Hacienda mantiene gasolinas y diésel sin apoyo fiscal
* Especiales, Finanzas lunes 8, Ene 2024
- De 5 a casi 7 pesos, el impuesto por cada litro
Para el lapso del 6 al 12 de enero, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) decidió mantener sin el estímulo fiscal, que se aplica al Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) a la gasolina Magna, la Premium y al diésel.
Ésta es la segunda semana de 2024 que los conductores no recibirán este apoyo aunado a que entró en vigor el aumento que tendría dicho impuesto a partir de este año.
Para el caso de la gasolina Magna o regular, los consumidores pagarán un impuesto de 6.17 pesos por litro, mientras que para la gasolina Premium o roja, los consumidores erogarán un IEPS de 5.21 pesos. En cuanto al diésel, el mercado pagará la totalidad del IEPS aplicado al diésel, de 6.78 pesos por litro, publicó la SHCP en el Diario Oficial de la Federación (DOF).
Fue el pasado 8 de diciembre cuando Hacienda publicó un decreto en el que eliminó dicho beneficio fiscal a los tres combustibles y que entró en vigor al día siguiente 9 de diciembre.
En el mercado local, el precio promedio nacional del diésel es de 24.183 pesos por litro, frente a los 24.192 pesos de la semana pasada, de acuerdo con datos de PETROIntelligence.
La gasolina verde es vendida en un precio promedio nacional de 22.143 pesos y la roja, en 24.172 pesos por litro, refieren datos de la empresa especializada en el mercado de hidrocarburos. La semana pasada, se comercializaban en el mercado en 22.153 pesos y en 24.189 pesos por litro, respectivamente.
En México se paga IEPS por cada litro de gasolina que se adquiere; no obstante, para evitar la volatilidad, la dependencia establece cada semana un estímulo fiscal con base en el tipo de cambio, precios de referencia internacionales y costos logísticos.
El IEPS es el gravamen que se paga por la producción y venta o importación de gasolinas, alcoholes, cerveza y tabaco, entre otros bienes, principalmente. Igual que el IVA es un impuesto indirecto, debido a que los contribuyentes no lo pagan directamente sino que lo trasladan o cobran a sus clientes (excepto en importación) y el contribuyente sólo lo reporta al SAT.