Los unos iguales a los otros
¬ Claudia Rodríguez jueves 1, Sep 2011Acta Pública
Claudia Rodríguez
Hoy se cumplirá con la entrega al Congreso de la Unión del informe por escrito que contiene el estado que guarda la administración federal, conforme lo mandata el artículo 69 de la Constitución y el mensaje a la nación correspondiente lo presentará el señor Felipe Calderón el día de mañana desde el Museo de Antropología e Historia de la ciudad de México.
Es seguro que Calderón así como externa que las críticas lo incomodan y que cree no se le ha tratado conforme a su desempeño, también año con año, en estas fechas, se le reaviva la frustración de que luego de la entrega de su I Informe de la administración federal en el recinto legislativo de San Lázaro, el cual fue apenas de dos minutos y hasta diferido por Radio, Televisión y Cinematografía (RTC) a los televidentes -por aquello de que Calderón se viera en aprietos como los que pasó Vicente Fox en sus últimas entregas del informe-, no haya podido revivir el “día del presidente” y que sólo lograra que el ya fallecido Juan Camilo Mouriño, en su calidad de secretario de Gobernación, asistiera al recinto cameral a la entrega del II Informe.
No obstante, creo que los panistas se han ganado con creces ese desdén con el que los tratan sus oponentes políticos y que ya muchos ciudadanos refrendamos. Está claro que panistas, priístas, perredistas y demás son iguales los unos y los otros. Basta ver las imágenes publicadas y publicitadas, donde Jonás Larrazábal, hermano de sangre de Fernando Larrazábal, alcalde de Monterrey, recibe fajos de dinero por el empleado de un casino para guardarlos de igual forma en su bolsillo, que en una caja-empaque de teléfono móvil.
Con esto, recordamos, los videos en que se exhibe al perredista René Bejarano recibiendo del empresario argentino, Carlos Ahumada, billetes agrupados en ligas que también Bejarano igual guardaba en un maletín que en una bolsa de plástico.
Y lo anterior es sólo un botón, porque el colectivo conoce decenas de eventos de corrupción en donde los gobernantes y administradores de todos los tiempos y cualquier ideología, abusan de su poder y se enriquecen. Los unos iguales a los otros.
Y lo peor, es que se creen de una especie diferente cuando están en el poder, los unos igual que los otros nos tratan al pueblo de forma peyorativa y distintiva y entre ellos se protegen.
Sólo hay que traer a nuestra memoria como el señor Calderón llamó criminales y terroristas a los autores del atentado al Casino Royale en Monterrey, penalizándolos de antemano y como ahora que las imágenes muestran al hermano del panista Larrazábal, en asuntos más que turbios en salas de juego, el gobernador de Nuevo León, de extracción priísta, comenta que ya hay una investigación para deslindar responsabilidades. Unos criminales de antemano, los otros, posibles culpables.
Así que sobre Calderón lloverán las críticas y el desaire, porque pertenece a esa misma clase política que ha hundido a este país.
Acta Divina… El alcalde regiomontano, Fernando Larrazábal, sostuvo que su cargo es “personalísimo” y no se comparte con ningún amigo ni con ningún miembro de su familia, por lo que reafirmó que “nadie puede hablar a nombre mío”.
