Harris contra Trump, una elección que se complica
* Destacadas martes 5, Nov 2024
Hoy, jornada crucial en Estados Unidos
- Demócratas y republicanos se lanzan sospechas de fraude electoral
José Luis Montañez
Lo cerrado de las encuestas sobre preferencias electorales para designar hoy al próximo presidente o presidenta de los Estados Unidos hace prever un panorama difícil y poco claro en el triunfo de algunos de los dos postulantes.
Kamala elevó el tono de su discurso en los cierres de su campaña, seguramente porque su equipo le notificó que Donald Trump había tomado un segundo y hasta un tercer aire y se convertía en un competidor difícil de vencer.
Trump es un viejo lobo de mar y apuntó su discurso a la supremacía americana.
Ninguno de sus seguidores, simpatizantes y apoyadores quieren que EU deje su lugar como primera potencia del mundo.
Trump repitió y repitió su discurso anti inmigrante y anti China, país que domina comercialmente ahora el orbe.
Dónde no se consumen en el mundo, digo yo, productos manufacturados en el gigante asiático. China maquila a muy bajo costo todo tipo de artículos, incluyendo vehículos, tractores y demás, generando desempleo en EU.
Trump, sabedor de lo que quiere el gringo gringo, sostiene que impondrá aranceles a los autos chinos e impulsará a las armadoras automotrices de su país que han sufrido baja en sus cifras de producción, sobre todo, porque lo chino se fabrica con costos que no se pueden igualar en ninguna parte del mundo.
Por su parte, Kamala Harris, la candidata demócrata que sustituyó a Joe Biden en la contienda presidencial, asegura que hay señales de que los comicios presidenciales no serán limpios y que, seguramente, habrá un compra de votos y conciencias de los delegados en los estados clave.
Y aquí está el tema, porque Donald Trump tiene todo el poderío económico y político necesario para doblar, como él dice, a algunos delegados estatales demócratas que sumará a su causa. Así es que tenemos un escenario complicado y ya huele a que las elecciones presidenciales en EU se van a ir a los tribunales, pues dudo mucho que tanto Harris como Trump acepten una derrota.
Este martes 5 de noviembre será difícil y complicado para la elección de presidente o presidenta en los Estados Unidos.
Las encuestas están muy cerradas, pero el gringo gringo apuesta porque el republicano repita en la Casa Blanca.
Kamala y Donald pelearon el voto indeciso hasta el final
A horas de la crucial jornada de la elección presidencial en Estados Unidos, donde alrededor de 77 millones de estadounidenses ya han votado de forma anticipada, Kamala Harris y Donald Trump presionaron hasta el último minuto de campaña para que millones más de ciudadanos los respalden en las urnas este martes 5 de noviembre. Cualquiera de los resultados de este día arrojará un resultado histórico.
En su último e intenso esfuerzo de los candidatos a la presidencia, La demócrata se enfocó en Pensilvania, el estado péndulo que entrega más votos electorales este año, 19. Por su parte, el ex presidente republicano, Donald Trump, realizó mitines en tres estados bisagra: Michigan, Carolina del Norte y Pensilvania.
La actual vicepresidenta y candidata demócrata, Kamala Harris, pasó todo el lunes en Pensilvania, donde visitó zonas de la clase trabajadora, incluida Allentown, y finalmente cerró con un mitin nocturno en Filadelfia en el que participaron la cantante Lady Gaga y la afamada presentadora de televisión, Oprah Winfrey.
Mientras tanto, el líder republicano que aspira a volver a la presidencia, Donald Trump, pisó el acelerador con cuatro mítines en tres estados. El controvertido magnate inició este lunes con un evento en Raleigh, Carolina del Norte y luego hizo dos paradas en Pensilvania, con mítines en Reading y Pittsburgh.
Finalmente, el ex presidente terminó su campaña con un evento en Grand Rapids.
Los ojos, en siete estados
Pensilvania: Quizás el estado más codiciado con sus 19 grandes electores. Trump ganó por la mínima en 2016 y Joe Biden se impuso en 2020 también por escaso margen. Harris cuenta con los grandes proyectos de infraestructuras lanzados por el presidente Biden y con el apoyo de los sindicatos.
Michigan: Al igual que Pensilvania, este bastión demócrata, y sus 15 grandes electores, fueron a parar con Trump en 2016, para sorpresa de todos, frente a Hillary Clinton. Biden lo reconquistó en 2020. Los numerosos votantes árabes-estadounidenses o musulmanes indignados por el apoyo de Estados Unidos a Israel en la guerra de Gaza han criticado a Harris.
Wisconsin: Hillary Clinton perdió sus 10 grandes electores, que Biden recuperó en el 2020.
Georgia: En el corazón del sur religioso y conservador, Georgia confía habitualmente en sus 16 grandes electores al candidato republicano.
Carolina del Norte: Otro estado sureño (16 grandes electores) no vota por los demócratas desde Obama en 2008.
Arizona: Este estado predominantemente republicano del suroeste (11 grandes electores) dio la sorpresa en 2020 al elegir a Biden por solo 10,457 votos de ventaja.
Nevada: Estado del oeste con seis grandes electores, conocido por sus casinos, no ha votado por un republicano desde George Bush en 2004.
La vicepresidenta Kamala Harris, el e republicano Donald Trump, pelearon hasta el último minuto de sus campañas por los estadounidenses indecisos para desempatar las encuestas, pero los sondeos pueden ser engañosos, porque en Estados Unidos donde no cuenta el voto popular para ganar las elecciones, sino los del Colegio electoral