No podemos quedarnos en las quejas, la Iglesia al quite
Humberto Mares N. martes 20, Feb 2024Así las cosas…
Humberto Mares N.
En nuestro sistema constitucional es responsabilidad del gobierno dar seguridad a los ciudadanos y así lo reconoció Andrés Manuel López Obrador, pero no lo tenemos, por lo que la Iglesia católica decidió ayudar, así que cuatro obispos de Guerrero decidieron buscar a los líderes del crimen organizado para pedirles dejar la violencia, es decir que dejaran de matar a la gente.
Desde luego que hablamos del estado donde la violencia y la extorsión prevalecen, aún después del impacto del huracán “Otis” y cuyo gobierno encabezado por Evelyn Salgado, no aparece y no hace nada al respecto.
El gobierno federal ha enviado tropas y Guardia Nacional, 15 mil elementos más o menos, pero la delincuencia sigue haciendo de las suyas. El cardenal Felipe Arizmendi Esquivel reconoció que los 4 obispos han buscado a los líderes de la delincuencia organizada para pacificar al país. “Los obispos intentamos hablar con estos líderes porque no podemos quedarnos sólo en quejas y lamentos contra el gobierno, que no ha logrado pacificar el país, sino hacer lo que más podamos”, dijo. “La intención no es hacer pactos de conveniencia personal sino tratar de hacerles ver la necesidad de cambiar de vida, de respetar personas y bienes de la gente y no generar más inseguridad y violencia”, afirmó Felipe Arizmendi.
Cuando menos, el obispo Arizmendi nos habla con la verdad, porque en esta época no sucede. Nos engañan, nos dan mal la información y finalmente la acomodan a conveniencia, siempre en apoyo a la 4T, como el caso de los transportistas y existen muchos casos más. El presidente López Obrador dijo que ve “muy bien” que obispos de Guerrero hayan intentado negociar una pacificación con delincuentes en Guerrero, autores de la ola de violencia y ejecuciones en esa entidad.
Encerrado en la zona naval de donde no ha salido, durante su conferencia matutina desde Acapulco, señaló que todos en el país deben ayudar a conseguir la paz; no obstante aclaró que garantizar la tranquilidad en el territorio nacional le corresponde al Estado. Efectivamente, el Estado, en los tres niveles, tiene la responsabilidad prioritaria de dar seguridad a los ciudadanos y se lo quieren acomodar a los ciudadanos, pero eso se llama ineptitud. La autoridad podrá dar recomendaciones, pero no pedir que hagan lo que es su responsabilidad.
Enfrentamos la peor crisis de violencia”. Exigimos que se revise el modelo de seguridad, porque no está funcionando”, afirmó Javier Ávila, líder jesuita de la Sierra Tarahumara, durante el foro virtual Agenda Nacional por la Paz, organizado por la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), añadió que hay una crisis crónica del Estado de Derecho”. Nos enfrentamos a un sistema fallido”. Esta es la política fallida de abrazos y no balazos. La Iglesia entró al quite por el bien de los habitantes, ante la pasividad de la autoridad.
Los transportistas no avanzan
El presidente nacional de la Alianza Mexicana de Organización de Transportistas (Amotac), Rafael Ortiz Pacheco, advirtió que si en el plazo de un mes no hay resultados por parte de la Secretaría de Gobernación, que garanticen su seguridad, volverán a manifestarse. Luego de una mesa de trabajo con autoridades de la Secretaría de Gobernación, en donde les dijeron que la prioridad es la elección y no su asunto.
Los transportistas esperarán 15 días para que empiecen a aplicar lo que prometieron en una segunda mesa, por lo que dan un mes de plazo para ver los resultados, mientras el Presidente López dice que son empleados de los liberales, los adversarios. El gobierno no entiende que los transportistas son la maquinaria de nuestro sistema comercial, porque sin ellos simplemente no tendríamos insumos de todo tipo y nuestro sistema comercial colapsaría.
La marcha por la democracia
Fue un éxito la Marcha por Nuestra Democracia, que se extendió a 120 ciudades del país y cerca de 20 países en el mundo. La “marea rosa” regresó y desbordó el Zócalo capitalino, en donde quedó claro que no se quiere un gobierno autoritario y la lucha por el voto libre y en paz, porque la democracia lograda en muchos años está en riesgo. Los actos de sabotaje para debilitar o desviar el objetivo de la mega marcha del domingo fracasaron.
Los ciudadanos volvimos a demostrar que estamos con la ley y no somos “borregos” de una mafia del poder corrupta que tomó el poder. La demostración de la sociedad es contundente y el inquilino de Palacio no acepta que la marcha fue en su contra y tuvo éxito, que se publicó en medios internacionales como tal. Esto lo enfurece.
Lorenzo Córdova Vianello lanzó un llamado a evitar una “regresión autoritaria”; y asistentes que abarrotaron las plazas voluntariamente, sin ningún acarreo, piden elecciones libres, ante un Zócalo desbordado por una marea rosa “en defensa de nuestra democracia”.
Lorenzo Córdova, en su calidad de catedrático de la UNAM, acusó que desde el poder se quieren destruir las condiciones y procedimientos que han permitido la renovación pacífica del gobierno. Sin mencionar ningún nombre, aseguró que se encabeza un “proyecto de regresión autoritaria” que busca desaparecer sistemáticamente la democracia y las instituciones constitucionalmente autónomas de México.
Cientos de miles de personas expresaron su rechazo a las iniciativas presidenciales con un “feroz ataque” contra INE, TEPJF, Corte y otros organismos autónomos. Entre gritos de “la democracia no se toca”, de la “marea rosa”, el ex presidente del INE llamó a defender los logros democráticos y advirtió que la democracia y las libertades en México están en riesgo.
Córdova Vianello pidió a la sociedad a salir a votar masivamente en las elecciones de este 2 de junio porque buscan destruir al INE y controlarlo políticamente, pues hay “un ataque feroz” contra el Instituto, el TEPJF y la Corte. “Nos pasamos 40 años en la construcción de este andamiaje y hoy, quien llegó al poder gracias a ello, pretende destruir las escaleras para que nadie más transite por ahí”.
Al final, la multitud gritaba eufóricamente “fuera López”, que seguramente sí se escuchó en Palacio Nacional, en un Zócalo sin la bandera mexicana ondeando como siempre lo vemos. El miedo llegó hasta ese grado de no izar nuestra bandera. Así las cosas, hasta pronto.