Caso Ayotzinapa, golpe en el cerebro y corazón de AMLO
Adriana Moreno Cordero miércoles 27, Sep 2023La Retaguardia
Adriana Moreno Cordero
- Ramírez Marín se va al PVEM, la traición no se puede ocultar
En el noveno aniversario de la noche negra en la que desaparecieron 43 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa, el presidente Andrés Manuel López Obrador tuvo la “virtud” de confrontarse con los padres de estos normalistas, argumentando errores y malos entendidos de parte de este grupo, porque hay que señalar que el inquilino de Palacio Nacional, nunca se equivoca.
Cuando según él, el caso había quedado resuelto gracias a sus buenos oficios, surgió una declaración demoledora de parte de los familiares de los estudiantes Ayotzinapa, que golpeó la cabeza y el corazón del tabasqueño. Coincidió este grupo en que el expediente que indudablemente López Obrador utilizó como bandera en sus tiempos de candidato y aún ya en la Presidencia de la República, se acercaba cada vez más a la tan llevada y traída “verdad histórica” que hizo pública el entonces procurador General de la República, Jesús Murillo Karam, que actualmente se encuentra en la cárcel.
Como se recordará, en enero del ya lejano año 2015, el informe establecía que una banda del crimen organizado, conocida como Guerreros Unidos, secuestró y ordenó el asesinato de los estudiantes. Murillo Karam estableció que los normalistas “fueron privados de la vida, incinerados y sus cenizas arrojadas al Río San Juan en Cocula” y agregó contundente que: “esta es la verdad histórica de los hechos, basada en las pruebas aportadas por la ciencia, como se muestra en el expediente y que ha permitido ejercitar acción penal en contra de los 99 involucrados, que han sido detenidos hasta hoy”.
Dentro de esas conclusiones, se determinó que el grupo Guerreros Unidos confundió a los jóvenes normalistas con sicarios de la banda rival conocida como Los Rojos.
Sin embargo, y en lo que no hay coincidencia, es en que el informe dado a conocer durante la administración de Enrique Peña Nieto, se concluyó en que no había pruebas de que autoridades locales o federales de ese tiempo, habían participado en los sucesos de esa trágica noche y aún al día siguiente. Si no, que le pregunten al entonces presidente municipal de… José Luis Abarca y su esposa, Ángeles Pineda.
En la marcha en la que se conmemoraron 9 años de estos trágicos hechos, familiares y padres de los 43 desaparecidos concluyeron que:
“La confianza nosotros pensábamos que se la iba a ganar (López Obrador) sabiendo la verdad, pero desafortunadamente no se nos permite para poder avanzar. Él dice que es diferente, que no lo echáramos en el mismo saco, pero creo que ya sólo se está echando”, dijo Mario César González, padre de uno de los jóvenes desaparecidos.
Pero la resiliencia de los funcionarios de esta errada y llamada cuarta transformación es verdaderamente impresionante, pues no les importa qué hacer con tal de conservar su puesto y ese es el caso ni más ni menos que del subsecretario de Derechos Humanos de la Segob, Alejandro Encinas.
Otra cuestión importante de destacar es que lo que en el fondo pretende el presidente López Obrador es que se resiste a culpar en lo más mínimo, ni de cerca al Ejército a quien le ha entregado todo en su administración, en lo que se refiere a un hecho en el que fueron muchos los involucrados.
Por su parte, el secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, sugirió una alternativa, la de recurrir al ex líder de Guerreros Unidos, Gildardo López Astudillo, para obtener la información que exigen los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa, sobre los hechos ocurridos la noche del 26 de septiembre de 2014, en Iguala.
Municiones
¿Y para qué tanto brinco estando el suelo tan parejo?, eso reza un sabio y viejo refrán que hoy aplica a la perfección ni más ni menos que al líder nacional de Morena, Mario Martín Delgado, porque ayer, intentando generar la mayor expectación posible, convocó a una conferencia de prensa para anunciar lo que estaba más que cantado: que no buscará la candidatura de su partido a la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México. Se reitera, ¿cómo iba de alguna manera Delgado Carrillo a desdeñar la posición de poder que tiene ahora al frente del partido oficial? Como ya se consignó en este espacio en anterior entrega, no pudo resistirse a la tentación de “palomear” las listas y poner como candidatos a algún puesto de elección popular, a sus cercanos o a quienes le hagan mejor “la barba”. Si se hubiera lanzado a la contienda por la CDMX, tendría muy limitado su campo de acción y tanto que le costó al dirigente morenista permanecer encabezando la cúpula del partido guinda, no lo iba a echar por la borda.
*** Y a propósito, muy modosito, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, invitó a seguir por “las ex benditas redes sociales”, su propia conferencia de prensa para anunciar que va a buscar la candidatura morenista al gobierno capitalino. Según se sabe, ni sus familiares más cercanos asistieron por pura pena y desde luego, por las redes sociales le “llovió duro y tupido” al funcionario. Bueno, el único que le echó porras fue el flamante vocero de Sheinbaum, Gerardo Fernández Noroña, que dice que se siente representado por él.
*** No dejó de causar sorpresa que a pesar de estar muy “cantado”, el senador Jorge Carlos Ramírez Marín haya renunciado al PRI para irse ni más ni menos que con el PVEM para buscar la candidatura al gobierno de Yucatán. Sin duda, Ramírez Marín tiene méritos propios, pues es el único legislador que alcanzó un escaño en el Senado de la República por la votación directa de sus paisanos, pero ahora que el PAN se ha inclinado por el alcalde de Mérida, Renán Barrera, pues el panorama le cambió. En su carta de despedida, el senador ex priista señaló: “Por este medio, le comunico que he decidido participar en otra fuerza política en este proceso 2024. Voy a poner todos mis esfuerzos en establecer un proyecto que como oposición sea una alternativa viable de verdadero cambio para los yucatecos”, así que la contienda por Yucatán va a estar muy reñida. Sin embargo lo que no puede descartarse, es que el senador Ramírez Marín llegó a donde está gracias al partido al que militó por varios años, el PRI, donde fue tres veces diputado plurinominal federal y tuvo otros importantes cargos como secretario en el gabinete del ex presidente Peña Nieto. La traición es algo que no se puede ocultar.
*** Para todos aquellos que ven de bajo perfil a la senadora Xóchitl Gálvez, hay que señalar que muy interesante será el encuentro que sostendrá con el secretario de la Defensa Nacional, Luis Crescencio Sandoval. El pretexto es la seguridad que ofrece esta errada y llamada Cuarta Transformación a quienes son prácticamente ya las candidatas presidenciales, sin embargo, no se descarta que se aborden otros temas muy interesantes.