Sheinbaum se involucra en caso Iguala, mientras maestros vuelven a sus protestas
Miguel Ángel Rivera jueves 19, Dic 2024Clase Política
Miguel Ángel Rivera
Como dice Juan Gabriel: ¡Pero qué necesidad!
La tragedia ocurrida la noche del 26 al 27 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero, que tuvo como su consecuencia más grave la desaparición de 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural Isidro Burgos de Ayotzinapa, Guerrero, ha sido, desgraciadamente, tomada como bandera política por diversos políticos y organizaciones, sin que parezca que la principal finalidad sea hacer justicia para los desaparecidos y sus deudos.
De hecho, los padres de los normalistas han sido engañados una y otra vez, prácticamente desde la fecha misma de los lamentables sucesos, pues se tejieron toda clase de suposiciones acerca de lo ocurrido a esos jóvenes y, en paralelo, se han desvirtuado las investigaciones y los trabajos de quienes sí han intentado llegar a la verdad de lo sucedido.
Para empezar, el entonces procurador de Justicia, Iñaki Blanco, del gobierno de Guerrero, encabezado por Ángel Heladio Aguirre Rivero, parecía encaminado a poner al descubierto lo ocurrido e inclusive sancionar a los presuntos responsables, pues desde el arranque puso en evidencia la colusión de policías y funcionarios locales con integrantes de pandillas de delincuentes que operan en la zona y que se disputan el predominio del territorio.
Las autoridades estatales inclusive detuvieron a algunos de los presuntos involucrados en el secuestro y posterior desaparición de los normalistas, línea de acción que hasta ahora no ha sido invalidada por más que ha habido injerencia de gran número de investigadores e instituciones, a los cuales no parece interesarles solucionar el lamentable suceso, sino mantenerlo como bandera política. Por ello, el avance inicial logrado por el gobierno de Guerrero se tradujo en la pérdida de sus cargos, tanto el gobernador como el fiscal.
Uno de los personajes que usó políticamente la tragedia de Iguala fue el ex presidente Andrés Manuel López Obrador, que desde su campaña electoral ofreció que solucionaría el caso, pero más que aclararlo su interés era utilizarlo para reforzar su prédica en contra de la corrupción que les atribuía a los anteriores gobiernos a los que bautizó como “conservadores” y neoliberales. Su objetivo central era la llamada “verdad histórica”, al grado que con el respaldo de la “autónoma”, pero en realidad incondicional Fiscalía General de la República, encarceló al ex procurador General de la República Jesús Murillo Karam, sin más pruebas que los dichos de jefes de la delincuencia que así obtuvieron su liberación a pesar de estar confesos de actos criminales.
Esto viene al caso porque en cumplimiento de su promesa de construir lo que denominan el segundo piso de la llamada Cuarta Transformación, la primera mandataria trata de seguir, paso a paso, las huellas de su líder y guía, el política tabasqueño. Como parte de ello, también desde su campaña electoral trató de acercarse a los padres de los jóvenes desaparecidos, quienes a pesar del paso del tiempo no cejan en exigir que se aclare lo sucedido a sus hijos y pedir que se aplique la justicia a los responsables.
A pesar de que su antecesor no tuvo resultados positivos –de hecho, los padres de los desaparecidos, terminaron por quejarse de haber sido engañados– y de que López Obrador tuvo que admitir que el caso de Iguala había sido uno de los fracasos de su administración, su discípula ha decidido involcrar su propio gobierno en ese conflicto que no parece tener solución después de tanto manoseo en el curso de más de diez años. Si lo hubiera dejado de lado, nadie le hubiera reclamado, pero la mandataria decidió arriesgarse.
Ya como Presidenta, Sheinbaum se reunió y aunque no tuvo buenos resultados, ha insistido en renovar la esperanza de los padres de, al menos, conocer el destino de sus hijos.
Otro encuentro más de la Presidenta de México con los padres se registró el reciente día 5, de lo cual dio cuenta en una de sus conferencias mañaneras, en la cual informó que se trata de su primer acercamiento con ellos como mandataria federal. Aseguró que, “fue una buena reunión. Acordamos seguir trabajando en el tema”.
Nuestro objetivo, agregó, es que no se cierre la carpeta de investigación hasta que no se encuentre a los jóvenes, señaló Sheinbaum y al asegurar que la Fiscalía General de la República (que no depende del Ejecutivo, vale insistir) y la Secretaría de Gobernación, trabajarán puntualmente en el caso.
“Llegamos a distintos acuerdos, nadie va a proteger a nadie, no quisiera mencionar temas que se dialogaron en lo particular, porque tienen que ver con la investigación”, agregó la presidenta de México.
Como complemento, informó que, “ayer también hubo otra detención muy importante que tiene que ver con el caso Ayotzinapa” y puntualizó su compromiso respecto a encontrar el paradero de los estudiantes, así como dar a conocer que fue lo que ocurrió esa noche.
“La idea es no confrontarnos, si no buscar las salidas, no se trata de entrar de nuevo a un esquema de decir una cosa o la otra, si no que encontremos nuevos lugares de búsqueda a partir de las carpetas de investigación”, concluyó Sheinbaum Pardo.
Por el bien general, es de desear que se cumplan los propósitos de la mandataria, pero más bien es de prever que habrá más conflictos en el curso del actual gobierno federal.
De nueva cuenta vez, salen los maestros disidentes a protesta
Otro conflicto que data de hace muchos años y que le causó disgustos al entrenador de la presidenta Sheinbaum, el político tabasqueño López Obrador, fue el del magisterio disidente que se agrupa en torno a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), al que inútilmente intentó presentar como su aliada en la llamada Cuarta Transformación, pues los profesores disidentes procuraron mantener su distancia.
Como parte de sus periódicas protestas, la Coordinadora convocó a una marcha masiva y un paro de labores para este lunes 9 de diciembre, en protesta por lo que consideran incumplimientos a sus demandas históricas. Esta movilización amenaza con dejar sin clases a más de cinco mil escuelas en todo el país.
De conformidad con los planes de sus dirigentes, la marcha partirá a las 10:00 de la mañana desde el Ángel de la Independencia y avanzará por Paseo de la Reforma hacia Palacio Nacional. La protesta busca presionar al gobierno para atender un pliego petitorio que incluye la abrogación de la Ley del ISSSTE de 2007, una reforma educativa-laboral, y la homologación de salarios y prestaciones, así como el cumplimiento de acuerdos firmados en mayo y junio pasados, los cuales, aseguran los dirigentes, siguen sin concretarse.
Se desconoce el número exacto de simpatizantes que se unirán a esta manifestación, pero se anticipa una importante afluencia de maestros provenientes de diversas entidades del país. Además de la marcha, las dirigencias estatales han solicitado una reunión con la presidenta Claudia Sheinbaum, con la intención de abordar las demandas pendientes que presentaron en su pliego petitorio el 30 de octubre.
El gobierno federal necesita más
dinero para satisfacer tantas demandas
Se estima que, a pesar de las buenas intenciones, resulta poco probable que el gobierno de Sheinbaum logre cumplir todas las demandas de los profesores, pues una de sus limitaciones es la falta de recursos para atender tantas demandas.
Por eso, el gobierno federal busca la forma de aumentar la recaudación de fondos sin que en apariencia viole su compromiso de no aumentar impuestos.
Uno de los recovecos encontrados por el gobierno de la llamada Cuarta Transformación para allegarse más dinero sin afectar a los causantes nacionales consistió en gravar a los turistas extranjeros que llegan a territorio nacional en cruceros, pero según las primeras reacciones de los interesados, esa medida podría resultar contraproducente.
Por ejemplo, la Asociación de Cruceros de Florida y el Caribe (FCCA) advirtió que México podría perder competitividad frente a otros destinos turísticos a causa del impuesto que se prevé cobrar a los viajeros de cruceros que arriben al país (42 dólares por persona) a partir del 1 de enero.
Paige reveló que la industria de cruceros genera mil millones de dólares anuales y crea más de 20 mil empleos. Sus pasajeros gastan en promedio 90 dólares por persona y los miembros de la tripulación aportan 60 dólares adicionales.