La inseguridad, más de lo mismo
¬ Luis Ángel García viernes 1, Sep 2023Por la Derecha..!
Luis Ángel García
El periódico Reforma publicó su más reciente encuesta sobre la aprobación ciudadana al desempeño del Presidente; ya no puede rebasar el 60 por ciento, pero sube la desaprobación por sus críticas a la oposición, además de ser cada vez mayor el número de mexicanos que se manifiestan por un cambio en el rumbo del país, según el propio ejercicio demoscópico. Sin embargo, lo más preocupante para los vocingleros de la 4T e incluso para el propio inquilino de Palacio Nacional, es el porcentaje de ciudadanos que dimensionan el problema de la inseguridad como el más preocupante en todo el país, casi el 70 por ciento de los entrevistados lo vieron como el tema más preocupante, por encima de la situación económica, la corrupción y la salud, cuyo sistema está en crisis y muy lejano al de Dinamarca.
En los últimos días, el mandatario federal ha pretendido minimizar el issue de la inseguridad y hasta dio un espaldarazo a la impresentable e insalvable gobernadora de Guerrero, quien enfrenta un serio conflicto de gobernabilidad y ha cedido el poder al crimen organizado, quien incrementó la violencia en la entidad e incluso se evidenció la connivencia de las autoridades municipales del puerto de Acapulco con delincuentes. Pero el presidente dijo que no hay focos rojos en el estado y que la hija de Félix Salgado Macedonio es una excelente gobernadora, se rayaron los guerrerenses (sic).
La misma defensa presidencial se hizo con el mandatario morenista de Michoacán, donde los asesinatos de políticos, los bloqueos de carreteras, la extorsión a agricultores como limoneros y aguacateros, la quema de vehículos o comercios de conveniencia, la destrucción de empacadoras, los ataques a civiles con explosivos desde drones, los enfrentamientos entre criminales, donde los ciudadanos -víctimas del fuego cruzado-, son cosa de todos los días, aunque el tabasqueño dice que solo significan actos publicitarios. Pero para atender esas “expresiones propagandísticas” envía a mil seiscientos soldados. Extraña forma de ver a un “estado tranquilo”.
Lo mismo ocurre en Chiapas, donde se presentan fenómenos sociales como la migración, el desplazamiento de comunidades, los asesinatos de líderes comunitarios, el desconocimiento de autoridades locales -incluso de las designadas por elección o usos y costumbres-, el bloqueo de carreteras y la impotencia del gobierno estatal para controlar esa ingobernabilidad. Mas el inquilino de Palacio Nacional dice que es una entidad tranquila.
La verdad es que la violencia ha rebasado a las autoridades y a pesar de la narrativa oficial es evidente que la percepción ciudadana tiene otros datos. Hoy, siete de cada diez mexicanos se sienten inseguros y la terca realidad les da la razón. 165 mil asesinatos en cinco años, el mayor número de homicidios dolosos en la historia ya no tan resiente. La extorsión y el secuestro van al alza, así como los robos en todas sus modalidades y en el mundo, el periodismo es considerado como la profesión más peligrosa para ejercer en México. Pero el gobierno insiste en que vamos requetebién y hasta hablan de una reducción del 17 por ciento en las muertes violentas, dato falso que contraviene los números absolutos de la propia administración.
El ciudadano de la calle sabe que las autoridades mienten y que en muchos lugares han abdicado en su función de velar por la seguridad de sus gobernados, resguardar su vida y patrimonio. La pérdida de la gobernanza se traduce en más violencia, más inseguridad y eso lo percibe la población en la calle, en el trabajo, en la escuela, en el transporte y no se ve una solución a corto plazo, al menos no en este fallido sexenio. La inseguridad que percibe el 70 por ciento de la población sólo comprueba que es más de lo mismo: más muertes, más masacres, más secuestros, más extorsiones, más robos y un largo etcétera. Nos quedaron a deber, escojamos mejor a nuestros futuros gobernantes.