¿Aceptarías que tus datos personales sean públicos?
Víctor Sánchez Baños jueves 5, Oct 2023Poder y dinero
Víctor Sánchez Baños
- El gobierno quiere fichar a todos los mexicanos
- El INE tiene nuestros datos, sólo faltan a los niños
- Habría verdaderos ahorros, sin duplicidad
- Un gobierno organizado tiene un ID único
- ¿Tiene objetivos de control y electorales?
- Cualquiera puede pedir datos biométricos
- Mexicana de Aviación, ahorros absurdos
- Ministros no reciben a consejera de Presidencia
Yo no hablo de venganzas, ni perdones.
El olvido es la única venganza y el único perdón
Jorge Luis Borges (1899-1986), escritor argentino
Desde que tengo uso de razón periodística, hace más de cuatro décadas, he visto que todos los gobiernos, desde el de Luis Echeverría hasta el actual de López Obrador, buscaron el control de todos los mexicanos. Una sociedad sometida, es más fácil de gobernar.
Primero, a través del registro civil, todos debían ser registrados desde su nacimiento hasta su muerte; también documentar huella ante las autoridades de los matrimonios, herencias y todo tipo de actos que puedan estar legalmente a la mano de cualquier tipo de autoridad, no sólo judicial sino hasta del Ejecutivo.
La cédula única de identidad, en el gobierno de Ernesto Zedillo, fracasó, fue un escándalo. En esos días el padrón del Instituto Federal Electoral, ahora INE, se encontraba a la venta en los mercados de productos falsificados o robados, a precios de risa. Podrías tener millones de registros para enviar correspondencia, llamar por teléfono e incluso extorsionar. Su “inversión” sería de solo mil pesotes.
Pero, además de Zedillo, estas pasiones controladoras, las tuvieron Luis Echeverría, José López Portillo, Miguel de la Madrid, Carlos Salinas de Gortari, Vicente Fox, Felipe Calderon, Enrique Peña Nieto y ahora el gobierno de AMLO.
¿Qué es lo que buscan los gobiernos con una cédula de identificación única? Únicamente el control de las masas. Cualquier “ente de gobierno”, un policía, el fisco o el ingreso a edificios públicos y privados, te pedirían esa cédula, y sin tu consentimiento, obtienen tus datos y te hacen vulnerable ante criminales o un Estado represor.
Esta suerte la pueden correr desde un recién nacido hasta un perseguido político; todos, los 130 millones de mexicanos.
De esa forma, es claro, ese sistema de control podría ser vendido a la delincuencia organizada, lo que ha ocurrido con los datos del INE, incluso, con algunos patrones de registro fiscales.
Los mexicanos estamos dispuestos a tener una cédula edificación, pero sumar a la del INE y la captación de datos biométricos, que actualmente realizan ilegalmente las obtienen, hasta, empresas privadas fuera de la norma de la ley. Este es un abuso que debe ser controlado y legislado.
Para los diputados y senadores, el uso de los datos privados no es importante. Es claro que su ignorancia los lleva a aceptar todo lo que les ordenan desde Palacio Nacional, pero no miden las consecuencias, no sólo para aquellos que quieren tener una vida tranquila y en paz, sino para los mismos políticos que, con un cambio de gobierno, podría ser perseguidos y localizados con esas cédulas.
En un país de leyes, donde se respete escrupulosamente la norma, los ciudadanos estarían completamente tranquilos. Sin embargo, no vemos que la ley sea aplicada y eso lleva a una completa impunidad de los criminales. De esa manera nuestra intimidad, nuestra vida privada, puede ser vulnerada por nuestro propio gobierno o cualquier malandrín.
La cédula de identificación única tendría datos biométricos, información sobre salud, incluso información fiscal.
Así actúan los gobiernos totalitarios. De esa manera son identificados en las calles los ciudadanos y perseguidos aquellos que no sean dóciles al gobierno en turno.
Me disculparás estimado lector por caer en el sospechosismo. Pero, es claro que el gobierno se ha ganado a pulso la desconfianza del pueblo. Nos han traicionado infinidad de veces que esto debe llevarnos a una profunda reflexión sobre todos los actos de gobierno que realizan.
Tenemos un INE que sirve como identificación, sólo faltan los menores de edad.
A ellos, les pueden dar un documento que pudiera emitir el INE. Tienen la infraestructura suficiente para realizar esa labor.
Pero, como en el actual gobierno de López Obrador quieren aniquilar ese organismo, quieren empezar con acaparar el control de las ID. Después, controlar el padrón electoral y los comicios. Así de siniestros.
PODEROSOS CABALLEROS
MEXICANA AIRLINES: Es impresionante la improvisación de los administradores de la aerolínea Mexicana de Aviación. Vean la página de internet, que deja evidencia que el dueño es el gobierno, con la terminación gob.mx. Es una auténtica porquería. Pareciera que fue sacada de una plantilla de 100 pesos en la web. Si así van a manejar la aerolínea, con ahorros absurdos, entonces los riesgos para los pasajeros serán mayúsculos. *** CONSEJERÍA JURÍDICA: Con paso marcial, la consejera jurídica de Presidencia, Estela Ríos, acudió a la SCJN. No fue recibida por la presidenta Norma Piña y fracasó en su objetivo de “exhibir” los abusos presupuestales. La venganza será que le bajen el presupuesto, bajo consignas de gastos onerosos de ministros, magistrados y jueces. Les quitan la prima de riesgo, con lo que decenas de jueces preferirán renunciar, antes de dejar en la orfandad a sus familias. Esos jueces no tienen la protección de los vestigios del Estado Mayor Presidencial, que ahora despachan en la “ayudantía”.