Corcholatas, sin poder y dinero
Víctor Sánchez Baños viernes 9, Jun 2023Poder y dinero
Víctor Sánchez Baños
- AMLO los manda a competir
- ¿Cómo financiarán sus campañas?
- ¿Hay límites a las actividades proselitistas
- Violarán en flagrancia la Ley Electoral
- Crearán más compromisos con empresarios
- Ahí zopilotea el crimen organizado
- Motos, urge crear una cultura de respeto
- Millones de motos en circulación bajo el desorden
- Es un vehículo versátil y revolucionario
- Gobierno, sin reglas deja vulnerables a conductores
- Legisladores, se hacen de la vista gorda
- No quieren leyes para que abusen los policías
- Miles, víctimas de ultrajes de autoridad
No puedes hacer una revolución para tener la democracia.
Debes tener la democracia para hacer una revolución
Gilbert Keith Chesterton (1874-1936) Escritor británico
Es impresionante que el Presidente de la República no tenga quién lo asesore en temas jurídicos. Al azar, sus corcholatas al estrellato pueden resultar estrelladas.
No se trata de ser ave de mal agüero en su campaña por lograr mantener en el poder al partido político que inventó y que lo llevó a la presidencia la República.
Andrés Manuel López Obrador debe cuidar las formas, pero sobre todo el fondo.
Pedir la renuncia de sus cuatro colaboradores es simplemente lanzarlos a hacer campañas que generalmente son onerosas, sin recursos que salgan del partido Morena.
Por ello surgen muchas preguntas, sobre cómo van a financiarse esas campañas. El nivel de emisión de esas corcholatas, que es lo que sobra de las botellas, nos hace reflexionar que hay riesgo de que vendan su alma al diablo.
Hay muchos que desearían financiar la campaña presidencial de cuando menos dos de esos aspirantes.
El crimen organizado estaría más que dispuesto de entregarse para lograr su objetivo fundamental de mantener los negocios en el país. No es un asunto menor y por ello se debe cuidar mediante información totalmente clara y transparente de las fuentes de financiamiento de todos y cada uno de los aspirantes a la presidencia tanto de el oficialismo como de la oposición.
Independientemente del crimen organizado, esos políticos, especialmente los de Morena, que llevan ventaja sobre la oposición, también deben transparentar sus fuentes de financiamiento de origen empresarial.
Es bien sabido que los compromisos logrados antes de las elecciones, se ven reflejados en jugosas concesiones para empresarios
Nacen grupos empresariales cada sexenio; otros mueren cada sexenio.
El nivel de amistad entre el dinero y el poder se finca en los lazos más gruesos de los billetes, en especial los verdes.
El anuncio del canciller Marcelo Ebrard de renunciar a su cargo provocó una oleada de solicitudes de licencia de otros aspirantes presidenciales de Morena, del PVEM y del PT, incluso, de la jefa de Gobierno de CDMX Claudia Sheinbaum. Todos buscan participar en la contienda interna por la candidatura presidencial rumbo a las elecciones de 2024. Los primeros en anunciar que pedirán licencia son los senadores Ricardo Monreal Ávila (Morena) y Manuel Velasco Coello (PVEM), así como el diputado federal por el PT Gerardo Fernández Noroña.
Estos dos últimos son almidón de embutidos.
La jefa de Gobierno de CDMX, anunció que será el lunes 12 de junio cuando dé a conocer su posicionamiento acerca de lo que se decida en el Consejo Nacional de Morena, en el que se discutirá si los aspirantes a la candidatura presidencial renuncian o no a sus puestos, que en su caso sería licencia por tratarse de un cargo de elección popular.
Así las cosas, en una gran farsa, que no puede contener López Obrador, los aspirantes tendrán que responder muchas interrogantes sobre lo que hacen. Lo único que necesitan es cumplir con las normas electorales que ellos mismos aprobaron.
No se les olvide. La ley es la ley.
PODEROSOS CABALLEROS
MOTOCICLISTAS SE JUEGAN LA VIDA: Es impresionante la manera como ha crecido el número de motocicletas en circulación en todo el país. Al año tiene un incremento promedio de ventas, de más del 140% desde que en el 2010 se inició la fabricación de esos vehículos a nivel nacional. En el país había un número muy limitado de motos de cilindraje 75 hasta 1250. Pero al paso del tiempo el número fue creciendo conforme llegaron marcas japonesas, chinas, estadounidenses y ya europeas, donde destaca fundamentalmente la producción nacional. Aunque parece broma, el espectacular crecimiento del número de motocicletas sorprendió fundamentalmente a los gobiernos federal, estatal y municipal. Sin embargo, todavía vemos que sigue el aumento exponencial de sus vehículos, sin que ninguno de los tres niveles de gobierno en el país ponga orden. Pero también el número de muertos por accidentes de esos vehículos ha crecido en forma exponencial. Miles de personas resultaron heridas, incapacitada, muchas de ellas de por vida, sin que nadie desde el gobierno mueva un dedo para proteger sus vidas, la de las personas que circulan alrededor de ellas, de sus familias, y de todo aquello que pueden tallar materialmente. Todos hemos sido testigos del gran desorden nacional que implican estas motocicletas. Por ello, es urgente una campaña de orientación para los conductores tanto de motocicletas como del resto de vehículos. No hay respeto de los automovilistas, camioneros hacia los motociclistas y lo peor, esto tampoco, hacia los peatones. Pero lo más grave, es la forma en que no se respeta el reglamento de Tránsito. Bueno, hasta los ciclistas se pasan la luz roja, están en áreas de riesgo y, ese desorden, los llevan, en algunos casos a la muerte. Al mismo tiempo plataformas dedicadas a la distribución de alimentos de restaurantes y comidas rápidas, como Uber, Didi y muchas otras, no se preocupan en lo más mínimo por darle a sus trabajadores las mínimas condiciones laborales. No les proporcionan el Seguro Social, tampoco uniformes, equipo para que puedan sobrevivir, bolsas, ni identificaciones a la vista de la gente y en la noche; ni mucho un salario digno. Se aprovechan de la pobreza y necesidad laboral de esas personas que se juegan la vida tratando de hacer las cosas muy rápido, de entregar sus pedidos lo más rápido posible y por si fuera poco, y pasa en todo el país, sin Seguro Social, Infonavit ni otras prestaciones. En este abandono se hace de la vista gorda tanto el gobierno federal cono los diputados. No tocar el desorden, porque en él se encuentra la corrupción, deja mucho dinero a la clase política. Así las cosas, lo único que vemos es un país donde dejan crecer el desorden para después exigir dinero de mordidas y no ponen orden para salvar vidas.