Sonoro revés a la autocracia
Armando Ríos Ruiz miércoles 10, May 2023Perfil de México
Armando Ríos Ruiz
La Suprema Corte dio un sonoro revés a la ignorancia, a la obediencia ciega, a la inoperancia y a la absoluta ineficiencia de los morenistas incrustados en el Congreso, que aprobaron sin siquiera leer, sin siquiera conocer el contenido de la reforma a las leyes que conformaron la primera parte del aberrante plan B del Presidente, que pretendía obtener una herramienta más, para consolidar su propósito rumbo a su ridícula oligarquía y desembocadura en la dictadura.
No era necesario ver la mañanera para anticipar calificativos de su principal actor. No obstante y dada la importancia de los momentos aberrantes que vivimos en materia de gobernanza, traducida en claros abusos, con pregones de ayudar a los pobres, tenía que corroborar fehacientemente lo dado por hecho: el Primer Mandatario acusó que los ministros están al servicio de una minoría. “El Poder Judicial se encuentra podrido, pues ha usurpado funciones del Legislativo…”
Mientras, las cabezas que piensan. Que confían en las leyes porque ahora están plenamente seguras de que existe un poder independiente, pese a las muestras muy claras de aborrecimiento por no estar plegado a las decisiones de otro poder en igualdad de circunstancias como tal, aplauden esta valiente y necesaria determinación. Hoy, en México hay que ser valientes para realizar estos actos que en muchos otros países son comunes.
Saben que en esta decisión estaba cifrado un futuro lleno de vicios, de abusos y de imposiciones, a favor de una mente que, ahora se ve con una luz más intensa, ha tratado de ejecutar planes malsanos, perversos, para adueñarse totalmente del sufrido México, propiedad de todos. No sólo de una persona que cree que por el hecho de ser su Presidente, se convirtió en su dueño absoluto.
La “malquerida” y vilipendiada Corte por parte de Morena, se irguió con heroicidad. Con la Constitución en lo más alto del máximo pedestal del Derecho mexicano, con ese sonoro revés, anticipo lo que ocurrirá en breve con la segunda parte del mismo.
Ahora que sabemos que existe una institución de ese tamaño, nos atrevemos a pensar que la montaña de iniciativas presidenciales aprobadas también durante la convalecencia del Presidente, de una enfermedad que aún ofrece dudas, avaladas por diputados y senadores que no las leyeron porque ni siquiera saben leer y en el mejor de los casos, porque no tuvieron tiempo debido a la premura para validarlas, tendrán que pasar por un gigantesco filtro. Ese filtro es el que acaba de dar muestras de no obedecer ciegamente al mandatario. Más sí de aplicar estricta y consciente del Derecho.
Tal era la magnitud de las violaciones constitucionales, que hasta tres ministros impuestos por el Primer Mandatario votaron en contra. Sólo dos de sus preferidos, la plagiadora Yasmín Esquivel y Loretta Ortiz Ahlf, de los once, votaron en contra.
¿Cómo validaron en el Congreso el Plan B? Lo dije al principio: con obediencia y con ceguera, Pero el ministro Alberto Pérez Dayán, ponente del proyecto sometido al Pleno, mencionó: “Tengo la convicción de que ningún integrante de la Cámara de Diputados tuvo la posibilidad real de conocer el contenido de las leyes que habían sido aprobadas”.
El constitucionalista Ignacio Burgoa, hijo del inolvidable jurista del mismo nombre (Ignacio Burgoa Orihuela) conocido como El Rey del Amparo y también constitucionalista, declaró que la Corte realizó un magnífico ejercicio para garantizar el respeto a la Constitución. A las leyes y reglamentos, en torno al proceso legislativo. El hecho de que Morena tenga mayoría en el Congreso, no le da derecho a aprobar leyes violando el proceso legislativo.
Los lacayos, émulos de los perros que ladran cuando la caravana pasa, Mario Delgado y Adán Augusto, secretario de Gobernación, pero con pergeño de litigante de pueblo, obviamente, también reprobaron la decisión de la Corte.