Liberen a Carlos
Carlos Ramos Padilla martes 11, Jun 2024Se comenta sólo con…
Carlos Ramos Padilla
Extraña resulta la detención última de Carlos Ahumada, pero más extraña aún es la decisión del gobierno de López Obrador de desistirse a solicitar su extradición.
El Ministerio Público de Panamá confirmó la aprehensión del empresario Carlos Ahumada Kurtz en el momento en que quería pasar por un puesto migratorio en el aeropuerto de Tocumen.
Está acusado por la Fiscalía General de la República por un fraude fiscal cercano a 1.4 millones de pesos. Sin embargo, México no reclamó su extradición.
Ahumada Kurtz es perseguido por la justicia desde que en 2004 exhibió unas videograbaciones involucrando a varios personajes de la política allegados a AMLO y al PRD recibiendo fajos de billetes a cambio supuestamente de contratos públicos.
La detención obedeció a una orden de captura mundial de la Interpol (ficha roja). El Gobierno mexicano debió haber presentado una orden de aprehensión con fines de extradición ante el Ministerio de Relaciones Exteriores de Panamá, cosa que en apariencia no sucedió.
Resulta que un juez federal mexicano concedió la suspensión provisional que pone en pausa la orden de captura del empresario lanzada por las autoridades mexicanas. La Cancillería de México aseguró que por el momento no hará comentarios, “ya que es un caso en proceso”.
El Servicio Nacional de Migración de Panamá informó este 8 de junio que deportó a Paraguay a Carlos Ahumada, luego de que la Fiscalía General de la República no presentó una solicitud de extradición.
En una conversación que sostuve con Carlos, él en Argentina, me confió que no lograrían “extraditarme por ningún motivo y trasladarme a México… por más causas judiciales que inventen”. Ha dicho y sostenido, además públicamente, que conserva aún más testimonios, videograbaciones, con políticos de alto nivel involucrados en actos de corrupción. “No quiero dar a conocer más videos, toda la información que tengo sobre muchos funcionarios actuales del gobierno de México, mi familia ya ha resentido las consecuencias”, señaló.
“No quiero hablar de Thalía Lagunas, oficial mayor actual de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público; no quiero hablar de Reyna Basilio, jefa de compras de Pemex. Y así puedo seguir”, dijo el empresario.