Clima e inseguridad en carreteras elevan ahora el precio del jitomate
* Especiales, Finanzas miércoles 21, Ago 2024
Se vende entre los 40 y 50 pesos el kilo
- Es el segundo producto que más ha aumentado
La sequía, lluvias extremas, los márgenes de comercialización y la inseguridad que afecta al sector transportista han provocado que, ahora, el precio del jitomate rojo en el país aumentara 79.46% anual en julio pasado, su aumento más elevado desde febrero de 2020, cuando se encareció 83.43%, según datos del Inegi.
Juan Carlos Anaya, director general del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas, explicó que el encarecimiento del jitomate se debe principalmente a la menor oferta del alimento por efectos del clima; sin embargo, también se debe considerar la inseguridad que afecta a los transportistas, ya que estos son extorsionados por la delincuencia en las carreteras que conectan con las principales centrales de abasto en el país.
Además, los márgenes de comercialización en las distintas etapas de la cadena de suministro, desde el productor hasta el minorista, han contribuido al encarecimiento, que va de los 40 a los 50 pesos el kilo.
Los transportistas que trasladan el jitomate a las principales centrales de abasto, como la de la Ciudad de México, son frecuentemente extorsionados por la delincuencia organizada, lo que incrementa los costos operativos y, en consecuencia, el precio final del producto para los consumidores.
Aunque el jitomate se cultiva en las 32 entidades federativas de México, Sinaloa es el principal productor, contribuyendo con el 19.58% de la producción nacional. Entre 2018 y 2022, el promedio de producción de jitomate en México fue de 3 millones 475 mil 890 toneladas, según el GCMA.
El aumento en el precio del jitomate es significativo para los consumidores mexicanos, ya que es un ingrediente esencial en la dieta diaria.
De acuerdo con el Inegi, el jitomate es el segundo producto que más ha incrementado su precio en el país, solo superado por el chayote, que subió un 83.35% en el mismo periodo.
México, entre países con alta inflación en alimentos
México se coloca como uno de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) con mayor inflación en alimentos.
De acuerdo con un ranking publicado por el organismo, el país reporta una tasa de 6.5% en este tema, según datos al mes de mayo.
Con ello, sólo es superado ampliamente por Turquía, que registra 68.1 por ciento.
Después de México se ubican Chile, Colombia y España, que reportan una inflación en alimentos de 6.1%, 5.3% y 4.2%, respectivamente.
“La inflación de los alimentos de la OCDE se mantuvo prácticamente estable en el 4.7% en junio desde el 4.85% de mayo”, refiere un reporte
Además, un mes atrás, en abril de 2024, los alimentos se encarecieron un 4.8%, por debajo de la subida del 4.9% de marzo, mientras que los precios de la energía repuntaron al 1.2% desde el 0.6% de marzo, cuando se adentraron en terreno positivo por primera vez desde abril de 2023, se añade.
Desde enero pasado, la tendencia se venía venir, y es que México registró una de las seis variaciones anuales más altas en la inflación de alimentos entre los 36 países miembros de la OCDE.
En ese entonces, el registro anual para la inflación de alimentos mexicana, fue de 7.3%, con lo que se alejó de la media reportada por los países OCDE en este mismo segmento, que fue de 6.2 por ciento
Al cierre de julio, el precio promedio de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) en México alcanzó $1,896.57 pesos, una variación de 1.02% al aumentar su precio en promedio $19.10 pesos, según datos de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC).
Recientemente, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) y la OCDE alertaron que los precios de los productos agrícolas podrían mantenerse altos para el consumidor final en la próxima década ante la imposibilidad de reflejar la ligera disminución estimada en las cotizaciones internacionales.
“Se proyecta una ligera caída en los precios internacionales reales de referencia de los principales productos agrícolas durante los próximos diez años, pero esto podría no reflejarse en los precios minoristas locales de los alimentos”, señalan en el reporte “Perspectivas Agrícolas 2024-2033″.