Conflicto en Movimiento Ciudadano
¬ Augusto Corro jueves 24, Ago 2023Punto por punto
Augusto Corro
En el partido Movimiento Ciudadano (MC) le apuestan al divisionismo en tiempo de definiciones políticas.
La citada organización política en los últimos años obtuvo triunfos que la colocaron en segundo lugar, tras el Partido Acción Nacional (PAN).
Ganar las gubernaturas de Jalisco y Nuevo León subió los bonos de un partido sumido en el anonimato.
En la presente temporada de elecciones presidenciales, el MC se convirtió en un factor importante, en la suma de votos.
A la dirigencia emecista se acercaron los representantes de otros partidos para integrarse en alianza, pero en el MC se negaron a aceptar cualquier adhesión.
La idea de Dante Delgado, dueño del mencionado instituto político, es la de participar con candidato presidencial propio.
En relación al deseo de su líder, los emecistas se mantenían a la expectativa. Sólo aparecían en encuestas los nombres de sus posibles precandidatos presidenciales.
Entre ellos el presidente de Monterrey, Luis Donaldo Colosio, y los gobernadores Samuel García y Enrique Alfaro, de Nuevo León y Jalisco, respectivamente.
En tiempos políticos complejos, llenos de incertidumbre para MC, el mandatario jalisciense anunció la ruptura con el partido que lo llevó al poder. Para justificar su actitud, el político jalisciense declaró:
“Ya no tengo interés de participar en un proyecto que ya no entiendo, que se construye de manera unilateral y que simple y sencillamente nos quiere someter a todos a la voluntad de quienes coordinan el partido a nivel nacional”.
Dijo también que no quiere pelear ni disputar nada, por lo que dejará que los integrantes de la dirigencia nacional tomen sus decisiones y les deseó suerte.
También declaró que MC corre el riesgo de aislarse y tomar decisiones basadas en información poco creíble.
El propietario Dante Delgado, líder nacional del partido, manifestó que respeta la decisión del gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, de desmarcarse de MC, rumbo a las elecciones del próximo año,
“Lo que tengo claro es que Movimiento Ciudadano está por encima de decisiones personales y que, insisto, esto nos va a poner a prueba a todas y todos”, agregó el político veracruzano.
Los asesores de la alianza partidista
Lo que buscan los políticos a la mexicana es mantenerse en el poder. No importa el cargo público que se les asigne.
Vemos, por ejemplo, que José Ángel Gurría, tras un desempeño desastroso como funcionario en la Secretaría de Hacienda, en el sexenio de Ernesto Zedillo.
El economista, también llamado “El ángel de la dependencia”, se autodestapó como precandidato presidencial, pero fracasó.
El pasado, lleno de errores de Gurría, no fue obstáculo para que el Frente Amplio por México lo designara como arquitecto de su gobierno. Claro, si ganan la silla presidencial.
El ex funcionario, quien aspiró a participar en la contienda electoral presidencial, pero fue eliminado, dijo que aportará su experiencia para impulsar su participación de expertos e incluir las mejores prácticas en a construcción del Frente.
Detalló que se integrarán grupos de trabajo para tratar temas relacionados con la democracia y Estado de Derecho, políticas sociales en educación y salud, campo, seguridad y economía.
Otro precandidato frustrado, Santiago Creel, se encargará de coordinar la campaña presidencial de Xóchitl Gálvez, si ella gana el proceso interno del Frente Amplio por México. Como se informó, el 3 de septiembre se conocerá el ganador de la contienda electoral. El diputado panista tendrá, pues, su premio de consolación luego de renunciar a la lucha en busca de la silla presidencial.
Por otra parte, el ex gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo, se unió al Frente Amplio por México para coordinar los temas relacionados con el campo. Se trata, según se informó, aprovechar su experiencia como ingeniero agrónomo.
En el Frente Amplio por México están decididos a mantener la unidad partidista sin importarles que políticos quemados, como se dice coloquialmente, se presenten como los salvadores del neoliberalismo.
¿Usted qué opina amable lector?