Indiferencia gubernamental impide frenar violencia contra la prensa
Luis Muñoz miércoles 12, Jul 2023Segunda vuelta
Luis Muñoz
El periodismo es una actividad fascinante, pero al mismo tiempo una profesión letal para quienes la ejercen en cualquier lugar del mundo.
En México, para el gremio de los comunicadores no hay lugar seguro. La fatalidad siempre está presente.
La eterna lucha entre el poder y la prensa. La relación entre los políticos y los medios de comunicación siempre ha sido ambivalente.
Por un lado los políticos la necesitan para lograr la aceptación del público y resultar elegidos; por otro, temen el escrutinio de su gestión cuando gobiernan y tratan de controlar lo que se publica. Pero hay otros, los delincuentes, las mafias, que recurren al silencio de sus “enemigos de la prensa” para ocultar sus actividades criminales al precio que sea.
Hoy en día, aquí en México, en América Latina y en el mundo, la relación prensa-gobierno es más tensa que nunca. En nuestro país, el gobierno ha hecho todo lo posible porque así sea. Desde Palacio Nacional, el Presidente se ha dado a la tarea de dividir a los medios, los que están con él y los que no lo están, estos últimos, blanco de todos sus ataques.
En esta línea, el colectivo Grupo Integral de Derechos Humanos (GIDH) “Lex-magister”, sostiene que México es uno de los países más peligrosos y mortíferos para el periodismo, carente de reformas o acciones para frenar la espiral de violencia en contra de la prensa.
Aunque el Estado está obligado a proteger a los periodistas, cuya situación ponga en riesgo su vida, lo cierto es que esa protección está ausente y una prueba de ello es que van 12 periodistas asesinados en este año.
El presidente del colectivo GIDH, Jesús Rey Fierro Hernández, expuso que la actual administración de Andrés Manuel López Obrador “no ha emprendido las reformas y las acciones necesarias para frenar la espiral de violencia en contra de la prensa y los comunicadores”.
Enfático, dijo que “el Estado está obligado a identificar el riesgo y advertir al periodista sobre su existencia, valorar las características y el origen del riesgo, así como definir y adoptar oportunamente las medidas de protección”.
Fierro Hernández, Premio Nacional de Derechos Humanos (2017), indicó que el Estado debe prestar especial atención a la situación de aquellos periodistas que, por el tipo de actividades que desarrollan, están expuestos a riesgos de una intensidad extraordinaria. Recordó que sólo en lo que va del presente año se ha registrado el asesinato de doce periodistas, más otros 21 casos de amenazas o agresiones; el caso más reciente es el del periodista Luis Martín Sánchez Íñiguez, secuestrado y luego asesinado en un paraje de Tepic, Nayarit. A todo esto se suma el caso de Ciro Gómez Leyva.
Y muchos otros que hoy tienen sumido al gremio de comunicadores en una espiral de violencia e inseguridad, en la que siempre está latente el riesgo de perder la vida.
Luis García Casas dice que los ataques sistemáticos por parte de los políticos, el veto a medios no afines en las ruedas de prensa oficiales, las denuncias de periodistas que se ven señalados con nombre y apellido, así como el uso de la publicidad institucional como forma de premiar o castigar a la prensa y el espionaje y la persecución a periodistas son prácticas cada vez más habituales.
Para Article 19, la organización independiente y apartidista que promueve y defiende el avance progresivo de los derechos de libertad y acceso a la información de todas las personas, la realidad ha demostrado que ser periodista es sumamente peligroso.
Cuando pensamos en profesiones de alto riesgo, de esas en las que se juegan la vida, vienen a la cabeza: bomberos, soldados, rescatistas, topos, policías. Muchas, menos el periodismo. Pero lo es. México, entre otros países, es donde el acceso a la información y la búsqueda de la verdad te quita la vida, señala Article 19.
Las y los periodistas exponen las problemáticas que atañen a la sociedad, la voz de millones y al mismo tiempo, son quienes menos protección tienen para continuar con su labor. La mayor protección con que cuenta la prensa para seguir informando es el respaldo que como sociedad se brinda y la protección que el gobierno debería darles. Por esta razón, el llamado se hace urgente, una vez más, ante una violencia que arrecia y la impunidad que ésta genera.
Por los periodistas asesinados, por quienes aun bajo amenazas continúan con su labor, por quienes informan la realidad en medio de la violencia, por las generaciones de periodistas que se están formando, por quienes buscan la verdad a toda costa. Por ellas y ellos, es que se exige el cese inmediato a la impunidad y violencia.
Capacitan a legisladores en cuestión notarial
Legisladoras y legisladores locales participaron en un curso de capacitación y orientación impartido por el Colegio de Notarios de la Ciudad de México para comprender los beneficios que derivan de programas como la Jornada Notarial, de Sucesiones, de la Cultura Testamentaria y de la Voluntad Anticipada.
El Gobierno de la CDMX, los organismos autónomos y las alcaldías tienen la obligación de fortalecer la cultura ciudadana, mediante los programas, mecanismos y procedimientos que la ley establece, informó la diputada Mónica Fernández César, del PRI.