Van 226 asesinatos en 7 días
Alberto Vieyra G. miércoles 9, Oct 2024De pe a pa
Alberto Vieyra G.
En siete días, el gobierno de la presidenta científica Claudia Sheinbaum acumula oficialmente 226 asesinatos dolosos, sin contar más de 200 desaparecidos que serán los muertos de Claudia, a quien las bandas criminales que según Estados Unidos gobiernan el 75% de la nación azteca le están dando una macabra bienvenida o un cale fenomenal, como dirían los clásicos.
Lo malo es que la Presidenta de la República ya comenzó a patear el bote, es decir a sacarle al bulto, pues cuando habla del salvaje asesinato del alcalde de Chilpancingo, Guerrero Alejandro Arcos, y otros dos funcionarios de ese ayuntamiento dice que en Guerrero “no es un Estado en que la violencia esté generalizada como ocurre en Guanajuato o Sinaloa”.
El caso de Chilpancingo, aunque doña Claudia le saque al bulto, lo único que refleja es el desastre macabro que dejó su maestro el Mesías Tropical, quien culpaba de todos sus yerros a García Luna, a Felipe Calderón al “chupacabras” o a Porfirio Díaz.
Ahora la Presidenta científica no tiene a nadie más que culpar que a López Obrador, por inepto o por estar en contubernio con las mafias criminales, como lo acusó el ilustre Porfirio Muñoz Ledo durante el homenaje que le rindió el Senado de la República el 2 de junio del 2022. Muñoz Ledo fue a la yugular de AMLO al decirle que “entienda que su contubernio o alianza con el narco no es heredable, porque estos, como lo han hecho siempre y en todas partes, en todas las plazas políticas, se entienden con el que va a llegar…”.
Ciertamente, la herencia de AMLO es maldita y doña Claudia tiene que verla de ese tamaño. ¿O cómo se entiende el cobarde crimen de Alejandro Arcos en Chilpancingo?
Los malandros a sabiendas de que Norma Otilia Hernández no sería reelecta porque en el alto mando de Morena le aplicaron la tarjeta de expulsión, las bandas criminales, como se llamen, ejecutaron primero al secretario general del ayuntamiento, luego al principal jefe policiaco y el pasado fin de semana, decapitaron al alcalde Alejandro Arcos y su desmembrado cuerpo lo dejaron para el escarmiento a la vista de todo el mundo y para que el gobierno federal entienda que los que mandan son ellos y ellos dirán a quién quieren como presidente municipal. Así de sencillo. Y todo ello nos dice que la Presidenta científica, a través de Omar García Harfuch tienen que pactar con las mafias, o de lo contrario si se incendia Guerrero, se corre el peligro de que se incendie todo el país.
Es menester que los nuevos responsables de la seguridad pública en México no apuesten en el segundo piso a más “abrazos, no balazos”, bueno ni siquiera a balazos y no abrazos, pero también será saludable que lean cómo actúan las mafias internacionales como la Camorra, la Siciliana, la Yakuza en China y la mafia rusa.
Si el plan de seguridad que doña Claudia no contempla acciones firmes para que el Estado mexicano combata a esas mafias con las que su maestro trabó alianza, podemos anticipar que México o mejor dicho que el gobierno de la señora Sheinbaum ya perdió la batalla.
Por ahora estamos ya en la era de los muertos de Claudia y muy saludable será que aprenda a no patear el bote como su predecesor.