Lo que necesitamos
Carlos Ramos Padilla jueves 30, Mar 2023Se comenta sólo con…
Carlos Ramos Padilla*
México necesita aplicar la Ley, regresar a un Estado de Derecho sólido en donde no se permitan abusos, arbitrariedades y un excesivo poder que permita indultos o guillotina. Con una descarada facilidad el Presidente condena y señala a sus opositores. Nadie merece elogios más que sus cercanos. Los demás, todos, estamos reprobados. En los casos más extremos, los huachicoleros e inocentes incinerados en una toma clandestina en Hidalgo, los linchamientos en Tláhuac, el derrumbe del colegio Rébsamen, el desplome del Metro, los mineros atrapados en Coahuila, los militares muertos por no abastecer de turbosina el helicóptero durante el operativo para capturar a Caro Quintero y ahora los incinerados en una estación migratoria en Ciudad Juárez, en ningún caso hay responsables de alto nivel detenidos.
No ha caído ningún gobernador, no está presa la ex directora del Metro, ningún mando militar en tribunales, ningún líder minero bajo custodia, la jefa de Gobierno en campaña, el canciller salpicando selfies, el titular de las estaciones migratorias de bajo perfil, el ex director de aduanas coordinando campaña electoral en el Estado de México, la candidata promoviéndose, luego de las contundentes pruebas de delitos, en fin, impunidad.
El miércoles por la mañana el director de la Facultad de Derecho de la UNAM, Raúl Contreras Bustamante, destacó la necesidad urgente de reencontrarnos con la excelencia y la honestidad. Defender a las instituciones, sus órganos internos y su autonomía. Formar generaciones de jóvenes cultos, informados y educados para establecer una claridad jurídica que merece la nación. Pero afuera de las aulas, en las rancherías, en los pueblos, colonias y ciudades la realidad es otra.
La violencia y las masacres se justifican culpando al pasado, señalando únicamente errores y descalificaciones. El lenguaje es burdo (guácala, chachalaca, fuchi, caca, cretinos, ya chole, carajo) sin pensar en el daño colectivo.
La fuerza de gobierno no se mide por resultados, sino por movilizaciones humanas pagadas. No hay rectitud y sí mentiras: “Se acabaron los privilegios… no más abusos… no somos iguales…”. El Presidente se burla de su homólogo de Estados Unidos, del titular del Congreso de la Unión por argumentar que “la ley es la ley”, menosprecia a los ministros de la Corte, fustiga a los consejeros del INE, persigue a los comunicadores. Lo observado hoy al interior de la Facultad de Derecho es radicalmente lo inverso. Se habló de respeto, de integridad, de valores. Se aplaudió el triunfo de los vanguardistas, se reclamó excelencia, se motivó a la superación, se agradeció a los generosos. Esto último es lo que México necesita, tenemos que llenar nuestros barrios y calles, nuestras plazas y hogares con gente preparada no rencorosa, educada no amargada, aspiracionistas no fracasados. La cimentación con que Raúl Contreras ha sostenido la misión jurídica de la UNAM los ha galardonado con ser la mejor institución académica en Hispanoamérica, afuera nadie es sancionado por incinerar a migrantes atrapados en una cárcel improvisada. La tarea es ardua, difícil y complicada, pero quisiera que mi México viviera en los términos que ayer valoré en la UNAM.
* Conductor del programa Va en serio, Mexiquense TV Canal 34.2, IZZI Canal 135 y Mexiquense Radio.