Mabel es una brillante y divertida puesta en escena
Teatro viernes 1, Dic 2023
En el Foro La Gruta del Centro Cultural Helénico
- Sé sanguinario, osado y sin temor, ríete de cualquiera y su poder: ningún hombre nacido de mujer de Macbeth podrá ser el vencedor. 4to acto, Macbeth de William Shakespeare
Gerardo Jiménez Saiz
El teatro, ese recinto sagrado que sirve para contar historias, desde la época de los griegos se le considero al drama y la comedia como una de las ramas de las bellas artes, pero en ese lugar se han contado las historias más bellas y se le ha dado tantas y tantas vueltas para que el público pueda gozar de una maravillosa función.
Pero ahí detrás de cada butaca de cada telón de cada lámpara existen fantasmas, fantasmas viejos, muy antiguos que a veces nada más se sientan a gozar la función y de manera tácita aplauden, ríen o lloran, pero de vez en cuando y hasta casi sin querer son invocados por palabras o ciertas cábalas y ahí es cuando comienzan las maldiciones en el recinto.
Esta es la maravillosa e increíble y muy divertida premisa de MABEL, una obra que obviamente hace referencia a la palabra prohibida: “Macbeth” que bien canta la leyenda que decir el nombre de esta inmortal de Shakespeare puede ser muy pero muy desastroso.
Dos actores: Santiago Zenteno y las alternantes: Adriana Montes de Oca y Angélica Bauter hacen un magnífico trabajo, ya que en dos actores reside todo el peso de cada uno de los muy complicados personajes de Macbeth incluyendo el coro de las brujas y aquí la pregunta seria. ¿Y porque están solos? La respuesta es demasiado sencilla, los demás ya fallecieron o están convalecientes en algún hospital por la maldición que conlleva montar esta tragedia o decir en voz alta el título de la puesta.
¡Hey! pero no vale espantarse ni pensar que esto es un drama, al contrario, el vestuario, los diálogos, el “clown” preciso milimétrico de los histriones, el mezclar la prosa y los versos con el español cotidiano hace que esta puesta en escena sea una joya, literal una cosquilla al alma para que estalle el corazón de alegría y todo reviente en carcajadas.
No lo olvide la cita es en el foro la gruta del Centro Cultural Helénico.
La historia de la maldición de «Macbeth» comenzó en su propio estreno. Según la leyenda, el actor que debía interpretar al protagonista murió repentinamente y el propio Shakespeare debió asumir el papel; se rumoreó que en las representaciones se usaron dagas reales en vez de las de guardarropía, y que eso habría causado la muerte del actor