Cuatro lecciones para destruir una esperanza
Víctor Sánchez Baños martes 5, Sep 2023Poder y dinero
Víctor Sánchez Baños
- Mentir, robar, traiciona y corromper
- Morena tenía todo para cambiar al país
- AMLO se rodeó de bandidos e incompetentes
- Fracasó en la principal demanda: fin a la corrupción
- El cochinero de las “corcholatas” y la ambición de poder
La libertad sólo reside en los estados en los que el pueblo tiene el poder supremo
Cicerón (106 AC-43 AC) Escritor, orador y político romano
Considerado como el fenómeno de principios de siglo en el país, Andrés Manuel López Obrador encabezó una tendencia política que, razonablemente, llevaba banderas que muchos mexicanos deseamos que se cumplieran. Al final fracasó.
Lo más importante era rescatar de la miseria y la pobreza a 50 millones de mexicanos. No se trataba de quitarle a los que más tienen, sino hacer una distribución de la riqueza más justa. Para ello se deben usar instrumentos de política fiscal, como lo recomiendan los nuevos economistas: brindar oportunidades, mediante la generación de riqueza.
Otro factor en donde fracasó la 4T, en cinco años de gobierno, es en la lucha contra la corrupción. Llegaron al gobierno los corruptos de otros sexenios y se enquistaron en el poder. Ellos saben dónde se encuentran las llaves para obtener dinero ilícito y a costillas del pueblo. Esa corrupción la pagamos todos, en los mercados o en la compra de mercancías; ahí es donde golpea la economía nacional e impide que podamos crecer con mayores oportunidades.
AMLO tenía cuatro banderas y las destrozó de un plomazo. No robar, no mentir, no traicionar y acabar con la corrupción. Eso se quedó en el imaginario, ya que hoy roban con impunidad, mienten con cinismo, desde el Presidente de la República y todos sus subalternos; traiciona hasta sus mismos correligionarios de partido, Morena, y la corrupción no tiene.
Qué decir la incongruencia de principios. Unos son los que predican y la realidad se rige por “otros datos”. El discurso en el púlpito de Palacio Nacional es en contra de la riqueza, el dispendio, los derroches, los negocios sucios y las fiestas de los nuevos ricos; y en la realidad la familia presidencial derrocha millones de pesos en una fiesta de cumpleaños de la hijastra de José Ramón López Beltrán. Debían ser congruentes con lo que dice su padre, quien con 200 pesos en la bolsa hace milagros que a millones de familias les es imposible de cumplir.
Esta descomposición política, que se ve en la 4T, se estremece en el proceso de selección de su candidato presidencial. Independientemente de quien fuera, el desaseo en esos procesos preelectorales, es impresionante. La votación entre las bases ha estado plagada de irregularidades. Entiendo que Alfonso Durazo, gobernador de Sonora y coordinador de los procesos, así como el presidente de Morena, Mario Delgado, no pueden contener aquellos que ven como última oportunidad de mantenerse en el poder y recibir las mieles del usufructo del presupuesto, el dinero del pueblo, y se aferran hasta con las uñas a la olla de oro.
La oportunidad que tuvo López Obrador de cambiar al país, con ese apoyo de la aplastante mayoría que lo llevó a la Presidencia el 2018, lo tiró a la basura por sus alianzas inconfesables con delincuentes que arribaron al gobierno y por su afán de regresar al país a los sistemas totalitarios socialistas de mediados del siglo XX.
Así, con la amenaza de que si pierden las elecciones les quitan a los más vulnerables los programas sociales, lo cual nadie podrá cambiarlos porque están ya protegidos por la Constitución, quiere que su partido se mantenga en el poder y le proporcione aquellos traidores al pueblo impunidad para los próximos seis años. La estrategia del miedo.
Mañana sabremos oficialmente quién será la candidata de Morena. Estará obligada a castigar a los corruptos de la 4T. Esto para darle legitimidad al próximo gobierno. ¿Se atreverá?
PODEROSOS CABALLEROS
LIMÓN Y PROFECO: Con discursos quieren apagar los incendios que afectan los bolsillos de los mexicanos. Ricardo Sheffield, procurador del consumidor, aseguró que hay una baja en el precio del limón. Yo estuve en un centro comercial, Fresko, de los González Nova, y el precio estaba en 85 pesos por kilo. El problema es de fondo. Quieren ocultar que la extorsión que sufren los productores y transportistas limoneros en Veracruz, Michoacán y otras entidades, son de ficción como lo comentó López Obrador en una mañanera. Videos de infinidad de pruebas demuestran que los transportistas y productores pagan derecho de piso. Los criminales actúan con total impunidad. Esto es lo que quieren ocultar desde la Profeco.