La ley es la ley
Carlos Ramos Padilla martes 6, Feb 2024Se comenta sólo con…
Carlos Ramos Padilla
Podría, debería estar de acuerdo totalmente con Armando Reyes “Catón”, cuando escribe lo siguiente:
“Hoy es un día de luto para México. La ausencia de López Obrador en la ceremonia de aniversario de la Constitución en Querétaro no sólo rompe una tradición respetada y respetable: es también ofensa grave a la máxima ley y soez atentado contra la República y sus instituciones”.
Pero lamentablemente las cosas van más allá que una ausencia intencional. AMLO ha sido un activo provocador en los aniversarios de nuestra Constitución desde su arribo a la presidencia, incluso aprovechó la oportunidad para mofarse de la titular de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la ministra Norma Piña.
El Presidente, al juramentar al cargo asumió la responsabilidad de cumplir y hacer cumplir los artículos de la Carta Magna. Sin embargo, en la historia contemporánea, es el Ejecutivo Federal que más violenta a los códigos legales que nos dan forma como sociedad.
“No me salgan con que la ley es la ley” lo describe a la perfección. Es un sujeto de combate a la mala. Decide imponer su voluntad imponiendo a personajes a modo para cumplir sus caprichos, ahora está Lenia Batres como ejemplo más próximo y si no Olga Sánchez Cordero o Arturo Zaldívar. Recordemos cómo jugó con la figura de “Juanito” (Rafael Acosta) para beneficiar a Clara Brugada o de qué manera traicionó a Ebrard y su aceptación para entregarle el “bastón de mando” a su incondicional sirvienta Claudia Sheinbaum.
AMLO ha cancelado fideicomisos, entregado contratos sin licitación, obligando a terminar con un mega presupuesto sus obras faraónicas, ha intentado desaparecer la autonomía universitaria, menosprecia a las instituciones y las manda al diablo, se rodea de sujetos acusados de corrupción que él mismo descalificó en el pasado y les regala impunidad, regala las llaves de la CDMX a cuánto tirano y dictador se le antoja, vulnera las reglas electorales, modifica al espacio aéreo nacional y rifa una aeronave que no le pertenece, defiende los derechos de los criminales y protege con cercas a Palacio Nacional impidiendo la libre manifestación.
Su ausencia en una ceremonia republicana es importante y seguro denunciará que estaba protegiendo a su investidura cuando en Estados Unidos se empiezan a destapar testimonios del vínculo del crimen organizado con Morena para financiar sus campañas electorales.
Está acostumbrado a acusar, señalar y atacar a periodistas, empresarios y políticos sin presentar pruebas, sólo dichos que descansa en sus “otros datos” que nunca revela.
Permite la censura en medios de comunicación (ahí la estampa propia del desorden que ha patrocinado la señora Delfina Gómez en el Sistema Mexiquense de Radio y Televisión) y qué decir de Notimex.
El ministro Pérez Dayán ofreció una cátedra de lo que significa la Constitución y la responsabilidad del Poder Judicial para con ésta. “La Constitución no debe ser mancillada por caprichos de nadie, independientemente de por quién sean electos”. Ahora, Xochit Gálvez en Estados Unidos ha solicitado la vigilancia internacional al ejercicio mexicano electoral de junio próximo dado que AMLO, en su historial, no está decidido a aceptar una derrota y menos a entregar el poder a los “conservadores fifís”. “Catón” tiene razón, es un día de luto, pero no nada más por una insultante ausencia.