Escombros y abusos al alza, ¿y Profeco?
Eleazar Flores miércoles 8, Nov 2023Espacio Electoral
Eleazar Flores
SE LO ANTICIPÉ-. Colegas del gremio, originarios de Guerrero, fueron LA FUENTE primigenia del apocalipsis basurero que se veía venir, mucho más temprano que tarde, en la zona turística del puerto de Acapulco, de atención mediática inmediata, no así de pueblos distantes a diez minutos o menos, que ayer padecían del apoyo oficial, “hasta de unas botellas de agua”.
Y es que hasta la recolección de basura fue una función que centralizó el gobierno federal o cuando menos así lo declaraban los uniformados -soldados, marinos y de la Guardia Nacional-, por lo que las palas y camiones recolectores no se movieron los primeros cinco días después de la tragedia del huracán “Otis”.
Así como le adelanté todo lo relacionado al proceso electoral universitario, que para los más será tema a tratar hasta hoy, el asunto de la basura también lo leyó aquí y ojalá y me equivoque, pues los mismos amigos guerrerenses adelantan que los pocos servicios médicos que a la fecha atienden en el paradisiaco Acapulco podrían resultar insuficientes, ante posibles brotes de infecciones gastrointestinales, preferentemente.
Se harán indispensables espacios hospitalarios, pero también medicinas y médicos, no sólo los anunciados cubanos de los que todos hablan, pero nadie ve, igual que la PRESENCIA presidencial en algún lugar del puerto, pues la única foto testimonial fue cuando un vehículo militar en el que viajaba el presidente Andrés Manuel López Obrador SE ATASCÓ, superando el problema con empujones de uniformados del pueblo bueno.
ABUSOS AL ALZA-. Enfocados —medios y opinión pública— en los lamentables acontecimientos de Acapulco, prestamos menos atención a asuntos políticos como los ridículos del gobernador de Nuevo León consentido de AMLO, Samy García, los hechos violentos en el mismo lugar con asesinatos de policías y gente del sector judicial, pero en todo el país se padece un ALZA GENERALIZADA de productos básicos, no sólo en Guerrero, donde ciertamente se acentúa el caso.
Ni la pena vale citarle porcentajes de aumento, pues estos varían según la entidad federativa, ya que en Acapulco una botella de agua se vende hasta en 60 pesos, pero en todo el país, han subido en forma considerable arroz, frijol, azúcar, tortillas, aceite comestible y demás insumos necesarios para que las amas de casa elaboren lo alimentos para el hogar.
Entre tanto, la Procuraduría Federal del Consumidor, Profeco, se nota por la ineficiencia de sus funcionarios, no porque el ex titular Ricardo Sheffield haya sido muy eficiente, sino porque quien lo sucedió ni se ve ni se oye.
Con esas ¿eficiencias? en el control de precios, acostúmbrese a seguir comprando hoy más caro que ayer y así sucesivamente, con un final incierto… pero vamos requetebién.