Bancada del PRI en el Senado, congruente en discusión sobre la Guardia Nacional
Adriana Moreno Cordero jueves 26, Sep 2024La Retaguardia
Adriana Moreno Cordero
- Sin oficio político, Adán Augusto López trata de poner inútil trampa
Hay detalles que, sin duda, no deben pasar desapercibidos en lo que fue una muy intensa discusión, que al final fue aprobada por Morena, rémoras y Judas, para que la Guardia Nacional dependa de la Secretaría de la Defensa Nacional, en lo que es otro regalo que el oficialismo ofrece al presidente Andrés Manuel López Obrador.
De nueva cuenta —y esto hay que subrayarlo—, las y los senadores del grupo parlamentario del PRI volvieron a dar muestras de congruencia, valor e independencia al votar en contra de la pretendida militarización de la Guardia Nacional.
Y el todavía reciente coordinador de la bancada de Morena, Adán Augusto López Hernández, se empeña en hacer gala de algo de lo que a todas luces carece: oficio político. Tal pareciera que quiere complacer a quien está en los últimos días de su errática gestión y por eso, la víspera de esta discusión, salió a decir que estaba casi seguro de que la fracción parlamentaria que coordina Manuel Añorve Baños votaría a favor de uno de los últimos despropósitos del casi, casi, expresidente.
Desde las sesión en la que se discutió la controvertida reforma al Poder Judicial, cuando los Judas se pusieron al descubierto, López Hernández, todo el tiempo, esgrimió mentiras y fue donde por primera vez aseveró que los senadores priistas le darían su voto al oficialismo cuando en reiteradas ocasiones, el presidente del Revolucionario Institucional, Alejandro Moreno Cárdenas, aseguró que su bancada estaba firme y votaría en contra de la reforma Judicial, pero esos mensajes no los quiso entender el “hermano” de López Obrador y por eso, intentó de nueva cuenta allegarse de los legisladores priistas.
Así, en el tema de la Guardia Nacional que duró horas y horas en la Cámara alta, las y los legisladores tricolores reconocieron el desempeño de los elementos que la conforman, pero también la gran tarea que realizan las Fuerzas Armadas en todo el territorio sin dejar de advertir que son cuerpos creados para la defensa y protección de la seguridad nacional y no para ser usados en tareas de seguridad pública y combate a la delincuencia.
Durante las diferentes participaciones que tuvieron en la tribuna de la Cámara alta los senadores del PRI, lamentaron que en seis años, el gobierno lopezobradorista no haya tenido la capacidad de presentar una estrategia exitosa de combate a la violencia en nuestro país, lo cual, indudablemente, ha originado la más grave crisis de seguridad sin que se adviertan señales claras de una eficaz resolución a este problema.
Igualmente, coincidieron los priistas en que para enfrentar al crimen organizado se requiere de una sólida estrategia integral, donde la seguridad pública tenga algo de lo que ha carecido este gobierno: coordinación con los otros niveles de gobierno y voluntad política.
Los legisladores del tricolor, advirtieron que la militarización representa una amenaza para el equilibrio de poderes en nuestro país -el primer paso fue la reforma al Poder Judicial-, concentrando decisiones clave en una sola institución y en una sola persona por lo que es esencial mantener su naturaleza civil.
Finalmente, lamentaron que la reforma aprobada esté encaminada a la eliminación de la Guardia Nacional como una fuerza civil y sus consecuencias pueden ser tan graves como irreversibles.
En este debate, al filo de las tres de la mañana, por cierto, el Judas al que todavía se presentó en la tribuna de la Cámara Alta como del PAN, Miguel Angel Yunes Márquez, visiblemente nervioso subió a decir que se pronunciaba a favor de la propuesta morenista y que otra vez votaba en conciencia, como si sus palabras de traidor y oportunista pudieran convencer a la oposición.
Como si nadie supiera que ya había recibido horas antes su premio de parte de Morena y rémoras y este consistió que lo nombraran secretario de la Comisión de Justicia del Senado que preside el ahora flamante neomorenista, Javier Corral, quien tuvo, a lo largo de la prolongada discusión, un intercambio con el ex gobernador de Coahuila, el priista Miguel Riquelme. Total, que no hay forma que estos dos ex panistas limpien su imagen por más intentos que hacen; sólo son puros ante Morena y sus rémoras.
Municiones
*** El último escándalo desatado por López Obrador, previo a lo que será la desairada toma de posesión de Claudia Sheinbaum, es que ésta última, por órdenes expresas del primero, no invitara a tan importante evento al rey de España Felipe VI, quien por cierto, sí asistió a la toma de posesión del tabasqueño, porque el monarca no ha respondido la sentida carta que le envió hace cinco años el de Tepetitán, no pidiéndole, demandándole que ofreciera disculpas públicas por los excesos y abusos cometidos durante la Conquista. “Simplemente queremos respeto”, dijo Sheinbaum Pardo al ser cuestionada en su casa de transición. Otras cosas deberían de preocupar a quien encabezará el segundo piso de esta errada y llamada Cuarta Transformación, pero a lo mejor este espectáculo, lo urdió el presidente para tapar el desastre que deja como país prácticamente en todos sus rubros, así que no extrañaría nada que a horas de dejar Palacio Nacional entre las lágrimas de sus seguidores, vaya a salir con lo del penacho de Moctezuma. ¡Qué tal! Y en todo esto, una pregunta no sobra: ¿la futura Presidenta de México va a seguir albergando los rencores y odios de quien en pocos días será su antecesor?, lo más probable es que sí.
*** “¡Chu, chu!”, eso es lo que va a responder todo preocupado, el todavía director de la Comisión Federal de Electricidad, Manuel Bartlett Díaz, a quien las sombras del pasado lo vuelven a perseguir, esto porque el gobierno de Estados Unidos desclasificó un memorando enviado en marzo de 1986, -hace casi 40 años-, desde la Embajada de Estados Unidos en México al director del FBI en el que se daba cuenta de las sospechas de agentes estadounidenses de que Bartlett Díaz, entonces mejor conocido como el secretario de Gobernación al que se le cayó el sistema, trabajaba con los narcotraficantes que secuestraron y asesinaron al agente de la DEA, Enrique “Kiki” Camarena en febrero de 1985. ¿No sentirá pasos en la azotea el ex gobernador poblano?, o, ¿acaso pensará que Sheinbaum Pardo lo seguirá protegiendo? Cuestión de esperar a después del 1 de octubre.