Mochilas vacías y mercenarismo político
Alberto Vieyra G. miércoles 30, Ago 2023De pe a pa
Alberto Vieyra G.
¡Qué alivio no tener que cargar basura ideológica! ¡Qué alivio que las mochilas vayan vacías a la escuela! Así deberían de ir siempre para no cansar a los chiquillos con libros y libretas que algún día terminarán en la hoguera o el basurero de la historia.
Este átomo de la comunicación es partidario del formidable sistema educativo de Finlandia y otras naciones de países bajos donde la enseñanza está basada en métodos motivacionales, como la música, el teatro, el cine, la poesía y otras ramas del arte que facilitan el aprendizaje de una manera excepcional y sin faltar la lectura de un libro por semana, es decir 52 libros por año que deben leer padres de familia, alumnos y maestros. ¿Resultado? Una nación culta.
¿Cuántos siglos deben pasar para que en México se llegue a una cultura de tal naturaleza que nos permita hacer una nación culta?
También soy partidario de no cansar a los niños con mochilas repletas de libros, con interminables tareas con las que los desvelan hasta la madrugada y que al final de cuentas no se les queda nada por el cansancio.
Lo mejor sería no dejar tareas y que en las aulas se les enseñen 4 o 5 temas haciendo que los niños hagan su propio sistema de aprendizaje y que la lectura sea la base fundamental de la educación porque con ello terminaríamos por desterrar a esos mexicanos que escriben con unas imperdonables faltas de ortografía como ocurre con la mayoría de los morenistas que nos mal gobiernan y la redacción pareciera ser hecha con las patas traseras, como este erudito Marx Arriaga y su gatón Sady Loaiza, de origen venezolano, quienes se encargaron de meter en los libros de texto un imperdonable adoctrinamiento comunista y con un tratamiento faccioso de la historia de México como esa de que Benito Juárez nació el 18 de marzo y no el 21. Caray, por lo menos se hubieran ido a la papelería a comprar monografías.
Cómo recuerdo aquellos mis libros de texto gratuitos de historia, geografía, civismo, lengua nacional, un libro completo de matemáticas y no 15 pinchurrientas hojitas como los libros de AMLO y cómo recuerdo aquellas fábulas fascinantes de Esopo que contenían metáforas basadas en valores humanistas.
La cuestión es que ayer, los niños llegaron a casa con mochilas vacías. En 7 estados del país como Chihuahua, Querétaro, Estado de México, Guanajuato, Aguascalientes, Coahuila y Yucatán, donde el Poder Judicial amparo a padres de familia para que no se reparta la basura ideología de AMLO.
En el resto de los estados la mayoría de los gobernadores sobre todo los desgobernados por Morena no le buscaron mangas al chaleco porque de Palacio Nacional salió la orden tajante de que se repartieran los libros porque de lo contrario, se verían las caras el mes próximo cuando AMLO mande a la Cámara de Diputados el Presupuesto Federal para 2024. Ahí fue donde la puerca torció el rabo y se tuvieron que doblegar con singular cinturita de mantequilla. No está por demás reiterar que los libros de texto gratuitos no deben estar basados en ninguna ideología partidista y deben concretarse solamente a lo que consagra el Artículo Tercero Constitucional de que la educación debe ser laica, científica, humanista y gratuita.
Y al dueño del partido Movimiento Ciudadano, el renegado ex priista Dante Delgado, le llueve en su milpita. Por los 4 puntos cardinales del país lo tildan de un traidor mercenario de la política azteca al servicio de AMLO. En los altos círculos del poder se habla de que Movimiento Ciudadano se está resquebrajando y en caso de que Dante decida echarse en manos de Morena, podrían quitarle la franquicia de esa lacra social que se ha negado terminantemente a ser alianza con el Frente Amplio, aunque los militantes de ese partido en Jalisco ya le dieron su apoyo a Xóchitl Gálvez.
¿Dante Delgado terminará su vida como un vil mercenario al servicio del Presidente de la República?