Economía en picada
Carlos Ramos Padilla martes 6, Ago 2024Se comenta sólo con…
Carlos Ramos Padilla
Resulta evidente que vendrá una nueva crisis económica mundial. Las cifras de empleo en Estados Unidos han sido con datos muy negativos, más de lo esperado. En los últimos días se ha registrado una caída importante en el valor del Bitcoin de casi 22%.
Los mercados asiáticos muestras bajas considerables del más de 10% (así las pérdidas: Nikkei 13.5; Taiwán, 8.4%; Corea del Sur, 8.8%; Hong Kong, 1.5%, y Wall Street abrió este lunes con caídas superiores a los mil puntos por el temor a una recesión en Estados Unidos) y el conflicto bélico generado por Israel pronostican, además de el de Ucrania, movimientos inciertos entre inversionistas.
Viene además un cambio de administración en la Casa Blanca que mantiene en la incertidumbre a la sociedad, luego de la baja propuesta de los aspirantes y el atentado contra Donald Trump.
El rebote ha alcanzado a México llevando otra vez al dólar a niveles arriba de los 20 pesos, cerrando la administración de AMLO con malos resultados y derivado, entre otras cosas, de la insistencia por desaparecer al INAI y otros órganos autónomos e imponer las reformas al Poder Judicial.
Venezuela aporta su granito de arena, luego de unas polémicas elecciones que hasta el momento han recibido una descalificación casi unánime de la comunidad internacional. Edmundo González continúa defendiendo su victoria.
La Comunidad Europea en su conjunto, la Organización de Estados Americanos y países como Ecuador, Costa Rica, Uruguay, Estados Unidos y Panamá desconocen el aparente triunfo de Nicolás Maduro.
Organismos privados y gobiernos de diferentes naciones piden ya un recuento y auditoría del proceso electoral en Venezuela e indirectamente dejan sentir la misma apreciación para México.
De última hora se informa que manifestantes en Bangladesh han derribado la estatua del jeque Mujibur Rahman, fundador del país y padre de la recientemente derrocada primera ministra Sheikh Hasina. Sin duda, el mundo exige liderazgos firmes que convoquen nuevamente a la aplicación del Estado de Derecho y a la armonía internacional. Estas semanas serán muy difíciles y los desajustes invitarán a fluctuaciones muy delicadas en la economía del planeta y en la estabilidad social.