El hambre creció 30% en América Latina y el Caribe, en cuatro años
Mundo martes 30, May 2023
Efectos de pandemia, crisis climática y guerra
- Hay más de 56 millones de personas en esta situación; en 2019 había 43 millones
Según datos de la FAO, el hambre creció 30% en América Latina y el Caribe, desde 2019, debido a aspectos como la pandemia del Covid-19, la crisis climática y la guerra en Ucrania.
“Hay más de 56 millones de personas en una situación de hambre”, un 30% más que las 43 millones que había en 2019, señala el subdirector general y representante regional para América Latina y el Caribe de la FAO, Mario Lubetkin.
Durante una entrevista, resalta que la cuestión climática “cada vez está pesando más” y añade que, en algunas ocasiones, en la región -y en Europa- se dan combinaciones “dramáticas” de sequías e inundaciones, por lo que aboga por “proteger a los productores”.
“El encarecimiento de los precios surge a partir de la destrucción completa de plantaciones, pero también es la afectación tremenda de los pequeños productores de la agricultura familiar, entonces es un doble efecto”, puntualiza el subdirector.
Por ello, propone “prevenir lo previsible y mitigar lo mitigable” para preparar a los pequeños productores y a la agricultura familiar de un escenario que “puede afectar terriblemente”, una situación para la que los Gobiernos y las instituciones internacionales “tienen que prepararse para ayudar económicamente”.
“Primero, afrontar el momento de la mejor forma posible; segundo, generar fondos adecuados para absorber el impacto al operario, y tercero, que los actores, en este caso Gobiernos y el sector público y privado, logren absorber parcialmente el impacto de los precios que va a ir directamente sobre el consumidor final”, resume Lubetkin.
Importancia de la agricultura familiar
En este sentido, el representante de la FAO sostiene que la institución hace “un esfuerzo muy grande en la agricultura familiar”, debido a que representa el 80% de la base de trabajo a nivel de los terrenos y porque “garantiza producción de calidad”.
De hecho, en 2019 comenzó el Decenio de las Naciones Unidas de la Agricultura Familiar (2019-2028) con el objetivo de reivindicar el desempeño de estos emprendimientos familiares en la erradicación del hambre, la seguridad alimentaria y el desarrollo sostenible, especialmente en las zonas rurales.
Una de las iniciativas que la FAO tiene sobre la mesa es llevar la agricultura familiar a los comedores escolares para que, a partir de la producción en distancias pequeñas, los estudiantes “tengan la garantía de almorzar” porque “es la mejor forma de razonar”.
Argumenta que no proteger a la agricultura familiar “supone un peligro” porque “si al agricultor familiar se le destrozan sus propiedades, va directamente a la línea de la pobreza, en la cual no hay una amortiguación”.