Evitar la transmisión de VIH de una embarazada a su hijo es posible

Cápsulas de la salud

Elsa Rodríguez Osorio

• La comunicación efectiva entre médico y paciente es fundamental

Evitar la transmisión de VIH de una mujer embarazada a su hijo es posible si se detecta a tiempo”, informa Adriana Salguero, representante de Mesón, una asociación civil que atiende de forma integral las necesidades de este grupo vulnerable que requiere de apoyo por los entornos de violencia y discriminación a los que se exponen”, afirma Salguero. Mesón A.C. surge en 1996 como respuesta ante los requerimientos no cubiertos de salud para las personas que vivían con VIH en la zona metropolitana de Guadalajara y otras regiones del estado de Jalisco. ”En los primeros años de nuestra asociación, los espacios hospitalarios tenían un número limitado de camas y no recibían a más pacientes debido a la saturación, por lo que creamos un albergue para las personas que vivían con VIH e incluso se convirtió en un espacio en el cual les daban paliativos para ayudarles a bien morir. Además, la asociación se enfocó en otro espacio en el que se brindaba atención a los niños que nacían de mujeres con VIH, pues no había protocolos de medicamento; también había nanas para cuidar a los pequeños”, recuerda Adriana Salguero. Desde entonces se han brindado servicios de salud a más de 40 mil personas y en la actualidad gracias a las alianzas con autoridades e instituciones se tiene el firme propósito de acompañar a las personas que viven con VIH para gozar de una vida digna y un futuro con esperanza y mejorar los indicadores que colocan a Jalisco como el tercer estado con más fallecimientos a causa de VIH. En Jalisco, Mesón A.C. es la única asociación civil que apoya a mujeres que viven con VIH, en diferentes rangos de edad y para ayudar a evitar la transmisión vertical de madre a hijo, hemos creado esquemas de atención inmediata que cuando los hospitales reciben a una mujer embarazada con VIH, la refieren hacia nosotros que ayudamos a facilitar el proceso. Hoy se ha dado de alta a 369 bebés libres de VIH después de un proceso de seguimiento de mínimo 18 meses y 58 bebés y sus mamás se encuentran en seguimiento actualmente. Para atenderlas mejor se han construido alianzas gracias a las cuales, Mesón A.C. puede proveer servicios libres de costo. Además, se apoya a personas que no tienen seguridad alimentaria como adultos mayores, mujeres y poblaciones indígenas, entre otros. Mesón tiene la perspectiva de la interculturalidad. “Hay casos donde necesitamos vincular a tratamiento a alguna persona con antecedentes de uso de drogas, donde se le asiste con un aliado para apoyar a su rehabilitación y se refiere al área de psicología que otorga atención individual para afianzar la situación de duelo, acompañamiento para cuidado, entre otras”Lo anterior aunado al apoyo que esta organización otorga a grupos de la comunidad LGBTQ+ (con PrEP, PEP, Atención médica de Infecciones de transmisión sexual y coloproctología), a personas de la tercera edad que viven con VIH, e incluso atención integral a niños con VIH, además de prevención vertical del VIH, a mujeres diagnosticadas a tiempo.

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De acuerdo con datos del IMSS, la comunicación efectiva entre médico y paciente tiene tres componentes básicos: verbal, no verbal y paraverbal; estos dos últimos elementos son fundamentales, ya que aportan hasta el 93% del contenido del mensaje. En este contexto las habilidades de comunicación de un médico son indispensables para mejorar los diagnósticos y tratamientos; resaltando que el reconocimiento de los estados de ánimo de un paciente como el enojo o la tristeza, así como su contexto social pueden recopilarse y procesarse gracias a la ayuda de herramientas como los expedientes clínicos electrónicos. Esto conlleva un nuevo reto que va más allá de recopilar la información, pues de acuerdo con empresas como Prosit, una buena relación médico-paciente es esencial por varios motivos: Comunicación efectiva y apego al tratamiento. Toma de decisiones compartidas y apoyo emocional. La comunicación médico-paciente es indispensable para el diagnóstico oportuno y tratamiento efectivo. Las herramientas de última generación se han convertido en aliados para que esta comunicación y recopilación de información se vuelva realmente efectiva, tal es el caso de los expedientes médicos digitales La comunicación efectiva, el apego al tratamiento, la toma de decisiones compartidas y el apoyo emocional son factores que generan una gran relación médico-paciente. Entre médico y paciente se construye una relación en la que, además de los diagnósticos, son imprescindibles ciertas habilidades y destrezas, así como empatía, confianza y sensibilidad, a fin de que los tratamientos cumplan con el objetivo de recuperar la salud.

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