Temporada de “puntadas” presidenciales
Víctor Sánchez Baños lunes 17, Jun 2024Poder y dinero
Víctor Sánchez Baños
- Imaginen a 1,500 jueces a elección
- Costo electoral, $3 mil millones
- Se acabará la República Mexicana
- Influencia del crimen organizado
- Amnistía, del perdón al autoperdón
- ¿La justicia, a una plaza pública?
- Hir Seguros y la industria en Puebla
Conceder el perdón es el más alto grado de vanidad o de miedo
José Luis Coll (1931-2007) Humorista español
Hoy, darán el resultado de la encuesta sobre la reforma judicial que AMLO quiere imponer. Igual que la del NAIM y la cervecería en Mexicali. Una justificación subjetiva y emocional.
Hay un dicho popular que reza que siempre es mejor que otro pague el mariachi mientras tú lo disfrutes.
Esa es la premisa del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, cuyas “puntadas” y necesidades personales y de su grupo nos han costado miles de millones de pesos. Ese dinero lo necesitamos para hospitales, medicinas, escuelas, atención a los niños, infraestructura, e infinidad de necesidades de un pueblo de más de 130 millones de habitantes.
Las puntadas presidenciales, como el freno de la construcción del NAIM, en Texcoco, que nos cuesta más de 300,000 millones de pesos más intereses a inversionistas nacionales y extranjeros. Hubiera sido la obra que marcaría el gobierno de Enrique Peña Nieto.
Después vinieron los sueños faraónicos para edificar una refinería, cuyo costo sería similar a la de unas siete de igual infraestructura en otras partes del planeta. Se menciona corrupción en las obras.
Por si fuera poco, se le ocurrió el Tren Maya, una obra depredadora de la ecología en la península de Yucatán. Generó enormes riquezas para constructores y acusaciones de corrupción de amigos de los hijos del Presidente.
La lista podría ser interminable. Sin embargo, sus obsesiones presidenciales llevan a reflexionar sobre lo que al final de su sexenio quiere dejar como terreno minado, político y económico, a Claudia Sheinbaum.
Quiere desaparecer a la República Mexicana. Somos un gobierno de tres poderes de igual importancia y peso. Al Poder Legislativo, como lo hizo Chávez en Venezuela, lo tomó vía electoral. La mayoría está con él en cuerpo y alma. Sólo le falta el Judicial, en donde los ministros han mostrado un muro para contener los caprichos del presidente de la República y que maneje como dueño las decisiones ampara nuestra Constitución y las leyes que hay de ella emanan.
Quiere llevar a elección popular más de 1,500 puestos del Poder Judicial de la Federación; a jueces de distrito, magistrados y ministros.
Elegir por voto popular a aquellos que tienen en sus manos el ejercicio de la justicia con conocimiento, técnica, carrera judicial y, luego de cubrir una larga lista de requisitos, pasar un examen de más de cuatro horas de conocimientos.
Además, los costos económicos y sociales: los aspirantes, como en los países socialistas deben pertenecer a partidos autorizados, quienes serían los beneficiados. La justicia no sería justicia y el gobierno, principalmente desde la Presidencia de la República, se dictarían consignas en favor o en contra de un ejecutor de la justicia. Además, su elección costaría más de 3,000 millones de pesos, cuyo costo pagaríamos todos los mexicanos.
Ahora, esa obsesión, es por un simple motivo: hay fuerzas políticas internas que desean ver a López Obrador tras las rejas. Tiene muchos puntos vulnerables. Por ello, quiere comprar un seguro de libertad. Y, para ello mueve sus últimas piezas para un futuro con cierta tranquilidad para él, sus hijos, su familia y algunos de los más cercanos colaboradores.
Pero, se le acabó el tiempo y acelera el proceso legislativo para aniquilar a la Corte. A partir de septiembre, con la nueva legislatura, quiere lograr la aprobación, sin importar poner en riesgo el entorno económico del gobierno de Claudia. Por el capricho de un sólo hombre, no podemos vacilar en el fortalecimiento del estado de Derecho del país. Eso se estudió en las carreras de Ciencia Política y Derecho de la UNAM.
Y del poder intimidador del crimen organizado influiría en las decisiones de jueces.
PODEROSOS CABALLEROS
LEY DE AMNISTÍA: López odia los albazos. Pero cuando él los aplica, los hace sin el menor recato. Sin entrar en detalles técnicos, el decreto que autoriza al Presidente amnistiar le da la facultad para dejar en libertad a cualquier ofensor de la sociedad que haya cometido delitos graves. No hay un reglamento en el cual se limiten sus decisiones. Invade jurisdicciones de los estados, en cuanto a los delitos del fuero común. Eso pasó en el nazismo, en el fascismo italiano, en el maoísmo, en el estalinismo. Por decreto, AMLO está por encima de las leyes y la Constitución. Como un dios. Es algo muy grave. Pero, vemos que busca que el próximo Presidente lo pueda perdonar, en caso de ser acusado de delitos graves. El sería el principal beneficiado.
RESPONSABILIDAD SOCIAL Y GOBERNANZA
HIR SEGUROS: Como parte de su plan de regionalización, HIR Seguros, liderado por Rodrigo Contreras, apuesta por Puebla con la reapertura de la sede en esta entidad. Esta funcionará como enlace entre las regiones centro, bajío y sur del país. Ponen el ojo en el desarrollo y crecimiento, la industria automotriz y las armadoras que son industrias que demandan protección en materia de vida y accidentes personales para los colaboradores.