Espino, candidato
¬ Augusto Corro jueves 21, Jul 2011Punto por punto
Augusto Corro
- Decisión contra viento y marea
- Panistas, entrampados: RGC
- Perfiles capitalinos
En la euforia electorera aparece Manuel Espino, decidido a ser candidato a la Presidencia de la República.
El controvertido ex dirigente del Partido Acción Nacional (PAN), explica las razones de participar en la contienda política del 2012.
Expulsado de esa organización política por un juez, el líder llevó su caso a instancias electorales superiores. Al redactar esto no se conocía el fallo de las autoridades respectivas.
Aunque para Espino le da lo mismo, pues “al anunciar esta decisión algunas personas han mostrado inquietud a causa del proceso que busca expulsarme de mi partido. Sin embargo, esa intentona en nada afecta mis posibilidades”.
Dice textualmente: “Estoy cierto de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación actuará con apego a nuestra Carta Magna, que protege manifiestamente la libertad de expresión. Pero en el remoto caso de que hubiera un fallo en mi contra, aún así registraré mi candidatura”.
Entre otras consideraciones, el político señala que ha sido panista de por vida y que no tiene otra opción que no sea Acción Nacional.
También se queja de que “hoy muchos usan nuestras siglas como marbete, adorno o etiqueta; carentes de convicción. Me precio de ser lo contrario, panista de vocación, no de ambición. Tener o no mi nombre en un padrón y en una credencial no deroga mi historia política ni el brío de mis ideas”.
Y agrega: “Atrás y adelante de esta decisión tan trascendental está el movimiento nacional Volver a Empezar (VAE), impulsado con el incontenible vigor de las convicciones panistas originarias.
“Ciertamente, muchos sí conocen los principios, pero los venden en el tianguis de las ambiciones; se traicionan a sí mismos por un mendrugo en el poder. Esos no están en VAE”.
Indudablemente, la decisión de Manuel Espino provocará más conflictos en el partido blanquiazul, donde una gran mayoría de panistas están confundidos por el grupo de aspirantes a la silla presidencial.
No olvidar que tanto el senador con licencia Santiago Creel, como el propio Espino son gente muy cercana al ex presidente Vicente Fox. Ahora, lo interesante será conocer que tanto apoyo les brinda a ambos el guanajuatense.
Después de Espino, la dirigencia panista cayó en un bache del que no puede salir y esto se ve en las derrotas en diferentes elecciones, en las que ha participado con candidaturas propias. Germán Martínez y César Nava fueron echados del PAN por su desempeño pésimo como dirigentes.
Los blanquiazules triunfaron en Oaxaca, Sinaloa y Puebla, porque intervinieron en alianzas aventureras en busca del poder, lejos de sus principios y de sus idearios políticos
VERDADES PANISTAS
Por otra parte, el senador blanquiazul, Ricardo García Cervantes, quien se ha distinguido por hablar con la verdad, volvió a poner los puntos sobre las íes respecto a lo que ocurre al interior de su partido.
Impugnó el proceso interno para la elección del abanderado presidencial de 2012: “hace unos meses, en una acción irreflexiva, se alentaba a candidatos. ¡Pásenle! Y ahora. ¡No, redúzcanse. Háganse menos, declinen unos a favor de otros! ¿Cómo cargada? Se hace de sospecha”.
Dijo que el corazón no lo ciega ni le tapa los ojos y que considera que en el PAN “no se reflexiona, no se miden las consecuencias. En la elección del candidato presidencial panista se debe ser más serio, más democrático y más honesto”.
En el PAN “están entrampados, presionados… Es grave lo que está pasando en el partido, se debe retomar la vida institucional”, expresó.
Finalmente, aseveró: “no es un secreto que en el partido hay grupos de interés y grupos en pugna, y esto de hablar de unidad nada más como declaración (…) es creer que los panistas, que todos los mexicanos somos tontos. Es más tonto el que cree que el otro es tonto”.
PERFILES CAPITALINOS
En el Distrito Federal la grilla política también se encuentra muy movida.
La secretaria general del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Dolores Padierna, dijo que el PRI no es competencia electoral en la capital del país.
Informó que en los próximos días se efectuará el análisis de cada uno de los perfiles de los aspirantes a la candidatura por el gobierno del Distrito Federal, para determinar a quién consideran la mejor opción.
Refirió que hasta el momento los perredistas que han señalado su interés por contender son Alejandra Barrales, Mario Delgado, Benito Mirón Lince, Laura Velázquez, Alejandro Rojas Díaz Durán y Carlos Navarrete.
Recalcó que el candidato al gobierno del DF será de extracción perredista, aunque ya se haya aceptado la alianza con el Partido del Trabajo (PT) y Convergencia. Por lo tanto, figuras como el senador Ricardo Monreal están descartados de antemano.
También consideró que al PRD no le preocupa que “personajes de la sociedad civil y que cuentan con un capital político propio, como el ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Juan Ramón de la Fuente, y el procurador general de Justicia capitalino, Miguel Ángel Mancera, sean convocados por el PRI”.
Quizá a la dirigente perredista no le han informado que el doctor Mancera encabeza la lista de los aspirantes con mayor aceptación por el electorado capitalino y que a los priístas no les caería nada mal llevarlo como abanderado del tricolor en la competencia electoral.
La lucha apenas empieza, pues los “chuchos” tratarán de imponer a su candidato, el senador Carlos Navarrate, y Andrés Manuel López Obrador (AMLO) a alguien de sus colaboradores cercanos, como Ricardo Monreal. No es remoto pensar que Marcelo Ebrard se incline por Mario Delgado (su delfín, como se asegura) aunque encontrará un obstáculo que salvar frente a los perredistas-chuchos, quienes apoyan al legislador Navarrete.
Por cierto, el delfín de Ebrard, encargado de la Secretaría de Educación en el DF, no crece políticamente, a pesar de los esfuerzos que realiza. Eso dicen las encuestas.