Un cantado fraude electoral
Alberto Vieyra G. jueves 22, Feb 2024De pe a pa
Alberto Vieyra G.
“Voy a entregar la banda presidencial a alguien que piensa como yo”. Fue la impúdica declaración que AMLO hizo en Guerrero y que enardeció a los mexicanos bien nacidos, pues estaríamos ante un cantado fraude electoral y una descarada intromisión del presidente AMLO en el proceso electoral que podría dar lugar a que la elección presidencial sea anulada por violaciones a la Constitución en materia de equidad e imparcialidad.
¿Quién piensa igual que él, Xóchitl Gálvez, que según AMLO representa a la minoría rapaz que encabeza Claudio X. González o su remedo político que se autodefine como científica y que pareciera una calca al carbón del Presidente?
Desde luego que AMLO se refería a su “corcholata” que tiene una ideología extremista de izquierda y no son pocos los que la recuerdan que Claudia, junto con su marido Carlos Imaz, que como porros llevaron a la UNAM a la huelga más larga de su historia que duró 10 meses y todo porque se oponían a que se aumentarán las cuotas.
AMLO fue todavía más explícito haciéndola de jefe de campaña electoral de su “corcholata” cuando anunció nostálgico que:
“Estoy contento, estoy tranquilo porque ya termino mi ciclo, ya me voy a jubilar, pero el futuro, el porvenir, viene acompañado de una señora que se llama justicia. No puedo decir más, estoy contento por eso porque voy a entregar la banda presidencial a alguien que piensa como pienso yo”.
Lógicamente que quien piensa como él es Claudia Sheinbaum y esa inequívoca señal nos habla de una elección de Estado, que lleva a cabo el inquilino de Palacio Nacional, quien por lo visto no se jubilará porque en rigor, será el poder tras el trono en un inminente Maximato, desde el cual buscará convertir a México en otro Venezuela, donde Hugo Chávez y Nicolás Maduro acostumbraron a los venezolanos a que papá gobierno los mantuviese con dádivas de poder y cuando el petróleo dejó de ser la principal fuente de financiamiento de Venezuela, entonces comenzaría la gran dictadura de las vacas flacas.
Previamente, ambos dictadores emularon a Hitler haciendo que los venezolanos chairos odiaran a todo lo que huele a conservadurismo y ricachones. Los ricos se convirtieron en el enemigo común de los venezolanos de a pie, justamente lo que hace AMLO propiciando que “el pueblo bueno y sabio” odie a los conservadores y ricachones que estarían a punto de perderlo todo, en caso de que AMLO y su “corcholata” quieran adueñarse de la propiedad privada, un asunto toral que AMLO no ha podido concretar hasta hoy, porque en las elecciones federales del 2021 perdió la mayoría legislativa calificada.
Recuérdese que cuando Adolfo Hitler arribó al poder, Alemania tenía un déficit de 6 millones de trabajadores y él prometió que a la vuelta de un año todos estarían trabajando. Lo cumplió, todos trabajan en las fábricas de armamento y por ese milagro los alemanes le perdonaron al nazi todas sus locuras, incluyendo el exterminio de 7 y medio millones de judíos, a los que hizo ver como el enemigo común de los alemanes y de toda Europa. A Hitler se le conoció como el carnicero del Vaticano, que sospechosamente guardó silencio cuando los judíos eran masacrados en los campos de concentración. Esa lección deben aprenderla los mexicanos, porque de otra forma, si Claudia es impuesta, la nación azteca se podría convertir en un México bronco. Así que Xóchitl debe arrasar para sepultar a Morena y a AMLO con carretadas de votos para que no haya lugar al pataleo poselectoral. AMLO debe entregar la banda presidencial no a quien él quiera, sino a quien elija la mayoría de los mexicanos y no necesariamente debe tener la misma nefasta ideología que él tiene. ¿O no mi lic.?