El tema es la violencia
Humberto Mares N. jueves 14, Mar 2024Así las cosas…
Humberto Mares N.
Pareciera que todo va bien. Pareciera que somos un país en franco camino a la modernidad y prosperidad. Pero por desgracia no es así. El presidente Andrés Manuel López Obrador no lo ve. Su proyecto sigue adelante, pero no como quisiera. La gente ya empezó a manifestarse y a expresar su enojo porque lo que les prometieron nunca llegó. La clase media, la aspiracionista, que es el mayor segmento de nuestra sociedad, es la más enojada, no sólo porque no le cumplieron, sino porque es la más atacada y que más sufrió con la pérdida de muchos programas sociales retirados, para usar el dinero en las obras inconclusas de este gobierno.
Seguramente el 2 de junio, este segmento decidirá votar por quien sí les cumpla. El partido Morena, del presidente López, tiene asegurada una cuota que desde siempre le ha seguido a López Obrador. Hoy en día se calcula cercano a los 12 millones de votantes. Jamás estará cerca de los números obtenidos en la votación presidencial pasada en 2018.
En estos momentos, la nación se encuentra inmersa en la violencia. Los asesinatos en el país están cercanos a los 60 diariamente. Durante el sexenio del presidente López se han registrado 181 mil asesinatos dolosos y por ello, la crítica internacional es permanente para el gobierno de López Obrador, ya con el hashtag internacional de narcopresidente.
Resulta vergonzoso para los mexicanos que así cataloguen a nuestro Presidente y, por ello, algo debería hacer el presidente López.
Ante los hecho en el estado de Guerrero, en el caso del asesinato del estudiante de la normal de Ayotzinapa, con plena seguridad de testigos y las investigaciones, el presidente López sólo descalifico los hechos con su gran frase, lo magnifican.
Pero lejos de ello, el 11 de marzo, luego de la balacera de la policía a los estudiantes, se fugó el policía que presuntamente disparó contra Yanqui Rothan Gómez Peralta, estudiante de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos, por lo que se inició una búsqueda para detenerlo y fincar responsabilidades. En la mañanera, el presidente AMLO acusó que la huida del presunto agresor fue porque no se cumplieron los protocolos de un arresto administrativo, mientras estaba en Chilpancingo, así como una presunta complicidad de las autoridades estatales.
En este asunto de la fuga del homicida la fiscalía y Secretaría de Seguridad de Guerrero se echaron la bolita sobre quién tenía la custodia del uniformado. En tanto, normalistas de Ayotzinapa vandalizaron vehículos oficiales.
Por lo pronto, la gobernadora Evelyn Salgado no da la cara y la prueba son las declaraciones de una compañera de partido, la senadora Nestora Salgado, que lamentó que la situación haya empeorado a pesar de que gobierna una persona de su mismo partido, Evelyn Salgado, quien dijo que ni siquiera le contesta al teléfono. “Lo estamos viendo, que ha empeorado la violencia es grave, está fuerte. “A mí, que soy senadora, no me da una cita, ¿y qué hacemos? ¿Cómo resolvemos?”, cuestionó.
Chocan versiones de la Fiscalía estatal y la gobernadora de Guerrero. La Fiscalía General del Estado (FGE), cuya titular es Sandra Luz Valdovinos Salmerón, aseguró que ninguna autoridad puso a disposición de la institución a los policías estatales presuntamente involucrados en el homicidio del estudiante Yanqui Kothan Gómez Peralta.
Lo cierto es que no hay detenidos y el estado de Guerrero está sumido en la violencia y a la deriva. Los normalistas paralizaron la capital del estado, Chilpancingo, con violentas protestas en las que atacaron las instalaciones de la Fiscalía estatal, incendiaron patrullas, golpearon a efectivos de la GN y provocaron el cierre de comercios y cancelación de actividades laborales y educativas. Las movilizaciones ocurrieron momentos después de que el presidente AMLO informara que el policía estatal responsabilizado del homicidio del estudiante Yanqui Gómez huyó de una de las instalaciones de la Policía estatal de Guerrero donde estaba retenido.
En el mundo del Presidente López, sólo su visión es válida. AMLO niega violencia, pero destrozan las instalaciones de la Fiscalía y paralizan Chilpancingo.
El fraude que preparan
AMLO creo que está viendo de más o se ha vuelto muy imaginativo. Ahora, según él, los jueces están preparando un fraude electoral, porque podrán usar sus dichos para anular la elección presidencial, “¿van a hacer un fraude electoral desde el Poder Judicial?”. En su insistencia de una “guerra sucia” que tiene como fondo el final del actual proceso electoral, subrayó que en los últimos meses solamente le prohibieron hablar de la “señora” Xóchitl Gálvez Ruiz y borrar sus tweets sobre ella, sino que también ahora le empiezan a prohibir hablar de periodistas.
Después de que el domingo pasado la Iglesia católica mexicana diera a conocer su opinión sobre este gobierno en cuanto a la seguridad y pidió corregir el rumbo, el presidente López asegura que quiere crear un ambiente de seguridad que no existe. El diagnóstico de seguridad que presentó la Conferencia del Episcopado Mexicano, en un acuerdo que firmaron los candidatos a la Presidencia.
AMLO insiste. “Pero, políticamente, no estoy de acuerdo en que se quiera crear un ambiente que no existe. Les doy un dato, traigo otros datos, les doy el dato de ayer, de homicidios, estoy contento con eso, sin embargo, si leen los periódicos es puro amarillismo”, afirmó el mandatario. La cifra actual dada a conocer por Joaquín López Doriga es de 181 mil asesinatos en su sexenio. Así las cosas, hasta pronto.