Pantomima burlesca
Alberto Vieyra G. miércoles 19, Jun 2024De pe a pa
Alberto Vieyra G.
Irrumpió en la vida política nacional como un rufián cancelando por sus pistolas el Aeropuerto de Texcoco, mintiendo a todo mundo con una dizque democracia a mano alzada en las plazas, esa democracia que data de hace 2 mil 400 años, pero que según él otorga legitimidad a unos politicastros simuladores y canallas, que sigue con esa democracia haciendo pantomima burlesca engañando a los estúpidos.
No hay duda, respeto la estupidez de un pueblo que votó sin ninguna ciencia por una democracia estúpida que AMLO ha rescatado del basurero de la historia griega. Mi conclusión es que los gobernantes de la clase política en turno no están mal, aunque sean de la peor ralea; lo que está mal es el producto de esta nación azteca eso que llaman “pueblo bueno y sabio”, un pueblo que se niega a ser un pueblo culto para que no lo engañen ni se burlen de él como les venga en gana simulando una democracia estúpida.
Haré un poco de historia: En la antigua Grecia había la friolera cantidad de 25 clases de democracia entre ellas la llamada democracia plena, que era la más estúpida de todas.
¿Con qué se comía la democracia plena, hoy llamada democracia participativa? Los gobernantes demagogos griegos enviaban a sus esbirros a que preguntarán en las calles y las plazas a los vagos y malvivientes, qué es lo que el gobierno debería de hacer hoy, mañana y pasado mañana.
En una de esas estúpidas consultas populares, como las que hace AMLO, los vagos y demás gente sin quehacer opinaron que era necesario declararle la guerra a Esparta, una ciudad vecina que según ellos se estaba pasando de lanza. Los demagogos del gobierno se lanzaron en guerra contra Esparta y la guerra tardaría unos 26 años, pero ya nada fue igual para la población de la antigua Grecia. A esa guerra se le conoció como la Segunda Guerra del Peloponeso, unos 400 años a.C.
¿Qué nos dice semejante estupidez de los griegos empleando la innecesaria democracia plena?
Bueno, pues que las mayorías no siempre tienen la razón. Por ello, la tesis del filósofo griego Aristóteles no tiene desperdicio cuando sostenía que “la democracia es muy peligrosa y se convierte en tiranía cuando los gobernantes demagogos la emplean para manipular a las masas y estás actúan sin virtud y sin sabiduría”.
Desde que AMLO arribó al poder en México se emplea esa estúpida democracia y lo ha hecho como todo un demagogo en las plazas a mano alzada y a través de los medios de comunicación que él emplea como la mañanera, su principal medio propagandístico y sin faltar las encuestas “patito” pagadas sin rostro.
Esa manipulación estúpida de las masas en México es ya también adoptada por la corcholata de AMLO, la presidenta electa Claudia Sheinbaum, que junto con la nefasta dirección de Morena dio a conocer este lunes tres encuestas, sí, recurrió a 3 sastres para que le hicieran un traje a la medida que no tiene ninguna validez jurídica ni es vinculante y lo único que esa patraña logro es profundizar en la división de los mexicanos.
La UNAM anunció la ruptura con la señora Presidenta Electa y no se diga con el politicastro engañabobos de Palacio Nacional y anunció que hará su propio análisis del cochino “plan C” de AMLO, que busca acabar con organismos autónomos y la corte mediante una elección de jueces, magistrados y ministros mediante el popular y a propuesta del rufián de Palacio.
Otro engaño como el de Texcoco y otra burla para los mexicanos que siguen pensando en que la democracia de AMLO es la pureza democrática del mundo, cuando que la ha recogido del basurero de la historia griega. Lo triste es que se está llevando entre las patas a la primera Presidenta Electa de México y como el poder desgasta, no es remoto pensar que ya comenzó la deslegitimación de la señora presidenta a pesar de la carretada de votos que la llevó al poder. ¿O fue el referéndum o la reelección de AMLO?