de los diarios de acuerdo al impacto que a los pequeños les produce, pues sus profesoras tienen como tarea importante compartir con sus alumnos por las mañanas, noticias relevantes a través de la lectura de los periódicos.
Es imposible no recordar cómo el terremoto de Haití o los de Chile han impactado en las mentes y en las vidas de los chicos. Los noticieros en la televisión y alusiones al respecto en la radio les hacen guardar silencio y alertar otros sentidos para nutrir la información que ya tienen en su mente.
También la matanza a ráfagas de fuego que sucedió en la colonia fraccionamiento de Salvalcar en Ciudad Juárez, Chihuahua fue un evento que comentaban a cada momento. Claro, el impacto que les causó no era para menos.
Los temblores y el acribillamiento de jóvenes estudiantes les producen a los niños, una sensación de vulnerabilidad e inseguridad de forma innata ya que se sienten en peligro aún en su casa, en su hogar. Explicarles que ante esas eventualidades hay que ocuparse más que preocuparse resulta hasta cierto grado sencillo y reconfortante para ellos, pero hay casos para los que creo que hasta el psicólogo más preparado no tienen respuestas, ni explicaciones cabales.
Sucedió pues la tarde de ayer, lo que tanto temí: “Mami ¿sabes que unos señores del gobierno son unos mentirosos?”. ¿Por qué lo dices? Fue mi primera e indagadora frase como respuesta al planteamiento de un de mis hijas. “Porque dijeron que no habían firmado unas hojas y sí lo hicieron, y además cobran muy caro por su trabajo”. ¡Caray!, ¡qué les digo!, pensé, pues los otros dos también apuntaban con otras frases sobre las mentiras que les dijeron, decían los del gobierno.
Tomé aire e insegura les contesté que sí, que había unos señores de unos grupos que se llaman partidos políticos. Esos señores habían acordado algunas cosas entre ellos y luego, no cumplieron su trato y además mintieron…
—¿Y a los mentirosos se les paga, mami? Preguntó uno de mis chicos.
Apenas alcancé a decir:
—Deberíamos no hacerlo. Pero sí, se les paga muchas veces por ese trabajo.
Las miradas interrogantes de mis hijos me provocaron una gran rabia y pensé que ante los terremotos y la inseguridad pública podemos trabajar y tomar medidas preventivas. ¿Pero cómo nos protegemos de los políticos deshonestos, inmorales, insaciables de todo poder y mentirosos? Además claro, del difícil papel que representamos todos los adultos frente a la niñez por las malas acciones de nuestros gobernantes y dizque líderes.
Mentirosos que dañan en alto impacto a nuestra niñez, no sólo la historia los juzga, ya lo hacen los infantes de hoy.
Acta Divina… En la sede nacional del Partido Acción Nacional, el viernes 5 de marzo, César Nava Vázquez dirigente nacional del panismo tuvo que acertar que sí existe un acuerdo firmado entre el PAN y los priístas, aún cuando antes lo negó rotundamente.