Con dos golpes finales, AMLO consolida poder con mayorías legislativas, ¿para luego irse?

Tras la puerta del poder

Roberto Vizcaíno

Los dos últimos movimientos para dominarlo todo, los cumplió ayer el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Uno fue de tal importancia, que fue su sucesora, la mismísima presidenta electa Claudia Sheinbaum, quien se encargó de presentar personalmente a los ex perredistas José Sabino Herrera y Araceli Saucedo como parte de la nueva bancada senatorial de Morena.

Con este par de adquisiciones, el presidente Andrés Manuel López Obrador asegura la aprobación de su paquete de 20 reformas Constitucionales para lograr, a días del final de su mandato, su prometida Cuarta Transformación, el inicio de un nuevo régimen en México.

Con Herrera y Saucedo la fracción de Morena en el Senado llega a 85 senadores. Le falta 1 para alcanzar los 86 que requiere la mayoría constitucional de las 2 terceras partes de los 128 legisladores que integran esa cámara.

Hoy nadie duda que ese último senador lo logrará AMLO para Morena de entre los grupos de PAN, PRI o MC que forman la oposición.

¿Cuánto costará eso?

“¡Lo que se requiera!, ¡cinco, diez o cincuenta millones!… Lo que se va a aprobar con esas mayorías en Senado y Diputados vale eso y más, mucho más”, afirma uno de la cúpula del oficialismo que arriba a la naciente Legislatura, y que le debe su curul como otros muchos plenamente a AMLO.

De entrada, todo está preparado para darle a AMLO su controvertida reforma al Poder Judicial que anulará en los hechos a la Suprema Corte y a la red de tribunales federales y estatales en todo el país. Lo hará al despedir a todos los ministros, magistrados y jueces —y a sus equipos—, para establecer la elección de sus reemplazos por voto popular, y sin casi requisito ni experiencia alguna.

Con ello desaparece el Estado de Derecho y las garantías de amparo y de juicios justos y abre la puerta que el narco y crimen organizado, o grupos económicos, tengan sus ministros, magistrados o jueces.

Entre otras reformas que se tramitarán está la que desaparecerá una decena de organismos autónomos, entre ellos el INE, para ser absorbidos por diversas dependencias del Presidente. Todo quedará bajo el control del Ejecutivo. Con esas reformas desaparecen los contrapesos a la Presidencia que eran esenciales para la existencia de la democracia y la pluralidad, el respeto a la libertad y la libre expresión.

Una vez que en septiembre, el primer mes de la nueva legislatura, se tramiten en cascada las reformas constitucionales propuestas por AMLO, habrá concluido el régimen post-revolucionario que operó desde 1928 a la fecha, y que con transformaciones logró establecer una democracia suficiente como para avanzar en elecciones confiables y una participación plural que respetaba a minorías y que colocó a México como la doceava economía entre los 150 países en el mundo.

Hoy, a un mes de que todo eso se realice, nadie sabe hacia dónde irá el nuevo régimen y si todo esto, impulsado por Andrés Manuel López Obrador, vaya a seguir, luego de que él entregue el poder a Claudia Sheinbaum el 1 de octubre.

Lo que se afirma es que no será un régimen democrático, ni habrá Estado de Derecho o certidumbre jurídica, más bien apunta a una autocracia con rasgos socialistas de los años 50 del siglo pasado.

Por 3 a 2, el Trife ratifica la sobrerrepresentación en diputados

Con choros mareadores que dijeron respetar lo establecido por el 54 Constitucional, los magistrados Mónica Soto, Felipe Fuentes y Felipe de la Mata se impusieron a la argumentación de los magistrados Janine Otalora y Reyes Rodríguez, que hicieron suyos los argumentos de decenas de constitucionalistas que advertían que si Morena, PT y Verde obtuvieron el 54% de los votos el 2 de julio frente al 56% logrado por PAN, PRI y MC no podían recibir el 75% de las 500 curules que conforman la Cámara de Diputados y que además significó recortar un 20% de esas curules a la oposición.

Todo esto estaba más que cantado.

Así, esta decisión del Trife, irrebatible, dio sobradamente al presidente Andrés Manuel López Obrador la mayoría calificada en San Lázaro para que modifique a su absoluto y único gusto la Carta Magna.

Dos golpes finales dados el mismo día para que AMLO cierre, como soñó y deseo, proyectó y preparó, su sexenio.

El 8 de octubre, Día Internacional de Prevención de Incendios

A propuesta de México la ONU estableció al 8 de octubre como el Día Internacional de la Prevención de Incendios.

Lo anterior fue informado durante la inauguración de la Séptima Expo Fire Protection & International 2024: “Sociedad, empresarios y gobierno unidos por un México sin víctimas de fuego” que se celebra en el World Trade Center.

El encuentro reúne a más de 4,000 asistentes en una gran exposición de 8 mil metros cuadrados, con más de 250 stands con participantes de 28 estados de la república y 15 países.

Organizado por el Consejo Nacional de Protección Contra Incendios, la Asociación Mexicana de Rociadores Automáticos Contra Incendios y el Colegio de Arquitectos de la Ciudad de México el encuentro busca impulsar la modernización de los equipos, programas y cultura contra incendios.

Juan José Camacho Gómez, Francisco Guzmán Hernández y Rodolfo Sánchez Zaragoza, presidentes respectivos de sus organizadores, se comprometieron a colaborar y participar en forma conjunta en materia de actualización y capacitación de normatividad, reglamentación y nuevas tecnologías en combate contra incendios.

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