Dos “chapulines” saltaron a la cesta de Morena; falta uno para la mayoría calificada
Miguel Ángel Rivera jueves 29, Ago 2024Clase Política
Miguel Ángel Rivera
Lo dicho, ya no hay héroes, lo que sobra son los “chapulines”.
Esto, porque ayer la Presidenta Electa, Claudia Sheinbaum Pardo, anunció que su bancada en el Senado aumentó a 85, con lo cual está a uno solo de tener mayoría calificada, con lo cual junto con igual representación en la Cámara de Diputados podrá modificar la Constitución a su antojo y consolidar el control absoluto del país.
Es la herencia de su líder y guía, el Presidente que va de salida, el tabasqueño Andrés Manuel López Obrador, quien no ceja en su intento de destruir al actual Poder Judicial por el “grave delito” de bloquear algunas de sus reformas.
Uno de los “chapulines” que saltaron es también tabasqueño, se trata del rico ganadero José Sabino Herrera Dagdug, quien fue postulado por el desaparecido PRD, quien al igual que su compañera Araceli Saucedo Reyes, de Michoacán, alegó en defensa de su decisión de pasar a las filas de Morena ser un luchador de izquierda que, al quedar sin partido, buscó acomodo en otra organización con la misma orientación política y, casualmente, la encontró en el partido oficial, urgido de tres votos para alcanzar en el Senado la anhelada mayoría calificada.
Comentó que, luego de que el PRD perdió el registro a nivel nacional, “la decisión fue inmediata: unirnos a los ideales de izquierda, unirnos a la causa de México y luchar de lado del pueblo”.
Como ocurre en la actualidad con mucha frecuencia, las redes sociales se encargaron de desvirtuar el pretendido intento del senador electo de presentarse como adalid de la izquierda.
En efecto, después de que Herrera Dagdug fuera presentado como parte del grupo parlamentario de Morena en el Senado, en redes sociales revivieron un spot de cuando era candidato al cargo por la coalición “Fuerza y Corazón por México”, conformada por el PAN, PRI y el casi extinto PRD.
“Así como tú, yo también ya estoy cansado de los políticos chapulines de siempre, para ser un buen político hay que tener palabra y saberla cumplir con acciones”, aseguraba Herrera Dagdug en ese video.
También aseguró: “soy un hombre de trabajo, un hombre de campo, de convicciones y lealtades”.
Por su parte, la michoacana Araceli Saucedo Reyes se presentó como “luchadora social” presumió ser una mujer con trabajo territorial con 20 años de recorrer Michoacán, de estar afiliada a la izquierda y no conocer ninguna otra identidad más la que hoy las está uniendo nuevamente.
El también senador electo y presidente nacional saliente del PAN, Marko Cortés Mendoza, al acudir a registrarse, sostuvo que los dos “chapulines” perredistas lograron sus escaños con los votos que obtuvieron por Acción Nacional.
Mencionó, por ejemplo, que la senadora michoacana, Araceli Saucedo, tuvo más votos por el PAN que por el propio PRD, y este es un espacio de la gente que cree que debe haber equilibrio, contrapeso, como fue también el caso del senador de Tabasco.
“Yo espero que honren esa confianza, que los mexicanos les dieron para venir a defender la voz de los que no coincidimos, de los que pensamos que en México debe haber equilibrio, siempre contrapeso y control”, dijo el dirigente panista en un inútil y extemporáneo llamado a los legisladores tránsfugas.
Los asegunes en la elección de presidentes
de las cámaras de Diputados y Senadores
En estas declaraciones, el dirigente nacional panista también comentó el tema de la elección del presidente del Senado, cargo que recayó en el controvertido legislador del PT, pero belicoso e irreverente defensor de Morena Gerardo Fernández Noroña.
Cortés Mendoza calificó la propuesta de Morena, para que Fernández Noroña sea presidente del Senado, como la más inadecuada.
“Lo que puedo decir en mi calidad de presidente del Partido Acción Nacional es que nos sorprende, porque dentro de las filas de Morena, del Partido Verde y del PT, había muchas otras personas que pudieran ser las ideales para llamar al orden a la buena conducción (de las sesiones del Senado). Yo creo que es el más inadecuado”, sostuvo el dirigente del partido azul.
Más contundente fue su compañera de partido y senadora reelecta, la sonorense Lilly Téllez, quien ya ha tenido varios enfrentamientos verbales con el ahora diputado y, a partir del próximo 1 de septiembre, senador Fernández Noroña, a quien ofreció que hará llorar”.
“Lo tendré en la mira todo el tiempo y le haré la vida de cuadritos para defender la dignidad del Senado ante sus vulgaridades, groserías y prepotencia”, expresó la senadora de Acción Nacional en sus redes sociales.
“Este corrupto, Gerardo Fernández Noroña, es el mayor admirador y cómplice del tirano de Venezuela, Nicolás Maduro.
Ahora compra diputados de Morena para ser presidente de la Cámara. Miente, roba y traiciona al pueblo”, escribió Téllez en redes sociales.
Los alcances de la capacidad polémica de la ex conductora de noticiarios se puede medir por el hecho de que el propio presidente Andrés Manuel López Obrador renunció a la posibilidad de entregar la medalla Belisario Domínguez a la distinguida economista Ifigenia Martínez, quien formó parte de los organizadores y dirigentes de la Corriente Democrática que marcó el inicio de la lucha por la democratización del país y que ahora está a punto de terminar para volver al control absoluto por parte de un sólo hombre.
En ese octubre de 2021, en Puebla, el inquilino de Palacio Nacional anunció que no iría a la sede del Senado por temor a que Lilly Téllez ofendiera la investidura presidencial.
“Aunque tiene todo el derecho de hacerlo, lo aclaro, pero yo también no puedo exponer la investidura presidencial y no voy a ir a que se me falte el respeto y se haga un escándalo. Imagínense, pero qué necesidad”, acotó.
El político de Macuspana leyó en esa ocasión la carta que le envió a la senadora Martínez, para disculparse por su ausencia en la ceremonia de entrega del galardón.
“Usted merece toda mi admiración y respeto, y por lo mismo tengo el deber de informarle que no estaré presente en dicha ceremonia porque una legisladora del bloque conservador está convocando a que se me falte el respeto y considero que no debemos caer en ninguna confrontación que ayude a la élite del poder económico y político ni a sus empleados y voceros”.
“Además maestra, le cuento, acá entre nos —pero no se ría, como le imagino— están muy enojados porque se está cumpliendo el apotegma juarista de que ‘el triunfo de la reacción es moralmente imposible. Le mando un abrazo, soy el Andrés Manuel de siempre que le quiere mucho’”.
Fernández Noroña se merece las agresiones por su beligerancia en las sesiones de los órganos del Congreso de la Unión, pero de alguna forma es más víctima que verdugo, pues su agresividad ha estado siempre al servicio de la llamada Cuarta Transformación que, al menos en los últimos tiempos no ha sido muy espléndida con él; es más, se puede decir que ha sido mezquina.
Es de recordar que, a pesar de no ser militante de Morena (es del PT) fue admitido para el concurso del partido oficial para elegir candidato presidencial, cargo que, de la mano de López Obrador, estaba reservado para Claudia Sheinbaum Pardo.
De cualquier forma, se dijo que los aspirantes que quedaran en los siguientes sitios tendrían su recompensa y por la posición que alcanzó Fernández Noroña le correspondía ser coordinador de la bancada mayoritaria en el Senado. Sin embargo, por tratarse de un ajeno o “arrimado”, no le dieron la posición y ahora, el nombramiento de presidente del Senado resulta una compensación porque quien tiene el verdadero poder en las cámaras es el líder de la mayoría y presidente de la respectiva Junta de Coordinación Política. La presidencia sirve para el lucimiento personal, pues el cargo significa tener un sitio preferente en todos los actos oficiales, por lo que tal vez eso es lo que busca el ex dirigente de los deudores de la banca.
Por el contrario, en la Cámara de Diputados, se hicieron movimientos para honrar la trayectoria de Ifigenia Martínez, quien será presidenta por un mes y luego dejará el sitio para alguien con más energía de la que ella conserva a sus 94 años.
Por mayoría de votos, la bancada de Morena decidió que Ifigenia Martínez en su calidad de presidenta de los decanos ocupará la Presidencia de la Cámara. Esto significa que ella tendrá el privilegio de entregar la banda presidencial a la primera mujer elegida Presidenta de México, Claudia Sheinbaum.