Morena y su derrota
¬ Augusto Corro jueves 11, May 2023Punto por punto
Augusto Corro
La organización política Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), tras su triunfo de 2018, pasó a dormirse en sus laureles.
A partir de esa fecha, sólo la popularidad del presidente Andrés López Obrador es lo que mantiene a esa institución en primer lugar de las preferencias electorales.
Sin embargo, los políticos morenistas no supieron aprovechar la oportunidad de tener en sus manos el poder y empezaron a mostrar su debilidad. Así se ve en los rechazos de la Suprema Corte de Justicia a las reformas electorales presentadas por el mandatario tabasqueño. El trabajo político morenista se dispersa. En las Cámara de Diputados y de Senadores cada quien va por su lado.
En fechas recientes, a los legisladores de Morena y los partidos que los acompañan no lograron la aprobación de sus reformas.
En la lucha partidista interna, el destape temprano de las llamadas “corcholatas” les produjo distracciones a los morenistas.
Aunque los aspirantes afirman que realizan sus campañas electorales en horas libres, nadie les cree. Los trabajos de fines de semana no son suficientes para realizar esas labores políticas en unas cuantas horas.
Así pues, en cuanto se conocieron los nombres de los aspirantes a la silla presidencial, empezaron las cargadas políticas, como antaño.
Aún falta por ver en qué terminará la disputa para participar en los comicios presidenciales de 2024.
Será interesante ver cómo se presentará el divisionismo derivado de las ambiciones políticas.
¿Hasta dónde llegará la disciplina de los aspirantes presidenciales morenistas? Todo hace suponer que las encuestas definirán quién será la abanderada o el abanderado.
En la lista de “corcholatas” se encuentran Claudia Sheinbaum, la jefa de Gobierno de la Ciudad de México; Marcelo Ebrard, titular de Relaciones Exteriores (SRE); Adán Augusto López, secretario de Gobernación; y Ricardo Monreal, líder del Senado.
Sin duda, la competencia electoral no terminará en felicitaciones y abrazos. De llegar a un final feliz dependerá de la actuación del presidente López Obrador y de los dirigentes de Morena. ¿Cuál será el papel de Mario Delgado en la lucha interna que se avecina? ¿Seguirá Morena dormido en sus laureles?
Mientras el mandatario López Obrador continúe su lucha a favor de Morena, sus líderes pueden estar confiados de que ganarán elecciones, aunque no sepan aprovechar a tiempo su fuerza política como ocurrió en el Congreso de la Unión.
Eso sí, los legisladores morenistas prefieren buscar otras chambas, como gubernaturas, y dejar a un lado el trabajo político para apoyar a su líder moral, López Obrador.
El rechazo de la Suprema Corte a las reformas electorales fue una derrota no solamente del presidente López Obrador, sino también de su partido que no despierta desde el 2018, cuando ganó la silla presidencial.
En fin, los morenistas algún día empezarán a trabajar, si no quieren otro susto como el que tuvieron en las elecciones intermedias de 2021, en la Ciudad de México.
Las buenas intenciones
Los presidentes de Estados Unidos y México, Joe Biden y Andrés Manuel López Obrador, respectivamente, sostuvieron una llamada telefónica, en la que acordaron seguir coordinándose en materia migratoria ante el fin del polémico Titulo 42, la política de expulsiones vigente hasta ahora.
El Título 42 forma parte de la Ley de Servicio Público de Salud de Estados Unidos de 1944, que permite que el gobierno pueda detener la entrada de personas e importaciones con el fin de prevenir la introducción de una enfermedad transmisible desde afuera de las fronteras continentales de Estados Unidos.
Ojalá que ese diálogo entre los mandatarios estadounidense y mexicano ayude a mejorar el trato a los migrantes que buscan mejores condiciones de vida; de aquellas personas que buscan asilo para proteger sus vidas o trabajo para salir de la pobreza.
Los gobiernos de ambos países saben muy bien qué deben hacer para mantener en sus lugares de origen a la población; pero sus promesas se quedan en el aire. Difícilmente se realizan. En tanto las fronteras de Estados Unidos y México se convierten en escenarios llenos de violencia y muerte, así como de un desprecio total a la vida y a la dignidad de los migrantes.
¿Usted que opina amable lector?